La
educación en la Nueva Era
Alice
Bailey y
Maestro
Tibetano (Djwhal Khul)
CAPÍTULO
I
EL
OBJETIVO DE LA NUEVA EDUCACIÓN
INTRODUCCIÓN
La presente obra abarca tres aspectos distintos del tema general:
los nuevos métodos y conceptos educativos del futuro. El objetivo
de la nueva educación consiste en dilucidar el desarrollo cultural
de la raza y considerar el próximo paso que debe darse para el desarrollo
mental de la humanidad. Si la enseñanza es verdadera debe estar a
tono con el pasado, proporcionar un campo de realización en el presente
y ofrecer mayor iluminación a quienes han logrado o están logrando
los objetivos aquí expuestos. Debe señalar un futuro espiritual. Esto
es lo que se necesita ahora.
La
palabra "espiritual" no se refiere a los asuntos religiosos.
Toda actividad que impele al ser humano hacia
algún tipo de desarrollo –físico, emocional, mental, intuitivo, social–,
si es para salir de su actual estado, es esencialmente de naturaleza
espiritual, e indica la vivencia del ente divino interno. El
espíritu del hombre es inmortal, perdura eternamente, progresa gradualmente
etapa tras etapa en el Sendero de evolución, desarrollando firme y
sucesivamente los aspectos y atributos divinos.
Los
tres puntos de nuestro tema general son:
1. La Técnica de la Educación del Futuro.
2. La Ciencia del Antakarana. Concierne al método de eliminar la brecha
que existe en la conciencia del hombre entre el mundo de la experiencia
humana común, el triple mundo del funcionamiento físico, emocional
y mental, y los planos superiores de los llamados desarrollos espirituales,
el mundo de las ideas, de la percepción intuitiva y de la comprensión
y la visión interna espiritual.
3. Los Métodos para la Construcción del Antakarana conducen a vencer
las limitaciones físicas y psicológicas que restringen la libre expresión
de la ingénita divinidad en el hombre. En este libro solamente podemos
preparar el terreno para este tercer punto, porque el tema implica
prácticas avanzadas de meditación que deben ser encaradas gradualmente.
En otros me he ocupado de la meditación.
Cabría
formularse la siguiente pregunta, ¿por qué es de valor dedicar tiempo
a lo que pertenece aún al futuro? Responderé haciéndoles recordar
que "como el hombre piensa, así es él". Este es un axioma
o una verdad común en el esoterismo. Por consiguiente, lo que es verdad
respecto al individuo, lo es también para el grupo, y así como un
grupo piensa, así reaccionará eventualmente. A medida que las ondas
mentales del grupo penetran en la atmósfera mental de la humanidad,
los hombres reciben las impresiones y se inician con mayor facilidad
los nuevos modos de vida y desarrollo. Aquí sólo trato de darles algunas
breves y generales ideas que servirán para indicar la dirección de
mi pensamiento y el propósito que persigo. Quizá la forma más fácil
de hacerlo sería formular ciertas proposiciones interesantes que pudieran
aportar iluminación.
I.
La educación, hasta el presente, se ha ocupado del arte de sintetizar
el pasado, de las conquistas logradas en todos los sectores del pensamiento
humano y de las realizaciones obtenidas hasta ahora por el conocimiento
humano y, además, por las ciencias que han evolucionado en el pasado.
En principio mira hacia atrás y no hacia el futuro. Les recordaré
que estoy generalizando, y que existen muchas y notablemente pequeñas
excepciones a esta actitud.
II.
La educación se ha preocupado principalmente de organizar la mente
inferior, y la capacidad mental del niño ha sido mayormente medida
de acuerdo a cómo reacciona, ante el cúmulo de informaciones (en lo
que a la educación concierne), a los datos recopilados y relacionados,
impartidos secuencialmente, extractados y arreglados con el fin de
equipar al niño y competir con el conocimiento de otros.
III.
La educación, hasta la fecha, ha consistido en su mayor parte, en
el entrenamiento de la memoria, aunque actualmente se reconoce que
esta actitud debe terminar. El niño ha tenido que asimilar hechos
que la raza cree que son veraces y comprobados y considerados adecuados
en el pasado. Cada época tiene una norma distinta para dictaminar
lo que cree que es apropiado. La era pisciana se ocupó del esfuerzo
por alcanzar el ideal presentido. De allí que tengamos una historia
que enseña los métodos por los cuales las tribus adquirieron estado
de nación, mediante la agresión, la guerra y la conquista. Esto indica
lo realizado por la raza.
La
geografía se ha basado en una reacción similar, ante la idea de expansión,
y a través de ella el niño aprende cómo los hombres, impulsados por
las necesidades económicas y por las de otra naturaleza, conquistaron
territorios y anexaron tierras. Esto también fue considerado, en verdad,
una conquista racial. A las diversas ramas de la ciencia se las considera
como continuadoras de la conquista de territorios, lo cual se proclama
también como realización racial. Las conquistas de la ciencia, las
conquistas de las naciones y las conquistas de los territorios, indican
el método empleado en la era pisciana, con su idealismo, militancia
y separativismos en los campos religioso, político y económico. Pero
la era de la síntesis, del inclusivismo y de la comprensión, está
sobre nosotros, y la nueva educación de la era acuariana debe comenzar
a penetrar muy suavemente en el aura humana.
IV.
La educación es algo más que el entrenamiento de la memoria y la información
suministrada al niño o al estudiante, respecto al pasado y sus realizaciones.
Dichos factores ocupan su lugar, pero el pasado debe ser comprendido
y estudiado, porque de éste debe surgir lo nuevo, su nueva flor y
su nuevo fruto. La educación abarca algo más que la investigación
de un tema y la formulación de las consiguientes conclusiones que
llevan a hipótesis, que a su vez conducen a mayores investigaciones
y conclusiones. Es algo más que un sincero esfuerzo para que un niño
y un adulto lleguen a ser buenos ciudadanos y padres inteligentes
en vez de una carga para el Estado.
La
educación tiene una aplicación mucho más amplia que la de formar seres
humanos que sean un "activo" o un "pasivo" comercial.
Posee otro objetivo; proporciona una vida agradable y capacita a los
hombres y mujeres para que adquieran una cultura que les permita participar
e interesarse en los tres mundos de los asuntos humanos. Además de
todo lo antedicho debería suministrar mucho más.
V.
La educación tiene tres grandes objetivos desde el punto de vista
del progreso humano:
Primero,
como lo habrán podido captar, la educación debe hacer del hombre un
ciudadano inteligente, un padre sensato y una personalidad controlada;
debe capacitarlo para que desempeñe su parte en el trabajo mundial,
adaptarlo a que viva en paz y armonía y que ayude a sus semejantes.
Segundo,
debe permitirle eliminar la brecha que existe entre los diversos aspectos
de su naturaleza mental. Aquí reside el principal énfasis puesto en
las instrucciones que tengo la intención de impartir.
La
filosofía esotérica enseña, como bien saben, que en el plano mental
hay tres aspectos de la mente, o esa criatura mental que llamamos
hombre, tres aspectos que constituyen la parte más importante de su
naturaleza:
1. Su mente concreta inferior, el principio razonador. Éste es el
aspecto del hombre que nuestros procesos educativos pretenden tratar.
2. El Hijo de la Mente que llamamos yo o alma. Es el principio inteligencia
y se lo denomina con diversos nombres en la literatura esotérica,
tales como Ángel Solar, Agnishvattas, principio crístico, etc. La
religión pretende haberse ocupado de esto en el pasado.
3. La mente abstracta superior, custodia las ideas y aquello que lleva
iluminación a la mente inferior, cuando ella está en contacto con
el alma. Con este mundo de ideas ha pretendido tratar la filosofía.
Podemos
denominar estos tres aspectos:
La mente receptiva, de la cual se ocupan los psicólogos.
La mente individualizada, el Hijo de la Mente.
La mente iluminadora, la mente superior.
Tercero,
la brecha que existe entre la mente inferior y el alma, tiene que
ser eliminada mediante un puente. En forma curiosa la humanidad siempre
lo ha comprendido así y por lo tanto ha hablado de "obtener unidad“,
"realizar la unificación" o "alcanzar el alineamiento".
Éstos son todos intentos de expresar esa verdad que ha sido intuitivamente
comprendida.
VI.
La educación también debería ocuparse, durante la nueva era, de eliminar
la brecha que existe entre los tres aspectos de la naturaleza mental:
el alma y la mente inferior, estableciendo así la unificación entre
el alma y la personalidad, y entre la mente inferior, el alma y la
mente superior. La raza está preparada para esto y, por primera vez
en la existencia humana, el trabajo de unión puede progresar en una
escala relativamente amplia. No necesito extenderme sobre el particular
porque concierne a los tecnicismos de la Sabiduría Antigua, a lo cual
me he referido ampliamente en otros libros.
VII.
La educación es por lo tanto la Ciencia del Antakarana, Ciencia y
término que constituyen la forma esotérica de expresar la veracidad
de erigir dicho puente. El antakarana es el puente que el hombre construye
–mediante la meditación, la comprensión y el trabajo creador y mágico
del alma– entre los tres aspectos de su naturaleza mental. En consecuencia
los objetivos primordiales de la educación del futuro serán:
1. Establecer el alineamiento entre la mente y el cerebro, mediante
la correcta comprensión de la constitución interna del hombre, particularmente
del cuerpo etérico y los centros de fuerza.
2. Erigir un puente entre el cerebro, la mente y el alma, para obtener
una personalidad integrada, como la expresión del constante desarrollo
del alma que mora internamente.
3. Construir el puente entre la mente inferior, el alma y la mente,
superior, a fin de alcanzar la iluminación de la personalidad.
VIII.
La verdadera educación es en consecuencia la ciencia que vincula,
primero, las partes integrantes del hombre, y a éste con su medio
circundante, y después con el todo mayor donde tiene que desempeñar
su parte.
Todo
aspecto considerado como inferior, será siempre la expresión del próximo
aspecto superior. En esta frase he expresado una verdad fundamental
que además de incorporar el objetivo, indica el problema que tienen
por delante todos aquellos que se interesan por la educación. El problema
consiste en determinar correctamente el centro o foco de atención
del hombre y en precisar dónde está centrada principalmente la conciencia.
Por lo tanto, él debe entrenarse de tal modo que sea posible trasladar
ese enfoque a un vehículo superior. Podemos expresar esa idea en forma
análogamente veraz, si decimos que el vehículo, que aparentemente
parece ser de gran importancia, puede y deberá llegar a ser de secundaria
importancia, a medida que se convierte simplemente en el instrumento
de lo que es superior a él.
Si el cuerpo astral (emocional) es el centro de la vida de la personalidad,
el objetivo del proceso educativo impuesto al sujeto consistirá en
hacer de la naturaleza mental el factor predominante; entonces el
cuerpo astral controlado por la mente es sensible y se convierte en
aquello que lo impresiona en el medio ambiente.
Si
la mente es el centro de atención de la personalidad, la actividad
del alma debe llevarse a su más plena expresión, y así avanza constantemente
el trabajo, y progresa de un punto a otro hasta alcanzar el último
peldaño de la escala.
Debe
observarse que esta exégesis de la mente y la necesaria construcción
del puente, sólo es la demostración práctica de la verdad del aforismo
ocultista que dice: "Antes de que el hombre pueda hollar el sendero,
debe convertirse en el Sendero mismo". El Antakarana es simbólicamente
el Sendero. Ésta es una de las paradojas de la ciencia esotérica.
Paso a paso y etapa tras etapa construimos ese sendero, así como la
araña teje su tela. "Ese camino de retorno“ realizado dentro
de nosotros mismos, es el Camino que debemos descubrir y recorrer.
....
PUNTO DE VISTA DE LA PATERNIDAD
He comenzado el tema desde el punto de vista de la ciudadanía por
dos razones bien definidas: primero, porque es una regla fundamental
en esoterismo razonar siempre de lo universal a lo particular y, segundo,
porque el tema de la ciudadanía, de la relación de la unidad con el
todo y del individuo con el estado, es el tópico absorbente de los
asuntos mundiales de hoy.
El
periodismo , la radio y las actividades de gobierno se ocupan de este
tema, que incluye ineludiblemente el problema total de la libertad
individual y de la responsabilidad colectiva. La humanidad debe comprender
y manifestar esta relación tan sutil y estar a tono con los principios
subyacentes en toda la estructura humana y planetaria. Tal es la estructura
de una Jerarquía omniabarcante. A pesar del razonamiento de las mentes
humanas, esta Jerarquía existe, y se extiende desde el átomo de la
sustancia, en las profundidades mismas de la manifestación, hasta
la totalidad del sistema solar, expresando en su graduado ascenso
todo tipo de conciencia, desde lo infinitésimamente pequeño hasta
lo infinitamente grande. Consideramos un pequeño sector, muy pequeño
por cierto, de la estructura jerárquica. Nuestro campo de investigación
es el de la cuarta Jerarquía Creadora, que es la jerarquía de seres
humanos; concierne a la relación de sus miembros dentro de su periferia
jerárquica; se ocupa también del posible grado de existencia de los
reinos subhumanos que están en un peldaño inferior en la escala de
la existencia jerárquica, y de esa estructura jerárquica que se halla
inmediatamente sobre lo humano en la escala del ser, el quinto reino,
o reino espiritual, el reino de Dios.
El hombre definitivamente está vinculado a esa gran unidad jerárquica
que llamamos reino animal, tercer reino de la naturaleza, por medio
de sus cuerpos animal, etérico y astral. Está también vinculado con
el reino de las almas, porque su propia alma es parte integrante de
ese reino, así como su cuerpo físico es parte integrante del reino
animal. El aspecto estricta y específicamente humano del hombre, es
la mente o el cuerpo mental, órgano que relaciona a todas las razas
humanas.
En conexión con nuestro tema, quisiera, sin embargo, que tuvieran
en cuenta que "los hilos de una conciencia iluminada" que
creamos infaliblemente, y que con el tiempo formarán el antakarana,
deben tejerse entre todas y cada una de las unidades jerárquicas,
y dentro del propio reino humano estas relaciones vinculadores y factores
de unión unificadores, deben ser establecidos entre un ante y otro
y entre un grupo y otro.
En las primeras etapas esto se ha efectuado en gran escala por la
influencia de la cultura y de la civilización prevalecientes.
Por el impacto externo y por la influencia telepática se efectúa un
cambio gradual y lento, porque en el comienzo del proceso evolutivo
el desarrollo es tan lento que apenas se percibe. Sin embargo, los
cambios subjetivos se forjan inevitablemente en la vida del individuo.
A medida que la evolución progresa, el proceso es cada vez más rápido
y, en la actualidad, en los denominados países civilizados, las zonas
afectadas por la civilización se amplían rápidamente y los efectos
culturales se profundizan también con la misma rapidez.
Al pensador moderno le resulta difícil concebir una época en la que
no hubiera existido una conciencia fusionada, racial, na-cional o
religiosa, tal como se expresa en el mundo actual. Hasta el ser más
imaginativo es incapaz de visualizar un estado mental en que la conciencia
fuera puramente instintiva, autocentrada, en sentido físico, e incapaz
de registrar contactos más amplios que los de la pareja, del vástago
y de las demandas de los apetitos físicos. Se ha intentado hacer un
estudio de ese estado de conciencia, en conexión con la evolución
de las tribus que hoy están desapareciendo rápidamente en el mundo
moderno, pero hasta en eso resulta imposible considerar adecuadamente
las impresiones e influencias sutiles que resultan del pensamiento
unido y de la presión mental interna de la parte civilizada de la
humanidad. El mundo de los hombres es paulatinamente cada vez más
consciente de sí mismo y va diferenciándose claramente del animal
y reconoce al mismo tiempo su relación con él. El estado de conciencia
vinculado al reino de las almas comprende diversas escuelas psicológicas
y se lo denomina oculto o místico.
Por lo tanto en relación con la conciencia de la humanidad, dividiremos
el tema en tres partes:
1. Lo concerniente al mecanismo tangible, el cuerpo animal, y al mecanismo
de respuesta, por el cual se hacen posibles los contactos objetivos
y externos.
2. Lo que concierne a la vida interna o psicológica del hombre, que
consiste principalmente en el deseo, la aspiración, la ambición y
la actividad mental, y pueden manifestararse en su forma animal síquica
mental o espiritual.
3. Lo que concierne a la vida espiritual del hombre y su relación
con el mundo de las almas, que incluye incidentalmente la relación
con su propia alma.
En el transcurso del tiempo, estos tres aspectos del desarrollo en
el reino de la conciencia, han llevado a la humanidad a reconocer
no sólo las relaciones personales internas del hombre mismo (conduciéndolo
incidentalmente a la comprensión de su propio equipo físico, ppsicológico
y mental), sino también han conducido al género humano a la comprensión
de las diversas relaciones grupales humanas, de las cuales la primera
y más importante, hasta ahora, ha sido la unidad grupal de la familia.
Es
aquí donde se ha producido una de las principales diferenciaciones
entre el estado de conciencia humano y el animal, por medio de la
imposición divina de la Ley de la Necesidad, ley que ha dado la oportunidad
de desarrollar en el hombre el sentido de responsabilidad hacia la
familia. Cuando el ave o un animal puede valerse por sí mismo, físicamente,
es separado de sus padres y librado a sus propios recursos. En el
caso de la familia humana, la etapa del cuidado físico del niño, así
como su desarrollo ppsicológico, se ha extendido cada vez más, hasta
que el padre o la iglesia, la comunidad o el estado, se hacen responsables
de él durante muchos años -el tiempo varía de acuerdo al país y la
clase social.
Esto ha alterado totalmente el aspecto de las cosas y, por consiguiente,
de lo primero que se da cuenta el niño, como individuo, es del grupo
familiar, considerado como una unidad dentro le la comunidad. En esa
relación grupal particular, a través de, las épocas (tanto simbólicamente
como de hecho), se conservan v desarrollan los siguientes factores
subyacentes en la estructura misma de la propia existencia presentados
a la raza como algo esencialmente ideal:
1. El reconocimiento del estado jerárquico,
que en última instancia es la relación existente entre lo menor y
lo mayor, entre los más débiles y los más fuertes y entre los más
experimentados y los menos experimentados. De aquí proviene el sentido
de protección, que es la expresión de una de las formas del aspecto
amor en el universo.
2. El reconocimiento de la responsabilidad,
heredada, aplicada y aceptada. Esta es la relación entre los
viejos y los jóvenes, los inteligentes y los ignorantes.De ahí la
necesidad de dar una oportunidad para que se desarrolle el conocimiento.
3. El reconocimiento de la facultad de perdonar,
que es o debería ser la expresión de la relación entre un ente y otro,
dentro del grupo mayor, o entre un grupo y otro, dentro de un todo
aún mayor. El perdón es esencialmente el proceso por el cual
nos damos mutuamente en forma psíquica, y es una de las expresiones
rudimentarias de la cualidad del autosacrificio, que a su vez es un
aspecto de la naturaleza volitiva de la Deidad. No obstante hallarse
relacionado con la vida monádica o volitiva, todavía es erróneamente
comprendido o interpretado. Esta facultad es, en realidad, el sentido
de síntesis o de identificación, "uno para todos y todos para
uno". Actualmente este sentido va desarrollándose como nunca,
pero se halla aún en estado tan embrionario que las palabras no pueden
explicarlo. Esta facultad de perdonar no es una forma de olvido magnánimo
o disimulo, tampoco un gesto de superioridad para borrar lo pasado.
Es el aliento mismo de la vida, la dación de todo al todo.
4. El reconocimiento de la interacción grupal,
dentro de la amplia relación mundial -en forma justa, armoniosa y
rítmica. Es el sentido de las correctas relaciones realizadas
conscientemente y desarrolladas armónicamente.
En el futuro período y bajo la influencia de la nueva educación, estos
cuatro reconocimientos básicos se enseñarán e inculcarán a los niños
en todas las escuelas y colegios. Así los principios enunciados regirán
y desarrollarán el nuevo tipo de unidad familiar que inevitablemente
vendrá a la existencia.
El grupo familiar (como todas las cosas humanas) ha participado de
la general separatividad, de la egoísta e individual exclusividad
aislada, basados en las diferencias de clases, tradición heredada,
actitudes raciales y costumbres nacionales. Las familias (de cualquier
clase y posición social) presentan ante el mundo un frente unido;
los padres defienden a sus hijos y su posición y situación, con razón
o sin ella; el orgullo de la familia, la tradición
y el linaje es muy exagerado, interponiendo diferentes barreras que
separan hoy a un hombre de otro, una familia de otra y un grupo de
otro. Este aferramiento al pasado que mantiene la familia,
es el principal factor responsable de la rebelión de la juventud moderna
contra el control paterno, aunque otros factores
-tales como la rebeldía contra la religión impuesta por la fuerza
y las viejas y gastadas normas y filosofías- son igualmente responsables.
Sin embargo, bajo el próximo orden mundial, los educadores prepararán
a los jóvenes en las escuelas y colegios para que puedan participar
activa y conscientemente en la vida grupal. Para esto los educadores
tendrán que ser preparados a fin de que reconozcan los cuatro factores
que he señalado como esenciales al progreso humano en esta época.
Cuando éstos sean captados y practicados, producirán las necesarias
correctas relaciones, y eventualmente un mundo armónico.
Jerarquía,
responsabilidad, intercambio grupal, perdón o sacrificio son
las cuatro categorías del reconocimiento que permitirá
a cada persona desempeñar su parte y participar en la construcción
del puente entre una persona y otra, entre un grupo y otro
y entre una nación y otra, quedando así establecido el nuevo
mundo donde serán reconocidas las relaciones de la comunidad,
lo cual traerá oportunamente la civilización iluminada y amorosa,
que será la característica de la era acuariana.
|
Estos cuatro conceptos fundamentales se hallan detrás de la Ciencia
del Antakarana, de la Ciencia de la Meditación y de la Ciencia del
Servicio. No deben interpretarse en forma sentimental, ni exponerse
como se expresan las ideas en vigencia, sino interpretarse desde el
punto de vista de la inteligencia entrenada y de una conciencia espiritualmente
desarrollada.
La paternidad no debe ser contemplada como una función primordialmente
animal o exclusivamente social o económica, según se la considera
en líneas generales en la actualidad. Debe enseñarse cuidadosamente
a establecer un hilo de luz, preparado o construido deliberadamente
(como parte definida del antakarana mundial) entre el padre y el hijo,
hasta en las etapas prenatales. De este modo se obtendrá una íntima
armonía "en la luz", sin el indebido establecimiento de
una autoridad y control mental.
Esta última frase demostrará cuán imposible ha sido hasta ahora acelerar
la enseñanza de esta nueva ciencia del antakarana. Es posible hoy
sentar las bases de esta nueva enseñanza, porque los jóvenes de todos
los países están imponiendo a sus padres y maestros la idea de su
decidida y esencial independencia. La rebelión de la juventud, a pesar
de todos los desastres inmediatos e individuales, ha sido algo anhelado,
y ha preparado el camino para el establecimiento de correctas y mejores
relaciones, basadas en las premisas que he dejado sentadas.
Lo único que puedo hacer aquí es señalarles los fundamentos de la
nueva educación, lo cual preparará a la juventud del mundo para las
responsabilidades y deberes de la paternidad. Todo está relacionado
con el problema sexual y también con el problema del estado y su control,
en forma mucho más intensa de lo que generalmente es considerado.
Son dos problemas que surgirán ahora en todo su significado, y a los
cuales no puedo referirme aquí. La paternidad es el resultado, resultado
inevitable, de la relación de dos cuerpos animales, y quisiera que
reflexionaran -aunque en forma ineficaz- sobre las amplias implicaciones
grupales de esta afirmación. La paternidad es lo que hace posible
la creación de un Estado, de una nación o de un grupo, en lo que concierne
a la manifestación, y aquí nuevamente la magnitud del problema es
aplastante.
La
paternidad tiene también una estrecha relación simbólica con la Jerarquía
porque el ente familiar constituye su símbolo en la tierra, y es a
través de dos hechos, de la relación sexual y del nacimiento físico,
que la vasta Jerarquía de almas puede lograr la manifestación física
y obtener la perfección espiritual en los tres mundos de la evolución
humana.
Se
podría (y este hecho debiera tenerse muy en cuenta) dividir la Jerarquía
en dos grupos básicos:
1. Las almas que han alcanzado la perfección y lograron el estado
de servidores divinos.
2. Las almas que están en proceso de evolución y pasan a través de
períodos de continuas encarnaciones.
La idea de la gestación; del nacimiento y de las subsiguientes manifestaciones,
corre como un hilo conductor en todo pensamiento esotérico. Los antiguos
instructores de la raza, enviados por la Jerarquía de vez en cuando,
emplearon siempre el simbolismo del proceso natural del nacimiento
para ilustrar y aclarar la necesaria instrucción y sentar el fundamento
espiritual de la verdad que llevará a la raza, en la era futura, a
nueva formas y modos de pensar. Para el esotérico
existe el proceso de nacer en la oscuridad de la encarnación física,
que a su vez es el proceso preparatorio ordenado de antemano que conduce
a nacer en la luz, a ser realizado en la luz, trayendo la exteriorización
del cuerpo de luz. Este proceso continuo (porque en todas las
épocas ha tenido lugar este nacimiento en la luz) producirá ese futuro
mundo de luz que los procesos naturales de la evolución tienen como
propósito revelar. Éste es el "segundo nacimiento" mencionado
en el Nuevo Testamento, en que el hombre "nace de nuevo"
en el mundo de luz y amor.
Desde el punto de vista de la nueva educación, estos nuevos conceptos
gobernarán la actitud mental de los padres en la civilización venidera,
y el adolescente a su vez deberá ser preparado para este fin. Lo que
prevalece en esta época ea la errónea interpretación de los nuevos
conceptos, por eso se insiste en la necesidad de aumentar la natalidad
-en ciertos países y en todos loa países nacionalistas. Hoy nos ocupamos
de la natalidad, su aumento o disminución, el cuidado de las madres
y los hijos desde el período prenatal, y la educación de los padres.
De todo esto surgirán, con el tiempo, nuevas ideas y actitudes que
estarán a tono con la cultura y los conceptos del mundo futuro. Pero
el motivo de este afán es actualmente erróneo. El impulso interno
de considerar el problema total de la paternidad en forma nueva y
mejor, es bueno. Los objetivos que se ofrecen a la raza no son, sin
embargo, los más elevados ni los más deseables. La necesidad de la
época producirá oportunamente cambios radicales en la consideración
de la vida de la familia, de la paternidad y de la educación de los
niños. Existe un núcleo que está preparando el camino -y podrá hacerlo
si se efectúa un trabajo fiel, cuidadoso e inteligente.
TENDENCIAS
QUE INDICAN DESARROLLOS FUTUROS
Como
he dicho anteriormente, este tema de la paternidad y de la educación
del niño, es demasiado extenso para que pueda discutirse amplia y
satisfactoriamente en estas breves instrucciones, pero se pueden hacer
algunas declaraciones que indiquen los desarrollos futuros y señalen
dónde puede realizarse el cambio de actitud.
Las enumeraré:
1. En el futuro no se pondrá el énfasis en concebir
vástagos y crear familias numerosas, sino en formar calidad e inteligencia.
Esto incluye el estudio de esa ciencia de la cual la eugenesia es
una distorsionada indicación exotérica. Cuando se establezca científicamente
el hecho de la existencia del cuerpo etérico con sus centros de fuerza,
la profecía anterior tendrá significación y sentido.
2. Con el tiempo se considerará errónea la necesidad
de acrecentar la natalidad, y esto por tres razones que sería de valor
estudiar:
a. Muchas almas están logrando la perfección
rápidamente y se van de nuestra vida planetaria. Este proceso
se intensificará durante la futura era acuariana. Debe recordarse
que la puerta aún permanecerá cerrada por algún tiempo para el reino
animal, y durante un largo período ninguna individualización obtendrá
la culminante materialización en cuerpo físico. Cualquier individualización
que pueda ocurrir, será la que se denomina en términos técnicos "individualización
en el pralaya para esperar allí el llamado inevitable". Por lo
tanto, no habrá la necesidad de crear formas humanas, apresurada y
masivamente.
b. La situación económica hará necesaria la imposición de ciertas
restricciones físicas, porque es evidente que hoy, mas allá de cierto
punto, el planeta no puede sostener a Ia humanidad. Las implicaciones
de esto son más fundamentales de lo que puede imaginarse. Aquí también
tenemos la evidencia de la creciente comprensión de la raza en esta
línea particular, comprensión que es aún mal interpretada y distorsionada
y ha traído el uso sin restricciones de métodos contra la fecundación.
A medida que se desarrolla la inteligencia de la raza (que se está
produciendo con mucha rapidez) y se captan las Leyes del Ritmo y del
Acercamiento, se verá que existen ciertas reacciones innatas que evitan
la procreación y, por lo tanto, no serán necesarios los medios mecánicos.
Esto es todavía extremadamente indefinido y casi imposible de comprender,
pero la raza está obteniendo el control de la personalidad con toda
rapidez (aunque nuestra idea de la rapidez no es la de ustedes) lo
cual producirá a su vez ciertos cambios automáticos e inherentes.
Este punto deben captarlo los esotéricos.
c. La gran promiscuidad de los sexos y la ley que en muchos países
permite al hombre tener muchas esposas (lo que constituye un insulto
a la mujer), cesará inevitablemente con el tiempo. Finalmente esto
no es más que una forma legalizada de prostitución, y el hecho de
que tenga el respaldo de la tradición y siglos de práctica, no altera
la posición que adopto. Esta falta de reglamentación y de ritmo esencial
ha traído, como consecuencia natural, que hayan nacido millones de
almas que no debieron de haber nacido en esta época ni haber venido
a la manifestación exotérica. Este hecho es en gran parte responsable
de la mayoría de las dificultades económicas del presente y del moderno
dilema planetario. La situación económica y la necesidad de mantener
indebidamente esta enorme población del planeta, es la causa de la
agresión y la codicia imperantes en las naciones, a través de todas
las épocas, y del esfuerzo que hoy, como nunca, se está haciendo para
proporcionar mejores y más adecuadas condiciones de vida. Por lo tanto,
la guerra ha sido el resultado inevitable de esta ilimitada y desmedida
proliferación de la especie humana. Esta falta de control sexual ha
traído al mundo miles de niños que no fueron deseados, cuya presencia
es sólo el resultado de relaciones sexuales accidentales e incontroladas,
que de ninguna manera fueron planeadas por los padres porque no tuvieron
la intención de que vinieran a adquirir experiencias las almas encarnadas,
ni conscientemente les ofrecieron la oportunidad de apresurar el "nacimiento
en la luz", prestando así un servicio al plan divino.
3. La ciencia de la eugenesia y de la higiene sexual, juntamente con
el desarrollo de las relaciones sexuales mentalmente controladas,
progresará constantemente. Mucho de lo que hoy se enseña sobre esto
es y tiene móviles erróneos basados en el temor, en la conveniencia
y en el deseo de mejorar los atributos raciales y alcanzar la perfección
física. La adecuada forma del control científico del sexo que conduzca
a esas correctas condiciones en que las almas deben encarnar, no puede
ser impuesta por la ley. Los objetivos deseados podrán ser alcanzados
a través de métodos educativos, y se está haciendo ya, aunque en forma
rudimentaria y embrionaria; el verdadero y necesario cambio en la
conciencia humana aparecerá sólo cuando la raza se someta a una ley
rítmica bajo la cual funcionan, por ejemplo, las vidas animales, o
la ley de las estaciones que rige las formas del reino vegetal-, transfiriéndose
así el concepto total a una vuelta más alta de la espiral evolutiva.
Cuando esto se consiga, se producirán ciertos cambios fundamentales
-vida sexual reglamentada, vida paternal organizada y diferencias
en la actitud mental racial con respecto a las relaciones sexuales
y su consecuencia obligada, el nacimiento.
4. Hasta ahora, únicamente las personas religiosas piensan en los
dos nacimientos inevitables y necesarios,
el físico y el espiritual, y creen que la relación entre ambos es
puramente simbólica y que de ningún modo debe interpretarse textualmente.
Sin
embargo, existe una estrecha relación y analogía entre ellos que,
a medida que transcurre el tiempo, será más clara.
No
puede haber nuevo nacimiento ni creación del "cuerpo de luz"
ni "manifestación de los hijos de Dios" fuera del proceso
del nacimiento físico. Tampoco puede haber fusión entre los
opuestos alma y personalidad , fuera de los procesos fisiológicos
del sexo, y digo esto deliberadamente, porque en la relación de los
sexos el elemento tiempo entra en la experiencia del alma; la comprensión
de ello vendrá cuan-do la doctrina de la reencarnación se comprenda
debidamente y se enseñe universalmente. De ahí que la magia sexual
y las enseñanzas tántricas internas se hayan extraviado tan lamentablemente,
centralizándose en el desarrollo individual y en la obtención de alguna
expe-riencia que se presume impulsa el logro espiritual. La idea fundamental
que rige todo lo que hasta aquí se ha dicho acerca de las relaciones
sexuales, tiene dos implicaciones.
a. Proporcionar cuerpos para las almas
que vienen a la encarnación, de modo que puedan llevarse a
cabo ciertos desarrollos evolutivos predestinados de antemano,
pudiendo así obtenerse un desarrollo espiritual que está también
predestinado y es inevitable.
b. Impartir el procedimiento científico
mediante el cual los cuerpos "construidos en la oscuridad"
puedan gradualmente ser reemplazados por cuerpos "construidos
en la luz". De esta manera se logrará la manifestación
del fundamental aspecto luz del mundo y su estructura subyacente.
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5. La relación sexual tiene, por consiguiente, sólo un objetivo principal:
producir cuerpos físicos para las almas que vienen a la vida.
La relación entre el alma y la personalidad es, en consecuencia, un
aspecto superior de la expresión sexual básica del universo, y esta
relación tiene la finalidad de hacer aparecer un hijo de Dios como
luz en el mundo, lo que le permitirá decir, como lo hizo el Cristo,
que él es "la luz del mundo" y cumplir el mandato "deja
que brille la luz". De la misma manera la relación entre
la humanidad y la Jerarquía está destinada a traer el esplendor de
la luz grupal, y hacer surgir de esos dos grupos, o cuerpos planetarios,
mediante su íntima fusión e interrelación científica, esa forma de
manifestación divina denominada en Occidente el "Reino de Dios".
Quisiera pedirles que reflexionen sobre estos cinco puntos o afirmaciones,
que sólo se proponen sugerir, evocar un pensamiento consciente e indicar
esas ideas elementales que producirán nuevas actitudes en la responsabilidad
paternal. Existen hoy en el mundo muchos hombres y mujeres que piensan,
son conscientes y desean honestamente que se realice lo que he expuesto
anteriormente y trabajan para esos fines. Pero millones de personas
ignoran totalmente la situación, tanto en el aspecto económico como
en el esotérico. Una de las tareas del educador del futuro será enseñar
el significado de la Ley de Renacimiento, para efectuar así un cambio
tan profundo en la actitud racial hacia la vida y el sexo, el nacimiento
y la paternidad, que el ritmo sexual, la experiencia cíclica, la preparación
psicológica y dirigida y el control de la construcción del cuerpo,
puedan efectuarse y reemplazar los actuales métodos basados en la
respuesta incontrolada al impulso, al deseo sexual y a la irreflexiva
procreación. La vasta población del mundo es hoy el resultado de la
respuesta animal a esos impulsos y a la promiscuidad general, que
quizás sea el principal factor, hablando esotéricamente, y desde el
punto de vista de la Jerarquía, de la actual angustia mundial, de
las dificultades económicas y de las agresiones nacionales. Reflexionen
sobre esto, porque contiene una indicación.
Resumiendo
brevemente podría decir que el objetivo de la raza, a medida que vamos
entrando en la nueva era, consiste en "crear en la luz mediante
la actividad ordenada del cuerpo-luz".
Esto
involucra comprender las diversas expresiones de la luz -la luz de
la comprensión, la luz de un proceso preordenado y previamente comprendido
y la luz de la experiencia. Estos aspectos más sutiles de la luz,
los cuales conducen, controlan y dirigen la conciencia humana en relación
con la generación racial, la perpetuación de la especie y la conciencia
de la luz (ciencia que trata lo concerniente a la sustancia y a la
forma, porque no debe olvidarse que luz y sustancia son sinónimos),
forman parte integrante de la educación de los padres y de los adolescentes;
entonces podremos esperar los ajustes y cambios que sobrevendrán,
con la confianza y certeza de que todo será para bien.
Durante los próximos mil años, los móviles que conducen al matrimonio
sufrirán profundos cambios, aunque el motivo básico -el amor entre
dos personas- permanecerá inalterable o, mejor dicho, será mejor comprendido
y desinteresado. La actitud de los padres hacia los hijos cambiará
drásticamente y el punto de vista de la responsabilidad se acentuará
continuamente, aunque esa responsabilidad concernirá especialmente
al tiempo, la oportunidad y a la creación correcta de las formas que
asumirán la almas que vienen a la vida.
Cambiará
la idea de la procreación acelerada y de la creación de familias
numerosas con las cuales el Estado puede alcanzar sus fines.
La preparación de los adultos para los deberes de la paternidad
y su entrenamiento para subvenir a las necesidades básicas
del futuro hijo, cambiará acrecentadamente hacia los niveles
de conciencia mentales y espirituales y no preocuparán tanto
los preparativos físicos.
La
luz que se halla en los padres, que en el futuro será vista
clarividentemente por un gran número de personas, estará científicamente
relacionada con la luz embrionaria del niño, y el hilo de
luz que vincula al padre y al hijo (del cual el cordón umbilical
ea símbolo esotérico), será construido con paciente inteligencia.
El
niño nacerá con su cuerpo de luz ya introducido y activo en
el cuerpo físico, y esto se deberá al trabajo mental inteligente
de los padres.
Ello no ocurre hoy, excepto en el caso de egos muy avanzados,
porque el cuerpo de luz es incipiente y difuso y simplemente
se cierne sobre la forma física del niño, esperando una oportunidad
para penetrar en ella e iluminar la conciencia.
Así se produciría una integración en la sustancia de la luz
del planeta de la cual se carece en la actualidad, y la realización
de esta integración será iniciada definidamente por los padres
entrenados de la nueva era y facilitada, a medida que el niño
crece, por la enseñanza y la influencia del educador iluminado.
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Indudablemente todo esto parecerá raro, demasiado abstracto y descabellado
para tener sentido. Quisiera recordarles que mucho de lo que hoy les
es familiar, y que constituye una parte definida de los hechos reconocidos
de la vida diaria, fueron considerados, unos cientos de años atrás,
igualmente raros, incomprensibles e imposibles. Lo que en realidad
sucede es una aceleración de los procesos de la manifestación de la
luz, lo cual ha sido posible debido al grado de realización alcanzado
por la humanidad y al acrecentado estímulo aplicado a la raza por
la Jerarquía, ayudada por las fuerzas que emanan de Shamballa.
PUNTO
DE VISTA DEL CONTROL DE LA PERSONALIDAD
Lo que podría decir aquí, sería sencillamente una repetición de lo
que ya saben y he enseñado. La mayoría de los que leen mis escritos,
están empapados de las ideas que he procurado impartir a la humanidad
durante loa últimos años, porque fue en 1919 que empecé a escribir
por primera vez, mediante la colaboración de A. A. B. En dichos escritos
he procurado hacer dos cosas:
1. Enseñar la necesidad fundamental de alcanzar ciertas grandes fusiones
–individual, racial y espiritual:
a. La fusión o integración de los diversos aspectos de la naturaleza
del hombre, física, emocional y mental. Cuando esto se haya obtenido,
tendremos la manifestación de las fuerzas elementales integradas,
a las que damos el nombre de personalidad, produciéndose así la manifestación
de un ser humano poderoso, autodirigido y de alta calidad.
b. La fusión de la personalidad con el alma. Esto debe realizarse
consciente y deliberadamente, a fin de que las partes de un gran todo
divino estén dispuestas a que la personalidad se someta a cambios
y transmutaciones como resultado del contacto con el alma. Esto llevará
a la manifestación del alma que mora en lo interno , la consciencia
crística, el Angel Solar.
c. La fusión final de la humanidad con la Jerarquía, que traerá a
la manifestación el Reino de Dios sobre la tierra. Será la consumación
de las demás fusiones y también la de ciertas grandes fusiones planetarias,
raciales y nacionales, incidentales y necesarias al progreso y a sus
resultados inevitables.
Estas fusiones no se realizan en forma secuencial como ya se ha enumerado;
hay mucha superposición y falta de equilibrio en el proceso, pero
aunque pueda haber diferencias y dificultades en el extenso proceso,
el fin es inevitable e inalterable. El Reino de Dios, la consumación
de todo, aparecerá sobre el planeta.
2. Inculcar los métodos que produzcan calidad, no solamente cantidad,
los cuales facilitarán el surgimiento de grandes características divinas
que cambiarán el mundo a su debido tiempo, originando nuevas actitudes
y estados de conciencia. Cuando maduren y se reconozcan estas características,
aparecerá una nueva cultura y civilización que constituirá para la
raza el futuro planeado y deseado.
Por lo tanto, ¿es necesario que les hable respecto al desarrollo de
la personalidad y su control? ¿No es esto algo que ya han considerado
y para lo cual han trabajado durante años? ¿Puedo darles algo práctico
que aún no conocen y que tratan de lograr? ¿Aumentará su actual responsabilidad,
repitiendo constantemente las cosas? Me parece que no. La nueva cultura
surgirá y vendrá a la existencia a medida que aquellos que tienen
conciencia de la luz y comprenden el objetivo del servicio puro (que
inevitablemente presupone tal estado de conciencia) prosigan con la
tarea asignada -una tarea autodesignada en todos los casos- de vivir
y enseñar la verdad respecto a la luz, cuando se ofrece la oportunidad.