TERCERA EDICIÓN

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SÍNTESIS DESTINO DE LA HUMANIDAD

 

Síntesis
Destino de la humanidad


© Ediciones Digitales ANTEO, 2024, para la presente edición
© Octavio Casas Rustarazo, 2024, para el prólogo
© Quintín García Muñoz, 2024, para el texto
© Alejandro García Gil, 2024, para la cubierta

IMPRESIÓN Y ENCUADERNACIÓN:
Huella Digital, S.L.


ISBN: 978-84-127920-9-6

Dep. Legal: Z 434-2024


Síntesis
Destino de la humanidad

Quintín García Muñoz


Prólogo de Octavio Casas Rustarazo



Prólogo


No me ha costado mucho el animarme –a invita-ción del autor- a hacer el prólogo del presente libro, pues da la casualidad que la exposición del tema es aquél que siempre me ha hecho dar los primeros pasos de mis búsquedas y pesadumbres de tipo existencialista.

Una vez leído, lo considero como un pequeño cate-cismo actualizado y, creo que muy bien sintetizado, del momento presente y tan impactante que vive nuestra humanidad en pleno siglo XXI, pero, refiriéndonos siempre a un contexto global de la evolución cósmica de nuestro planeta y consiguiente humanidad, como parte de ello, y no considerándolo como algo puntual o profé-tico que nos desvelaría hechos concretos referentes a cualquier momento de la misma, siempre teniendo en cuenta aquellas variantes posibles en el transcurrir de una humanidad que dispone de su propio libre albedrío, y que es capaz de cambiar el curso de la misma, y siempre dentro de un Plan universal al cual intuyo que todos nos dirigimos.

La larga investigación que lleva Quintín García Muñoz –creo que alrededor de unos cuarenta años- de los libros de Alice Ann Bailey-Maestro Tibetano (Djwhal-Khul), ha hecho que sea todo un experto en ello, a pesar de la gran dificultad que entraña un estudio sumamente complejo, con la capacidad de amal-gamarlos y con esa facultad psicológica de explicar aquello que no podría ser entendido de forma más lite-ral, y siempre con ese grado de humildad necesario para no aseverar nada de unos conocimientos que en un tanto por ciento muy elevado nadie somos capaces de llegar, bien sea porque no alcancemos a ello, bien sea porque hay conceptos que apenas son entendibles con una mente concreta, -por desarrollada que esté.

Queda claro que existen multitud de preguntas de las que no encontraremos respuesta, y como bien dice Quintín, sería necesario tener un grado de iniciación –quizás a partir de la llamada 3ª Iniciación- para llegar a comprender parte del contexto de la creación, así como del proceso evolutivo de todo cuanto se mueve en nues-tro Universo.

A pesar de ello, intentar profundizar poco a poco en este complejo estudio, seguro que ayuda a estructurar una mente inquisitiva que quiere entender aquellos hechos fundamentales en la existencia que nunca han sido explicados, bien porque no era el momento, bien porque el grado evolutivo de la humanidad no estaba preparada para recibirlo.

Agradezco al autor que nunca ha intentado meter datos ficticios o adornar aquello que no tiene una seria base de estudio.

En mis largas investigaciones esotéricas, y hasta donde yo he llegado, no recuerdo que existan escritos con un grado de profundidad tan grande como los dados por el Maestro Tibetano, sin desmerecer, ni mucho me-nos, a la ilustre Helena Blavatsky, Arthur Powell, Char-les Leadbeater, Vicente Beltrán Anglada, etc, etc.

Respetando todos los libros del Tibetano, quizás Tratado sobre Fuego Cósmico sea el que más se acerca a desvelar los mayores arcanos del Universo en el que vivimos.

No obstante, y aclarando la idea que quiero trasmi-tir, diríamos que la mayoría de los arcanos han sido dados, generalmente, de forma simbólica. Otra cosa es saber desvelarlos e interpretarlos correctamente.

Por ejemplo, las parábolas de Jesús, encierran una sabiduría inmensa, quizás inalcanzable de entrada para la mayoría.

Un estudio serio de las mismas nos hace ver no sólo la grandeza y profundidad de su enseñanza, sino que nos hace despertar aquellas facultades dormidas que todos tenemos, y que poco a poco hacen sentirnos, no sólo un poco más sabios, sino también mejor ubicados dentro del contexto energético del Universo del que somos parte intrínseca.

Es un conocimiento que nos abre puertas y simple-mente necesitábamos ese momento en nuestras vidas que exigía algunas aclaraciones. Creo que es así como se producen pequeños cambios de conciencia.

A pesar de que en este libro se tratan enseñanzas esotéricas, como, Ángel Solar, ley de Reencarnación, Iniciaciones, Rayos de manifestación, etc., es factible su lectura para el neófito en el tema, al cual invita no sólo a plantearse nuevos términos, sino que le pretende hacer pensar sobre aquellas preguntas fundamentales que todo ser racional inquisitivo se hace, como son la creación del Universo, el sentido de la existencia, el porqué de la misma de un Dios supuestamente perfecto en su origen, el sentido evolutivo del hombre y todas las cosas.

Son preguntas fundamentales en que tanto inquiri-mos y de las que apenas encontramos respuestas lógicas ni experimentales, pero, siempre dando datos com-probables y perfectamente científicos, no cayendo en la fantasía o ciencia-ficción.

Es importante reseñar que muchas cosas no son en-tendibles mental o racionalmente, sólo podrían intuirse a través de un cierto grado evolutivo de conciencia y que el Universo no es sólo algo puramente perceptible por su materia u otras energías más sutiles, sino que la propia conciencia es algo tan real como lo que vemos físicamente con nuestros ojos. Algo que en definitiva es la parte más sutil pero más real de la existencia, de ahí que se repite en muchas ocasiones Aquel del Cual Nada Puede Decirse.

Suponemos que sólo un alto nivel de conciencia podría percibir el origen o ser de las cosas, esto es algo que no podemos demostrar con nuestro mecanismo mental actual.

En resumen, aquí se defiende de entrada más al científico que al místico, y sobre dicha base se trata de llegar a entender la complejidad del tema, más bien que llegar a conclusiones consistentes, y que aunque no aclaren las dudas fundamentales, sí crear un estado de apertura a nivel de conciencia que nos acompañe en nuestra investigación.

Creo que es lo que el autor pretende, aportar una vía de investigación nueva, abriéndonos paso a través de un campo no sólo mental sino experimental, y no por ello deja de tener una connotación de carácter científico o racional.

De hecho, y al igual que la ciencia va variando en sus propias teorías, aquí la mayoría de los datos dados son asimismo un campo de estudio teórico, pero basado en una gran consistencia.

Además, está la parte psicológica o aquella zona experimental que nos llevaría a un cierto grado de au-toconocimiento, digamos, a descubrir aquello que sim-plemente está velado porque desconocemos otros me-canismos que poseemos y apenas tenemos desarrolla-dos.


Octavio Casas Rustarazo

Índice


Prólogo Página 5
Capítulo 1 El no-principio Página 13
Capítulo 2 Distancias Página 17
Capítulo 3 La realidad supera la ficción Página 21
Capítulo 4 Materia etérica Página 25
Capítulo 5 Aquel sobre el Cual N. P. D. Página 33
Capítulo 6 Las Superconciencias Página 37
Capítulo 7 La Reencarnación de Superconciencias Página 43
Capítulo 8 Sobre nuestro sistema solar-1 Página 47
Capítulo 9 Algo interesante Página 51
Capítulo 10 Dificultad y belleza de los libros azules Página 53
Capítulo 11 Extracto de Astrología Esotérica Página 55
Capítulo 12 Sobre nuestro sistema solar-2 Página 57
Capítulo 13 Somos un trocito de estrellas Página 59
Capítulo 14 Analogías. Extractos de Astrología E. Página 61
Capítulo 15 Extractos de Astrología Esotérica Página 63
Capítulo 16 Mucho más que colonos Página 69
Capítulo 17 Extractos de Astrología Esotérica Página 73
Capítulo 18 Sobre nuestro sistema solar-3 Página 77
Capítulo 19 Extracto de Tratado sobre Fuego Cósmico Página 81
Capítulo 20 Extractos de Astrología Esotérica Página 89
Capítulo 21 Sobre nuestro sistema solar-4 Página 97
Capítulo 22 Algo sobre la Tierra Página 105
Capítulo 23 Inmersión de los Dioses en la materia Página 113
Capítulo 24 Extracto sobre la reencarnación Página 121
Capítulo 25 Sobre el poder creador humano Página 127
Capítulo 26 Sobre la reencarnación 2 Página 131
Capítulo 27 Sobre la reencarnación 3 y extracto Página 139
Capítulo 28 Sobre la reencarnación 4 Página 145
Capítulo 29 Sobre la reencarnación, 5 Página 151
Capítulo 30 Apropiación por el alma (extracto) Página 157
Capítulo 31 Perdidos buscando un camino Página 165
Capítulo 32 Apropiación de los cuerpos (extracto) Página 171
Capítulo 33 Por qué existen caminos de salida Página 179
Capítulo 34 Acercamiento de apropiación (extracto) Página 185
Capítulo 35 La decisión Página 191
Capítulo 36 El ser humano electro-magnético Página 197
Capítulo 37 Acercamiento de aceptación (extracto) Página 203
Capítulo 38 Escuelas planetarias (extracto) Página 215
Capítulo 39 Lo peor y lo mejor para el ser humano Página 219
Capítulo 40 ¿Un futuro inimaginable? (extracto) Página 227
Capítulo 41 El río de la vida de las estrellas Página 229
Capítulo 42 Insignificancia relativa (extracto) Página 233
Capítulo 43 Inclusividad (extracto) Página 235
Capítulo 44 Inclusividad-2. Página 239
Capítulo 45 El esfuerzo y la paciencia del buscador Página 245
Capítulo 46 Iniciación, 1. Página 251
Capítulo 47 Iniciación, 2. Viajeros del mundo interno Página 253
Capítulo 48 Iniciación, 3. Las esferas de energía Página 257
Capítulo 49 Iniciación, 4. Método campos-abstracción Página 261
Capítulo 50 Iniciación, 5. Método proyecciones mentales Página 265
Capítulo 51 Iniciación, 6. Ascenso de energía (extracto) Página 271
Capítulo 52 Iniciación, 8. Alineamiento (extracto) Página 273
Capítulo 53 Iniciación, 9. Reunión grupal (extracto) Página 275
Capítulo 54 Iniciación, 10. Un camino de mucho trabajo Página 277
Capítulo 55 Iniciación, 11. Contacto entre conciencias Página 281
Capítulo 56 Agujeros de gusano entre conciencias-1 Página 283
Capítulo 57 Agujeros de gusano entre conciencias-2 Página 287
Capítulo 58 El ascenso de los colonos Página 291
Capítulo 59 Los Siete Senderos Cósmicos (extracto) Página 295
Capítulo 60 Invocación-Evocación Página 313
Capítulo 61 Los Siete Senderos Cósmicos-2 (extracto) Página 317
Capítulo 62 Invocación-Evocación-2 Página 325
Capítulo 63 Los Siete Senderos Cósmicos-3 (extracto) Página 329
Capítulo 64 Invocación-Evocación-3 Página 333
Capítulo 65 Superior-inferior, positivo-negativo Página 337
Capítulo 66 La Gran Invocación Página 341
Capítulo 67 Los Siete Senderos Cósmicos-4 (extracto) Página 345
Epílogo Página 353



Capítulo 1
El NoPrincipio.

Estimado amigo lector, si existió un Principio del Universo, éste fue tan lejano en el tiempo, que ni siquiera, en mi modesta opinión, los más grandes científicos de estos dos últimos siglos tienen una idea exacta de cuándo fue.

Según nos dicen, somos hijos del BigBang, pero, aunque este tipo de inicio de universo es considerado en cierto modo en la Doctrina Secreta, únicamente representa una parte del proceso.

En Tratado sobre Fuego Cósmico y en toda la obra de AABMT (DjwhalKhul), la NoForma (Pensamiento) precede a la Forma (Aspecto físico denso).

Los Dioses, que permanecen en el mundo mental, comienzan cíclicamente su actividad constructora después de la inactividad, descanso o pralaya.

Como norma general, la filosofía oriental considera los distintos universos materiales como hijos del Pensamiento de los distintos Dioses.

Puesto que los universos son, tal y como lo define H.P.B., Una Conciencia sobre otra Conciencia sobre otra conciencia, es tan válido decir Dios como Dioses, pues al igual que existen planetas, sistemas solares, constelaciones…, las Entidades se envuelven unas a otras, como si de una matrioska se tratase.

No sabemos actualmente el límite del universo. Podemos decir que hay lunas, planetas, soles, sistemas solares, constelaciones constituidas de varias estrellas, galaxias, y clúster de galaxias… pero como en filosofía oriental todo tiene conciencia, cada una de las “Unidades aisladas” representa también una Entidad. Por lo tanto deberíamos decir que un clúster de galaxias es una Entidad que envuelve distintas Entidades (galaxias), y cada galaxia, millones de Entidades Menores (estrellas)… Quienes a su vez son los Dioses que gobiernan los distintos sistemas solares cuyos planetas son Entidades encarnadas.

Si esto es verdad, no lo sabemos hasta que un ser humano es un iniciado de tercer grado, que es el momento en que es capaz de interactuar y comprender la Unidad Aislada que envuelve nuestro planeta, o cualquiera que pueda ser el planeta estudiado en nuestro sistema solar.

Este concepto es a la vez grandioso y escalofriante, pues deja al ser humano sobrecogido, a la vez que esperanzado en llegar un día a abarcar con su conciencia la Unidad Aislada denominada nuestro Logos planetario.

Es verdad que estas afirmaciones están más allá de nuestra interacción. Nosotros, los humanos normales, sólo somos capaces de interaccionar con nuestro cuerpomente y poco más. Para que nos entendamos, estamos hablando de “Conciencias”.

Es verdad que somos capaces de interaccionar físicamente con nuestros congéneres, y que a veces deducimos lo que hay en la conciencia de otros humanos, por sus actos, más que por sus palabras, que tan poco valor tienen actualmente, en muchos casos.

Se podría establecer que, todo depende de la capacidad de interactuación entre una conciencia y las demás conciencias humanas, y después entre esa conciencia grupal y la Conciencia de la Unidad Aislada planetaria, así como de la Unidad Aislada solar… etc.

Esta capacidad de entrada en otras conciencias, superconciencias o unidades aisladas (término utilizado por MT) nos estaría indicando el peldaño al que hemos llegado.

Sin apenas darnos cuenta, hemos pasado de lo Universal y Divino a lo particular y humano. Dicho de otra forma, de la multitud de Conciencias Divinas a la multitud de conciencias humanas.

Creo que es importante recalcar que estas líneas descubren la causa de por qué debemos tener esperanza, a la vez que prudencia.

No estamos solos, pertenecemos, estamos insertados en multitud de Conciencias, y ello nos hace sentir cierta seguridad en que nuestra vida humana no es algo anárquico y arbitrario, sino que cierto tipo de Orden nos protege.

Y a la vez debemos ser prudentes, porque paradójicamente estamos ubicados en un universo gigantesco y aparentemente sin Amor y sin Unión.

Los sabios nos dicen que verdaderamente existe la Unidad Aislada de la que somos parte, pero, para llegar a semejante punto de sabiduría, nos quedan muchos pasos que dar, y también muchos sufrimientos y muchas alegrías. Tal vez si comprendemos que somos algo parecido a un diminuto neurotransmisor en el macro universo de un cuerpo humano, quizás… resolvamos la paradoja de ser algo en un Universo tan Extraordinario y Gigantesco.

Es lo que vamos a intentar dilucidar.