LOS SIETE RAYOS DE LA VIDA

 

 

 

Recopilado por un estudiante

de los escritos de Alice A. Bailey

y el Maestro Tibetano Djwhal Khul

 


Libros de Referencia del Maestro El Tibetano (Djwhal Khul) dictados a Alice A. Bailey

 

Nro. Libro Título

   

1.  Iniciación Humana y Solar

2.  Cartas sobre Meditación Ocultista

3.  Tratado sobre Fuego Cósmico

4.  Tratado sobre Magia Blanca

5.  Discipulado en la Nueva Era – Tomo I

6.  Discipulado en la Nueva Era – Tomo II

7.  Los Problemas de la Humanidad

8.  La Reaparición de Cristo

9.  El Destino de las Naciones

10.     Espejismo (Glamour): Un Problema Mundial

11.     Telepatía y el Vehículo Etérico

12.     La Educación en la Nueva Era

13.     La Exteriorización de la Jerarquía

Tratado sobre los Siete Rayos:

14.     Tomo I: Psicología Esotérica I

15.     Tomo II: Psicología Esotérica II

16.     Tomo III: Astrología Esotérica

17.     Tomo IV: La Curación Esotérica

18.     Tomo V: Los Rayos y las Iniciaciones

 

Ejemplo de referencias. La referencia numérica que figura al término de una cita, por ejemplo (13-75/6): es tomada del libro La Exteriorización de la Jerarquía (13) comenzando en la pág. 75 y continuando hasta la pág. 76.

 

 

 

Introducción

 

Diez Proposiciones Fundamentales

 

[i1] ...antes de iniciar el verdadero estudio de los rayos, trataré de formular las diez proposiciones fundamentales sobre las cuales se basa toda la enseñanza. Constituyen para mí, humilde trabajador de la Jerarquía, y para la Gran Logia Blanca, la afirmación de la realidad y de la verdad. Los estudiantes y los investigadores deben aceptarlas como hipótesis:

 

Uno: Existe una Vida que se expresa a Sí Misma, primero, mediante siete cualidades o aspectos básicos y, segundo, por medio de una infinita diversidad de formas.

 

Dos: Estas siete cualidades radiantes son los siete Rayos, las siete Vidas, que dan Su vida a las formas, y al mundo de las formas le dan su significado, sus leyes y su anhelo de evolucionar.

 

Tres:     Vida, cualidad y apariencia, o espíritu, alma y cuerpo, constituyen todo lo que existe. Son la existencia misma, con su capacidad de crecer, actuar y manifestar la belleza y estar en completo acuerdo con el Plan, el cual está arraigado en la conciencia de las siete Vidas de rayo.

 

Cuatro:  Estas siete Vidas, cuya naturaleza es conciencia y cuya expresión es sensibilidad y cualidad específica, producen cíclicamente el mundo manifestado; trabajan juntos en la más estrecha unión y armonía; son los custodios del Plan y colaboran inteligentemente con él . Son los siete constructores , Quienes erigen el radiante Templo del Señor, guiados por la Mente del Gran [i2] Arquitecto del Universo.

 

Cinco: Cada Vida de rayo se expresa predominantemente a Sí misma por medio de los siete planetas sagrados, pero la vida de los siete rayos fluye a través de cada planeta, incluso la Tierra, y cualifica todas las formas. En cada planeta existe una pequeña réplica del esquema general, y cada uno está de acuerdo con la intención y propósito del todo.

 

Seis: La humanidad, de la cual se ocupa este tratado, es una expresión de la vida de Dios, y todo ser humano proviene de una de las siete fuerzas de rayo. La naturaleza del alma es cualificada o está determinada por la Vida de rayo que la exhaló, y la naturaleza de la forma es coloreada por la Vida de rayo que —según su apariencia cíclica, en el plano físico, en un momento determinado— establece la cualidad de la vida racial y de la forma en los reinos de la naturaleza. La naturaleza del alma o su cualidad, es la misma durante un período mundial; la naturaleza y la vida de su forma cambian de una vida a otra, según su necesidad cíclica y las condiciones grupales del medio ambiente. Esto último lo determina el rayo o rayos, que prevalecen en ese momento.

 

Siete:La Mónada es la Vida vivida al unísono con las siete Vidas de rayo. Una Mónada, siete rayos e infinidad de formas, estructuran los mundos manifestados.

 

Ocho: Las Leyes que rigen el surgimiento de la cualidad o del alma, por intermedio de las formas, son sencillamente el propósito mental y la orientación de vida de los Señores de rayo; Su propósito es inmutable, Su visión es perfecta y Su justicia es suprema.

 

Nueve:  El modo o método para el desarrollo de la humanidad es la propia expresión o auto comprensión. Cuando esto se logra, el yo que se expresa es el verdadero Yo o Vida de rayo, y la comprensión obtenida revela a Dios como la cualidad del mundo manifestado y la Vida que anima la apariencia y la cualidad. [i3] Las siete Vidas de rayo, o los siete tipos de almas, se observan como expresión de la Vida una, y la diversidad se pierde en la visión del Uno y en la identificación con el Uno.

 

Diez:  El método empleado para obtener esta comprensión es la experiencia, comenzando con la individualización y terminando con la iniciación, produciendo así la perfecta fusión y expresión de vida, cualidad y apariencia.

 

Ésta es una breve definición del Plan. La Jerarquía de Maestros y Sus siete divisiones (que equivalen a los siete rayos) son Su custodio y tienen la responsabilidad, en determinado siglo, de llevar a cabo la próxima etapa de ese Plan. (14-129/30)

 

 

 

¿Qué son los Rayos?

 

Rayo es el término aplicado a una fuerza o a un determinado tipo de energía que pone de relieve la cualidad que exhibe esa fuerza, y no el aspecto forma que ella crea. Ésta es la verdadera definición de un rayo. (14-250)

 

Cuando hablamos de energía de rayo estamos considerando, en realidad, la cualidad y el aspecto voluntad-propósito de cierta gran Vida a la cual damos el nombre de "Señor de Rayo"... Su intención, voluntad y propósito divinos o la proyección determinada de Su mente, crean una radiación o corriente de energía que —de acuerdo al tipo y cualidad— actúa sobre todas las formas de vida manifestadas dentro de nuestro "círculo no se pasa" planetario. 


Estos Señores de Rayos son las energías creadoras y sustentadoras que complementan la Voluntad del Logos planetario. Colaboran con Él en la definición y expresión de Su supremo propósito. Sus radiantes emanaciones son objetivadas y retiradas cíclicamente. A medida que se irradian en los tres mundos, las energías que hacen impacto, producen cambios, disturbios, progreso y desenvolvimiento, crean las nuevas formas necesarias y vitalizan y cualifican aquello por lo cual se expresa la inmediata intención divina, intensificando tanto la cualidad como la receptividad de la conciencia.

 

En otros momentos, durante el proceso de ser retiradas "a [i4] su propio lugar", causan la desaparición o la muerte del aspecto forma, de las instituciones y "organismos organizadores" (empleando una frase peculiar), produciendo por lo tanto ciclos de destrucción y cesación, y dando así lugar a esas nuevas formas y expresiones de vida que serán producidas por un rayo entrante. (18-467)

 

Toda manifestación es de naturaleza septenaria y la luz central denominada Deidad, el Rayo Uno de la divinidad, se manifiesta primero como triplicidad y después como septenario. 

El Dios Uno brilla como Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu Santo, reflejados a su vez en los Siete Espíritus ante el Trono, los siete Logos planetarios. 



Los estudiantes esoteristas de origen no cristiano quizás denominen a estos Seres el Rayo Uno, que se manifiesta a través de los tres rayos mayores y los cuatro menores, formando un septenario divino. 


El Rayo Sintético que fusiona a todos es el gran Rayo de Amor Sabiduría, pues en verdad "Dios es Amor". Éste es el rayo índigo, el rayo fusionador, que al final del gran ciclo absorberá a todos los demás, cuando se obtenga la perfección sintética. 



También es la manifestación del segundo aspecto de la vida logoica. Este aspecto, el de constructor de la forma, hace de nuestro sistema solar el más concreto de los tres sistemas mayores. El aspecto Amor-Sabiduría se manifiesta mediante la construcción de la forma, y como "Dios es Amor", en el Dios de Amor "vivimos, nos movemos y tenemos nuestro ser" y así será hasta el fin de la manifestación de los eones.

 

Los siete planos de Manifestación Divina, o siete planos mayores de nuestro sistema, constituyen los siete subplanos del plano cósmico inferior. Los siete rayos de que tanto se habla y que encierran tanto interés y misterio, son análogamente los siete subrayos de un rayo cósmico. (1-18/9)

 

Uno de los Rayos cósmicos permanentes es el de nuestro Logos, y los subrayos de este rayo impregnan todo Su sistema. Otros seis Rayos cósmicos, que animan a otros sistemas, influyen sobre el nuestro y se reflejan en los subrayos de nuestro Rayo logoico. Nuestros Hombres celestiales responden a estas seis influencias cósmicas. Absorben dicha influencia puesto que son centros del cuerpo logoico, la pasan [i5] a través de Sus esquemas, la hacen circular por Sus centros (cadenas) y la trasmiten a otros esquemas, coloreándola con Su matiz y cualificándola con Su nota o tono peculiar. Todo el sistema de influencia de rayo o calor irradiante, considerado tanto física como psíquicamente, constituye una interacción y circulación intrincadas. La irradiación o vibración pasa, en ciclos ordenados, de su fuente original, o sea el Rayo Uno o Logos del sistema, a los diferentes centros de Su cuerpo. Desde el punto de vista físico, esta fuerza de Rayo es el factor que energetiza la materia, desde el punto de vista psíquico es la facultad cualitativa. Esta fuerza o cualidad pasa y circula de un esquema a otro, de una cadena a otra, de un globo a otro, agregando y, al mismo tiempo, absorbiendo y retornando a su punto focal con dos notables diferencias:

 

a.   El calor que irradia se intensifica.

 

b.   El carácter o color cualitativo aumenta.

 

Es igualmente notable el efecto que produce sobre la forma, pues el calor o cualidad de un Rayo afecta no sólo a la psiquis del hombre, del Logos planetario y del Logos solar, sino que también tiene un efecto definido sobre la sustancia material misma. (3-366/7)

 

...Hay atributos divinos y características de rayo que hasta ahora nunca fueron revelados a las mentes de los hombres, o percibidos por ellos, en los momentos más elevados de inspiración; esto se debe a la falta de sensibilidad, hasta en los más avanzados hijos de los hombres. Sus mecanismos están inadecuadamente desarrollados y son incapaces de responder a esas cualidades divinas superiores. Cristo mismo y otros miembros de la Gran Logia Blanca se preparan para registrar esos atributos divinos y fusionarse conscientemente en un proceso o escala evolutiva, aún más elevada; resultará evidente que las ínfimas conclusiones de las pequeñas mentes constituyen hoy algunos de los factores más peligrosos en los asuntos mundiales. (9-33/4)

 

La enseñanza referente a los siete rayos es una especulación infructuosa mientras no sea susceptible de investigación, de comprobación eventual y de utilidad general y particular. Mucho de lo que hoy se escribe deberá ser [i6] descartado por inútil, y no puede ser aceptado como posible hipótesis, y tampoco presenta una verdad que puede ser probada. Por lo tanto trato aquí de hacer dos cosas:

 

1.   Indicar, como se habrá observado, una nueva, poderosa y eficaz psicología esotérica.

 

2.   Señalar las inevitables líneas de desarrollo, debido a que están comenzando a actuar en esta época ciertas potencias importantes. Algunas fuerzas van acrecentando su actividad, mientras otras pasan constantemente a ser pasivas. (9-8)

 

A medida que estudiamos veremos que las palabras entorpecen en gran parte las explicaciones dadas sobre las realidades implicadas, por lo tanto, debemos procurar penetrar por debajo del significado superficial y llegar hasta la estructura esotérica de la verdad. Los rayos están en constante movimiento y circulación, y manifiestan una actividad progresiva y cíclica que evidencia un impulso cada vez mayor. En ciertas épocas dominan, en otras permanecen inactivos, y de acuerdo al rayo particular que haga sentir su presencia en un período determinado, así será la cualidad de la civilización, el tipo de formas que aparecerán en los reinos de la naturaleza y la consiguiente etapa de percepción (estado de conciencia) de los seres humanos que vienen a la vida en una era particular. Estas vidas que encarnan (en los cuatro reinos de la naturaleza) responderán a determinada vibración, cualidad, colorido y naturaleza en cuestión. El rayo que está en manifestación afectará poderosamente los tres cuerpos que constituyen la personalidad del hombre, y la influencia del rayo producirá cambios en su contenido mental y en su naturaleza emocional, determinando la calidad del cuerpo físico.

 

Me doy cuenta que al dar a conocer esta enseñanza relativamente nueva sobre los rayos, y en mi esfuerzo por arrojar nueva luz sobre el tema, quizás momentáneamente aumente su complejidad. Pero a medida que se hacen experimentos y se estudian a las personas en los laboratorios de los psicólogos y de los psicoanalistas, en relación con los rayos y lo que ellos manifiestan, y a medida que las nuevas ciencias puedan ser utilizadas inteligentemente dentro de una esfera adecuada, obtendremos muchos beneficios y [i7] corroboraremos la enseñanza dada. Entonces veremos surgir un nuevo acercamiento a las antiguas verdades y una nueva forma de investigar a la humanidad. Mientras tanto, procuremos enunciar con claridad la verdad acerca de los rayos, y tratemos de clasificar, delinear e indicar su naturaleza, propósito y efectos.

 

Los siete rayos se manifiestan cíclicamente y, debido a ello, entran y salen continuamente de la manifestación, dejando en el trascurso de las épocas su impronta en el género humano, conteniendo por lo tanto la clave para toda verdadera investigación histórica, investigación que aún queda por hacerse. (14-27/8)

 

Algunos de los puntos que trataré de aclarar no podrán ser sustanciados ni comprobados por ustedes, por lo tanto, sería prudente aceptarlos como hipótesis activas, a fin de comprender lo que trato de decir. Otros puntos que mencionaré podrán ser verificados en sus propias experiencias de la vida, y demandarán el reconocimiento de la mente concreta, o podrán producir una reacción que traerá como consecuencia una intensa convicción que emanará de sus Yoes intuitivamente conscientes. De todos modos, lean lentamente; apliquen las leyes de analogía y de correspondencia; hagan un análisis de sí mismos y de sus hermanos; procuren vincular lo que digo con el conocimiento que puedan poseer de las teorías modernas, y recuerden que cuanto más vivan realmente como almas, tanto más captarán lo que se trata de impartir.

 

A medida que estudian no olviden el concepto fundamental de que todo trabajo oculto se ocupa de la energía —unidades de energía, energía contenida en las formas y corrientes de energía que afluyen; estas energías llegan a ser poderosas y encarnan nuestro propósito mediante el empleo del pensamiento... (14-31)

 

[Como efecto del estudio de estos rayos] tendremos un método práctico de análisis para llegar a una correcta comprensión de nosotros mismos como entidades animadoras, y a una comprensión más inteligente de nuestros semejantes. Por ejemplo, cuando comprobamos por el estudio que la tendencia de nuestro rayo del alma es de poder o voluntad, pero que el rayo que rige a la personalidad es el de devoción, entonces podemos medir con más exactitud nuestras oportunidades, capacidades y limitaciones y determinar con más precisión [i8] nuestra vocación y servicio, nuestro debe y haber y nuestro verdadero valor y fortaleza. Cuando podemos agregar a ese conocimiento un análisis que nos permita comprender que el cuerpo físico reacciona preeminentemente al rayo del alma, mientras que el cuerpo emocional está bajo la influencia del rayo de la personalidad, históricamente en manifestación en ese momento, entonces estamos en posición de juzgar con acierto nuestro problema, y podemos ocuparnos más inteligentemente de nosotros mismos, de nuestros hijos, amigos y asociados. Descubriremos que somos capaces de colaborar más inteligentemente con el Plan, a medida que trata de manifestarse en determinada época. (14-30/1)

 

Los estudiantes ocultistas deben pensar y trabajar acrecentadamente en términos de energía. Se dice esotéricamente que estas energías "tienen efectos impulsores, atracciones magnéticas y actividades enfocadas". Las corrientes o emanaciones de energía existen, como es bien sabido, en siete aspectos o cualidades principales. Llevan a los hijos de los hombres a la encarnación y los sacan de la encarnación. Tienen sus propias cualidades y características específicas, las cuales determinan la naturaleza de las formas construidas, la cualidad de la vida que expresa en cualquier época o encarnación, la extensión del ciclo de vida y la aparición o desaparición de cualquiera de los tres aspectos de la forma. (15-72/3)

 

Esta instrucción sobre los rayos tiene una significación más profunda de lo que se puede captar. Un cuidadoso y sistemático estudio y la abstención sensata para llegar a rápidas conclusiones, será la forma más inteligente de encarar esta instrucción... Trato de dar un delineamiento general, impartir ideas, introducir ciertos conceptos básicos en la conciencia del lector, e intento revestir este tema, tan abstruso y difícil, en forma tal que pueda iniciar un nuevo ritmo de pensamientos y captar y asimilar una nueva comprensión... Comenzaremos con lo universal y terminaremos con lo particular, que es siempre el verdadero método ocultista. (14-79/80)

 

En los círculos esotéricos se habla demasiado y se [i9] dicen muchas tonterías respecto al rayo a que pertenece un hombre. La gente se entusiasma estúpidamente cuando se le dice cuál es su rayo, así como cuando se le dice qué eran ellos en encarnaciones pasadas. La "nueva enseñanza sobre los rayos" compite en interés con la astrología. Al igual que los atenienses, los hombres siempre buscan lo novedoso y lo extraño, y olvidan que toda nueva verdad y cada nueva presentación de la antigua verdad lleva consigo una acrecentada responsabilidad.

 

Sin embargo, resulta interesante trazar paralelos, pues es evidente para el concienzudo estudiante que, las nuevas enseñanzas sobre los rayos han llegado justamente cuando la ciencia anuncia que no existe ni se conoce nada más que energía y que todas las formas se componen de unidades de energía y son, en sí mismas, expresiones de fuerza. (14-250)  

 


Contradicciones aparentes

 

...Me referiré a las contradicciones aparentes que ocurren (o pueden ocurrir) en este tratado. A veces se dice que un rayo está en manifestación y en otras ocasiones fuera de manifestación. Podremos hablar de la influencia que ejerce sobre un reino particular de la naturaleza, y luego decir que otro rayo es el que puede considerarse de primordial importancia. Estas discrepancias son sólo aparentes y la causa reside en la correcta comprensión de la Ley de los Ciclos. Hasta que no se comprenda esta fundamental Ley de Periodicidad (lo cual no será posible hasta que el hombre haya desarrollado la visión de la cuarta dimensión), será difícil evitar las aparentes contradicciones. Un rayo puede estar en encarnación en cierto momento y ejercer así una gran influencia, y, sin embargo, otro rayo puede regir al mismo tiempo el ciclo mayor —ciclo del cual el rayo que esté considerando puede ser sólo un aspecto temporario. Por ejemplo, el séptimo Rayo de Organización Ceremonial está ahora entrando y el sexto Rayo de Devoción está saliendo; sin embargo, el sexto rayo tiene un ciclo mayor y su influencia no desaparecerá completamente hasta dentro de 21.000 años y al mismo tiempo bien puede considerárselo como el sexto subrayo del cuarto Rayo de [i10] Armonía a través del Conflicto, que ha estado en manifestación durante miles de años y seguirá actuando 40.000 años más; además este cuarto rayo está fuera de manifestación en lo que respecta a su influencia menor y cíclica.

 

Comprendo que esta información es muy confusa para el neófito ocultista, y sólo los estudiantes que se ajusten a los requisitos para captar el bosquejo general y las amplias proposiciones fundamentales, serán capaces de extraer de estas instrucciones la verdadera y deseada perspectiva. Si el lector se pierde en el cúmulo de posibles análisis y en lo intrincado de los detalles impartidos, no podrá penetrar en el reino de la clara visión que se persigue. Cuando elimine los detalles y se ocupe de la conformación general del Plan solar, entonces estará capacitado para colaborar con la necesaria inteligencia. Por lo tanto lean en forma constructiva y sin reparos, sabiendo que no es fácil ver el Plan tal como existe en las mentes de los Constructores que trabajan en estrecha colaboración, de acuerdo al Plan inicial, y no obstante realizan Sus esfuerzos individuales en forma concentrada y empeño sostenido. (14-160/1)

 

Aparte de los impulsos cíclicos, que surgen continuamente y se superponen, correlacionan y entremezclan, hay muchos que podríamos llamar impulsos menores.... Hay [también] ciclos más vastos, de 2.500 años, de 7.000 años, de 9.000 años, de 15.000 años y muchos otros...; pueden irrumpir durante cualquiera de los impulsos menores y aparecer inesperadamente, dentro de lo que el hombre común entiende; sin embargo, sólo son esos impulsos en retroceso puestos en movimiento cíclico hace quizás miles de años. (3-816/7)

   

  

   

 

 

01

Los Siete Rayos

 

[i11] Los rayos son las siete emanaciones de los "siete Espíritus ante el trono de Dios"; Sus emanaciones proceden del nivel monádico de percepción o del segundo plano etérico cósmico. En cierto sentido se podría afirmar que estas siete grandes y vivientes Energías constituyen en su totalidad el vehículo etérico del Logos planetario. (11-129)

 

En los diversos países se las denomina de distintas maneras, pero para nuestros propósitos emplearemos las siete denominaciones siguientes:

 

1.   La energía de Voluntad, Propósito o Poder, llamada en los países cristianos energía de la Voluntad de Dios.

 

2.   La energía de Amor-Sabiduría, denominada frecuentemente el Amor de Dios.

 

3.   La energía de Inteligencia Activa, designada la Mente de Dios.

 

4.   La energía de Armonía a través del Conflicto, que afecta grandemente a la familia humana.

 

5.   La energía de Conocimiento Concreto o Ciencia, tan poderosa en esta época.

 

6.   La energía de Devoción o Idealismo, causante de las actuales ideologías.

 

7.   La energía de Orden Ceremonial, que produce las nuevas formas de civilización. (9-7)  

 

Los siete rayos se clasifican en tres Rayos de Aspecto y cuatro Rayos de Atributo:

 

Rayos de Aspecto

 

1. Rayo de Voluntad o Poder.

  2. Rayo de Amor-Sabiduría.

  3. Rayo de Actividad o Adaptabilidad. [i12]

 

Rayos de Atributo

 

4. Rayo de Armonía, Belleza, Arte y Unidad.

  5. Rayo de Conocimiento Concreto o Ciencia.

  6. Rayo de Idealismo Abstracto o Devoción.

  7. Rayo de Magia Ceremonial o Ley.

 

Estos nombres están seleccionados entre muchos, y personifican los diferentes aspectos de la fuerza, por medio de los cuales se manifiesta el Logos. (2-260/1) (1-178/9)

    

Tengamos siempre presente con claridad la numeración de Los Rayos. Los números que preceden a los nombres se relacionan con la séptuple manifestación, y los números que siguen a los nombres tienen relación con la quíntuple manifestación de Brahma.

 

Rayos de Aspecto:

 

1. Voluntad o Poder.

  2. Amor o Sabiduría.

  3. Adaptabilidad o Inteligencia Activa............................... 1

 

Rayos de Atributo:   

 

4. Armonía, Belleza o Arte............................................2   

  5. Conocimiento Concreto o Ciencia...........................3  

  6. Idealismo Abstracto...................................................4   

7. Magia Ceremonial......................................................5   

(3-359)

 

 

Los Tres Rayos de Aspecto

 

Los tres rayos mayores, que constituyen la suma total de la divina manifestación, son rayos de aspecto, por dos razones:

Primero, son, en su totalidad, la Deidad manifestada, el Verbo en encarnación. Expresan el propósito creador y la síntesis de la vida, la cualidad y la apariencia.

Segundo, están activos en todas las formas de todos los reinos, y determinan las amplias y generales características que rigen la energía, la cualidad y el reino implicado; a través de ellos las formas diferenciadas vienen a la existencia, las vidas especializadas se expresan y la diversidad de agentes divinos cumplen su destino en el plano de la existencia designado.

 [113] Los agentes creadores de Dios hacen sentir poderosamente su presencia sobre estas tres corrientes de vida y fuerza cualificadas, y mediante su actividad dotan a todas las formas con ese atributo evolutivo interno que, oportunamente, los impulsará a ponerse de acuerdo con el propósito divino, e inevitablemente producirá ese tipo de conciencia que capacitará al ente fenoménico para que reaccione al medio ambiente y cumpla así su destino como parte integrante del todo. Así se hace posible la cualidad intrínseca y el tipo específico de radiación. La interacción de estos tres rayos determina la apariencia fenoménica externa, atrae la unidad de vida a uno de los reinos de la naturaleza y a una de las infinitas divisiones dentro de ese reino; el proceso de seleccionar y discernir se repite hasta obtener la gran variedad de ramificaciones en los cuatro reinos, las divisiones, los grupos dentro de una división, las familias y demás ramificaciones. Así el proceso creador se presenta ante nuestra incipiente conciencia en su admirable belleza, secuencia y desenvolvimiento, y nos deja atónitos y maravillados la facilidad con que crea el Gran Arquitecto del Universo.

 

Observando simbólicamente toda esta belleza y simplificando el concepto (tarea que realiza el que trabaja con símbolos) podríamos decir que el primer Rayo personifica la idea dinámica de Dios, y con ella el Altísimo inicia el trabajo de la creación.

 

Al segundo rayo le corresponde establecer las primeras formulaciones del Plan sobre el cual debe construirse la forma, materializarse la idea (por intermedio de los agentes de esta segunda gran emanación) y reproducirse los anteproyectos con exactitud matemática, unidad estructural y perfección geométrica. El Gran Geómetra se coloca así a la vanguardia y posibilita el trabajo de los Constructores. El Templo se construirá sobre figura y forma y correlación de guarismos y abarcará y expresará la Gloria del Señor. El segundo rayo es el del Maestro Constructor.

 

El tercer Rayo constituye el conjunto de fuerzas constructoras en actividad, y el gran Arquitecto con Sus Constructores organiza el material, inicia el trabajo de construcción y oportunamente (a medida [i14] que continúa el ciclo evolutivo) materializa la idea y el propósito de Dios, el Padre, guiado por Dios, el Hijo. Sin embargo, estos tres son una unidad como lo es un ser humano que concibe una idea, emplea su mente y cerebro para expresar su idea y utiliza sus manos y sus fuerzas naturales para perfeccionar su concepto. La división de los aspectos y las fuerzas es irreal, excepto para una comprensión inteligente. (14-137/8)

 

 

Los Cuatro Rayos de Atributo

 

...el trabajo de los cuatro rayes menores (como se los denomina, aunque no existen menores ni mayores) consiste en elaborar o diferenciar las cualidades de la vida y producir la infinita multiplicidad de formas que permitirá a la vida asumir sus muchos puntos focales y expresar, mediante el proceso evolutivo de manifestación, sus diversas características. (14-78)

 

Las energías dentro de las cuales se distribuyen las tres corrientes se convierten en siete, que a su vez producen los cuarenta y nueve tipos de fuerza que se expresan a través de todas las formas, en los tres mundos y en los cuatro reinos de la naturaleza. Por lo tanto tenemos:

 

a.   Tres grupos monádicos de energías. La Unidad esencial expresa, mediante estos tres, las cualidades de Voluntad, Amor e Inteligencia.

 

b.   Siete grupos de energías, por cuyo intermedio los tres grupos expresan las cualidades divinas.

 

c.   Cuarenta y nueve grupos de fuerzas, a las cuales todas las formas responden, constituyendo el cuerpo de expresión de los siete, que a su vez son reflejo de las tres cualidades divinas. (14-30)    

 

Algunos dicen que los rayos se dividen en tres tipos; el primero y el segundo por sí solos, y los cinco restantes como un grupo. Desde este ángulo se los considera como tres rayos, y tipifican las diversas Trinidades. (14-144)

 

 

Los Propósitos de Rayo

 [i15] Ahora me referiré al propósito del rayo descripto en una antigua enseñanza, redactada en hojas tan viejas que la escritura se va desvaneciendo lentamente. La traduciré en lenguaje moderno, aunque se perderá gran parte del significado.

 

 


EL PRIMER PROPÓSITO DE LA DEIDAD

 

1er. Rayo. Voluntad o Poder.

 

Detrás del sol central sagrado, se halla oculta dentro de sus rayos una forma. Dentro de esa forma fulgura un punto de poder que aún no vibra, pero brilla cual luz eléctrica.

 

Ígneos son sus rayos. Consume todas las formas, pero no afecta la vida de Dios encarnado.

 

Desde el Uno que contiene a los siete, surge una palabra. Esa palabra reverbera a lo largo de la línea de esencia ígnea, y al resonar dentro del círculo de las vidas humanas, se convierte en una afirmación, un mandato expresado o una palabra de poder. Así queda plasmado en el molde viviente, el pensamiento de... (el nombre oculto e inexpresable del rayo.)

 

Que el dinámico poder y la eléctrica luz revelen el pasado, destruyan la forma y abran la puerta dorada. Esta puerta revela el camino que conduce hacia el centro donde mora Aquel cuyo nombre no puede ser oído dentro de los confines de nuestra esfera solar.

 

Su manto azul oculta su eterno propósito, pero cuando el sol sale y se pone, su rojo orbe es visto.

 

Su palabra es poder. Su luz es eléctrica. El relámpago es su símbolo. Su voluntad se halla oculta en la cámara de su pensamiento. Nada es revelado.

 

Se siente su poder. Los hijos de los hombres, que reaccionan a su poder, elevan a los límites más remotos de la luz, un interrogante:

 

¿Por qué este poder ciego? ¿Por qué la muerte? ¿Por qué esta desintegración de las formas?

 

¿Por qué negar el poder de poseer? ¿Por qué la muerte, oh Poderoso Hijo de Dios?

 

Imperceptiblemente llega la respuesta: poseo las llaves de la vida y de la muerte. Ato y desato. Soy el Destructor.

 

Este Señor de rayo no está aún en plena expresión, excepto a medida que cause destrucción y pone fin a los ciclos. Las Mónadas de poder son numéricamente inferiores a las otras. Los egos que pertenecen al rayo de poder no son muchos, y se caracterizan par la voluntad dinámica, y su poder dentro de la familia humana se desarrolla como fuerza destructiva, pero en último análisis [i16] es una destrucción que traerá la liberación. A medida que estudiamos los egos y las personalidades de primer rayo, observamos que la muerte y la destrucción siempre están presentes en su trabajo, de allí, la aparente crueldad e impersonalidad de sus reacciones. Los que pertenecen al primer rayo no tienen en cuenta la forma; su energía produce la muerte de la forma, pero introduce grandes períodos cíclicos de pralaya; el primer rayo controla el drama de la muerte en todos los reinos –destruye las formas, lo cual origina la liberación del poder y permite la “entrada a la Luz a través del portal de la Muerte”. La intención del Señor de primer rayo es permanecer detrás de Sus seis Hermanos, a fin de destruir las formas que Ellos han construido después de haber realizado Su propósito. Esto lo realiza haciendo pasar Su Poder a través de Sus cuerpos, y Su esfuerzo unido conduce a la abstracción y a retornar al centro del cual provino el impulso inicial. El propósito del primer rayo consiste, por lo tanto, en producir la muerte; una idea del mismo puede vislumbrarse al analizar algunos de los nombres aplicados al Señor de este rayo.

 

El Señor de la Muerte

El Que Abre la Puerta

El Que Libera de la Forma

El Gran Compendiador

El Elemento Ígneo que trae destrucción

El Cristalizador de la Forma

El Poder que toca y se retrae

El Señor de la Tierra Ardiente

La Voluntad que irrumpe en el Huerto

El Violador de Almas

El Dedo de Dios

El Aliento que quema

El Relámpago que aniquila

El Altísimo

 

Las cualidades y características de este Señor, que trae consigo la liberación, pueden ser inferidas de los seis aforismos que, según una antigua leyenda, le fueron dados por Sus seis Hermanos cuando le rogaban que detuviera Su mano y les diera tiempo para desarrollar Sus propósitos:

 

1.     Mata el deseo cuando el deseo ha cumplido su trabajo. Tú eres el que señala la realización.

    Cualidad............... clara visión.

 

2.  Busca el camino apacible, Oh Señor de Poder. Espera a tu hermano en el sendero de Amor. ÉI construye las formas que pueden resistir tu poder.

    Cualidad............... poder dinámico.

 

3. Detén tu mano hasta que haya llegado el momento. Entonces, otorga el don [i17] de la muerte, oh tú que abres la Puerta.

    Cualidad............... sentido del tiempo.

 

4. No permanezcas solo, únete a los muchos. Tú eres el Uno, el Aislado. Ven hacia los tuyos.

    Cualidad............... soledad.

 

5. Conduce a los tuyos, pero aprende a conocerlos. No odies el apego, pero ve su plan y su propósito.

    Cualidad...............      desapego.

 

6. La vida palpita a través de ti, el ritmo se impone. La vida es todo. Ama la vida en todas sus formas

    Cualidad..............  unidad de propósito. (14-72/4)

   

 

EL SEGUNDO PROPÓSITO DE LA DEIDAD

 

2do. Rayo. Amor-Sabiduría.

 

El Verbo emana desde el corazón de Dios, y emerge desde un punto central de amor. Ese Verbo es el amor mismo. El divino deseo colorea toda esa vida de amor. Dentro de la Jerarquía humana, tal afirmación adquiere poder y sonido.

 

En el principio era el Verbo. El Verbo ha morado y mora en Dios. En él era la luz. En él era la vida. Dentro de Su luz caminamos.

 

Su símbolo es el trueno, el Verbo que se expresa cíclicamente durante las edades.

 

Algunos de los nombres aplicados a este Señor de rayo, que imparten su propósito son:

 

El Que despliega la Gloria

El Señor de Amor Eterno

El Imán Cósmico

El Dador de Sabiduría

La Radiación de la Forma

El Maestro Constructor

El Otorgador de Nombres

El Gran Geómetra

El Que Oculta la Vida

El Misterio Cósmico

El Portador de Luz

El Hijo de Dios Encarnado

El Cristo Cósmico

 

[i18] La leyenda dice que Los seis Hermanos resumen sus cualidades en Los siguientes aforismos:

 

1. Emite el Verbo y expresa el radiante amor de Dios. Haz que todos los hombres oigan.

    Cualidad ....................  amor divino

 

2. Que brille la gloria del Señor. Que haya radiante luz lo mismo que radiante amor.

    Cualidad.....................  radiación

 

3. Atrae hacia ti el objeto de tu búsqueda. Arrebátalo de la noche del tiempo y trae a la luz del día a aquel que tú amas.

    Cualidad.....................  atracción.

 

4. Cuando la luz y el amor se demuestren deja que el poder interno produzca la perfecta flor. Que se emita la palabra que cura la forma. La secreta palabra que deberá ser entonces revelada.

    Cualidad..................... el poder de salvar.

 

5. Salvación, luz y amor, con el poder magnético de Dios, producen la palabra sabiduría. Emite esa palabra, y conduce a los hijos de los hambres desde el sendero del conocimiento al sendero de la comprensión.

    Cualidad.....................  sabiduría.

 

6. Dentro del radio del amor de Dios, dentro del círculo del sistema solar giran todas las formas, todas las almas, todas las vidas. Que cada hijo de Dios entre en su sabiduría. Revela a cada uno la unicidad de las muchas vidas.

    Cualidad.....................  expansión o inclusividad.    (14-74/5)

   

 

EL TERCER PROPÓSITO DE LA DEIDAD

 

3er. Rayo. Inteligencia Activa o Adaptabilidad.

 

Que el Guardián del Sur continúe con la construcción. Que aplique la fuerza que creará la brillante piedra viviente que encaja con toda exactitud en los planos del templo.

 

Que prepare la piedra angular y la coloque sabiamente en el norte, bajo el ojo de Dios Mismo, y la someta al equilibrio del triángulo.

 

Que el Investigador del pasado descubra el pensamiento de Dios, oculto profundamente en la mente de los Kumaras de Amor, y lleve a los Agnishvattas, que esperan en el lugar de la oscuridad, al lugar de la luz.

 

Que el Guardián de las chispas exhale el aliento divino sobre los puntos de fuego y avente la llama de lo que está oculto, lo que no se ve, e ilumine así todas las esferas donde Dios actúa.

(14-75/6)

 

[i19] Algunos de los nombres del Señor del tercer rayo indicar cómo emplea Su fuerza y cuál es Su verdadera naturaleza, éstos son:

 

El Custodio de los Archivos

El Señor de la Memoria

El Unificador do los Cuatro Inferiores

El Intérprete de lo Que he visto

El Señor del Equilibrio

El Divino Separador

La Esencial Vida Discriminadora

El Que produce la Alianza

El Triángulo de Tres lados

El Iluminador del Loto

El Constructor de los Cimientos

El Precursor de la Luz

El Que vela y sin embargo revela

El Dispensador del Tiempo

El Señor del Espacio

La Mente Universal

El Triple Pabilo

El Gran Arquitecto del Universo (14-76)

 

 

Las cualidades que caracterizan a este Señor de rayo están enumeradas en las siguientes frases:

 

1. Que se produzca la forma dual y oculte la vida. Que aparezca la forma y pruebe que es divina. Todo es de Dios.

    Cualidad....................   el poder de manifestar.

 

2. Que dé forma a la envoltura de acuerdo a lo que la habita. Que aparezca el huevo del mundo. Que pasen las edades, entonces que aparezca el alma. Que emerja la vida dentro del tiempo designado.

    Cualidad....................   el poder de evolucionar.

 

3. Que la mente controle. Que el claro fulgor del sol de la vida revele la mente de Dios, y que ponga en su camino a Aquel que brilla. Luego que lo conduzca al punto central donde todo se pierde dentro de la luz sempiterna.

    Cualidad..................... iluminación mental.

 

4. Dios y Su forma son uno. Oh soberano Señor de la forma revela este hecho. Dios y Su forma son uno. Niega el concepto dual. Da color a la forma. La vida es una; la armonía es completa. Comprueba que los dos son uno. [i20]

    Cualidad..................... el poder de producir síntesis en el plano físico.

 

5. Que se confeccionen las vestiduras del Señor y se presente el manto de muchos colores. Luego que se separe el manto de Eso que se oculta entre sus numerosos pliegues. Que se aparten las envolturas que velan. Que Dios sea visto. Que descienda Cristo de la cruz.

    Cualidad..................... investigación científica.

 

6. Que converjan los dos senderos. Que equilibre los pares de opuestos y que aparezca el sendero entre ambos. Dios, el sendero y el hombre son uno.

    Cualidad..................... equilibrio.  (14-77)

 

 

EL CUARTO PROPOSITO DE LA DEIDAD

 

4to. Rayo. Armonía, Belleza, Arte.

 

Color y, sin embargo, no se ve color alguno. El Sonido y el Uno inaudible se encuentran en un punto infinito de paz. El Tiempo y el Uno imperecedero niegan los pensamientos de los hombres. Pero el tiempo no existe.

 

Allí se encuentra la forma, sin embargo, el sentido psíquico revela lo que la forma es incapaz de ocultar –la síntesis interna, el omniabarcante prisma, ese punto de unidad que, al ser debidamente alcanzado, revela otro punto, donde los tres son uno y no existen solamente los dos.

 

Forma y alma se fusionan. La visión interna vigila la fusión, conoce la divina relación y ve a los dos como uno. Pero desde ese punto de realización elevada fulgura una visión superior ante el abierto ojo interno. Los tres son uno. No sólo los dos. Sigue tu camino en el Sendero, oh peregrino. (14-78)

 

El Señor del cuarto rayo tiene muchos nombres que merecen una cuidadosa consideración y estudio...

 

El Percibidor en el Camino

El Vínculo entre los Tres y el Tres

El Divino Intermediario

La Mano de Dios

El Uno Oculto

  La Simiente, que es la Flor

La Montaña donde muere la Forma

La Luz dentro de la Luz

El Corrector de la Forma

El Que señala la bifurcación del Camino

El Maestro [i21]

El Morador del Lugar Sagrado

El Inferior de los Tres, el Superior de Los Cuatro

La Trompeta del Señor

 

Los aforismos relacionados con el cuarto rayo no son fáciles de comprender. Se necesita ejercitar la intuición y se imparten a través de seis cortos y extremadamente breves mandatos...:

 

1. Pronuncia quedamente la Palabra. Habla quedamente.

    Cualidad.........   poder de penetrar en las profundidades de la materia.

 

2. Defiende el deseo. Da al buscador lo que necesita.

    Cualidad.........   los aspectos duales del deseo.

 

3. Haz descender el hilo. Abre el camino. Vincula al hombre con Dios. Levántate.

    Cualidad.........   el poder de revelar el sendero.

 

4. Todas las flores te pertenecen. Afirma las raíces en el lodo, las flores en el sol. Comprueba que el sol, el lodo, las raíces y las flores son uno.

    Cualidad.........   el poder de expresar la divinidad. Crecimiento.

 

5. Gira, retorna y vuelve a girar. Circula cíclicamente alrededor del círculo de los cielos. Comprueba que todo es uno.

    Cualidad.........   la armonía de las esferas.

 

6. Colora el sonido. Emite el color. Produce las notas y observa que pasan a los semitonos, que a su vez producen los sonidos. Así todos son vistas como uno.

    Cualidad.........   la síntesis de la verdadera belleza.  (14-78/9)

 

 


 

EL QUINTO PROPÓSITO DE LA DEIDAD

 

5to. Rayo. Conocimiento Concreto o Ciencia.

 

Los truenos retumban alrededor de la cima de la montaña; oscuras nubes ocultan la forma. La niebla, que asciende desde la esfera acuosa sirve para deformar el maravilloso..., que se halla en el lugar secreto. La forma se encuentra allí. Emite su nota.

 

Un haz de luz ilumina la forma; lo oculto aparece. El conocimiento de Dios y el conocimiento de cómo Él Mismo se oculta, halla su culminación en los pensamientos de los hombres. Las energías y las fuerzas reciben sus nombres secretes, revelan su propósito interno, y todo es visto como ritmo, como un retorno a sí mismo. El gran papiro puede ya ser leído. El propósito de Dios y Sus planes ya han sido fijados, y el hombre puede leer la forma. El Plan toma forma. El plan es forma. Su propósito es la revelación de la mente de Dios. El pasado revela la forma, pero el presente indica la afluencia de energía.

 

Lo que está en camino viene como una nube que vela al sol. Pero oculto detrás de esta inmanente nube está el amor, y en la tierra hay amor [i22] y en el cielo hay amor, y éste –el amor que renueva todas las cosas— debe ser revelado. Éste es el propósito que se halla detrás de todos los actos de este gran Señor del Conocimiento. (14-82)

 

Algunos de los nombres dados al Señor de este rayo son:

 

El Revelador de la Verdad

El Gran Vinculador

El Divino Intermediario

El Cristalizador de las Formas

El Triple Pensador

La Nube sobre la Cumbre de la Montaña

El Precipitador de la Cruz

La Espada Divisora

  El Aventador de la Broza

El Quinto Gran Juez

La Rosa de Dios

El Celestial

El Portal de la Mente de Dios

La Energía Iniciadora

El Regidor del Tercer Cielo

El Guardián del Portal

El Dispensador del Conocimiento

El Ángel con la Espada Flamígera

El Custodio del Secreto

El Amado del Logos

El Hermano que viene de Sirio

El Maestro de Los Hierofantes   (14-83)

 

[Los siguientes] seis aforismos fueron entonados par Sus seis Hermanos en esa trascendente crisis cuando vino a la existencia la familia humana y los Ángeles solares se sacrificaron a sí mismos...

 

1. Dios y sus Ángeles ahora se levantan y ven. Que las cimas de las montaña emerjan de la densa y acuosa niebla. Que el sol toque sus cumbres y permanezcan en la luz. Que resplandezcan.

    Cualidad.........   la entrada y la salida de la forma.

 

2. Dios y sus Ángeles ahora se levantan y oyen que un profundo murmullo se eleva [i23] y el clamor del hombre que busca penetra en sus oídos. Que el hombre escuche. Que el hombre llame. Que hable en voz alta.

    Cualidad.........   el poder de hacer oír la Voz del Silencio.

 

3. Dios y sus Ángeles ahora se levantan y palpan. Traigan el Cetro de Poder. Extiéndanlo externamente hacia los hijos de los hombres; tóquenlos con el fuego y luego acérquenlos. Háganlo.

    Cualidad.........   actividad iniciadora.

 

4. Dios y Sus Ángeles ahora se levantan y saborean. Que vengan todas las experiencias. Que aparezcan todos los caminos. Que disciernan, elijan, desmenucen y analicen. Todos los caminos son uno.

    Cualidad.........   la revelación del camino.

 

5. Dios y Sus Ángeles ahora se levantan y perciben el olor que asciende de la tierra ardiente del hambre. Que el fuego haga su trabajo. Atraigan al hombre dentro de la hoguera, y dentro del centro rojo-rosado se despoje de la naturaleza que lo demora. Que el fuego arda.

    Cualidad.........   purificación por el fuego.

 

6. Dios y Sus Ángeles ahora se levantan y fusionan los muchos en el Uno. Que continúe el trabajo de fusión. Lo que ha traído las cosas a la existencia que produzca la causa de su cesación. Que surja ahora un solo templo. Que aparezca la gloria culminante. Que así sea.

    Cualidad.........   manifestación de la gran luz blanca. (El Shekinah. A.A. B.)(14-83/4)

 

 

 


EL SEXTO PROPÓSITO DE LA DEIDAD

 

6to. Rayo. Devoción o Idealismo.

 

La cruzada ha comenzado. Los guerreros marchan. Aplastan y matan todo lo que impide su camino; pisotean todo lo que se yergue ante su camino. Marcha hacia la luz.

 

El trabajo sigue adelante. Los trabajadores cubren sus ojos por compasión y por temor. El trabajo es lo único de valor. La forma debe desaparecer para que el espíritu amoroso pueda descansar. Nada puede detener el progreso de los trabajadores del plan. Inician el trabajo asignado con himnos y cantos.

 

La cruz se erige en lo alto; la forma es colocada allí, y en esa cruz tiene que entregar su vida. Cada uno construye una cruz que forma la cruz, y asciende a la cruz.

 

A través de la guerra, del trabajo, el dolor y la fatiga, se realiza el propósito. Así lo expresó el símbolo. (14-85)

 

Se observará en qué forma este propósito produce su liberación cuando el hombre se lo aplica a sí mismo. Cuando el hombre lo aplica al hombre [i24] produce la corrompida y terrible historia de la crueldad del hombre contra el hombre... Algunos de Los nombres dados a este benéfico, pero algo violento y enérgico Señor de Rayo, son:

 

El Que niega el Deseo

El Que Ve lo Correcto

El Visionario de la Realidad

El Divino Ladrón

El Devoto de la Vida

El Aborrecedor de la Forma

El Guerrero en Macha

El Portador de la Espada del Logos

El Sostenedor de la Verdad

El Crucificador y el Crucificado

El Picapedrero

El Flamígero Imperecedero

El Que Nada puede Desviarlo

El Regidor Implacable

El General en el Perfecto Camino

El Que Guía a los Doce

 

En forma curiosa, este Señor de sexto rayo ha sido siempre un amado enigma para Sus seis Hermanos. Esto se pone de relieve en las preguntas que le formularon...

 

1. ¿Por qué es rojo el deseo? ¿Por qué es rojo como la sangre? Dí ¡oh Hijo de Dios!, ¿por qué tu camino está enrojecido par la sangre ?

    Cualidad.........   poder de matar el deseo.

 

2. ¿Por qué vuelves tu espalda a la esfera de la Tierra? ¿Es demasiado pequeña? ¿Demasiado pobre? ¿Por qué la pateas como una pelota en un campo de  juego?

    Cualidad.........   despreciar lo que no se desea.

 

3. ¿Por qué clavar la cruz desde la tierra al cielo? La tierra puede ser un cielo. ¿Por qué ascender a la cruz y morir?

    Cualidad.........   inmolación propia.

 

4. ¿Por qué luchar contra todo lo que está alrededor? ¿No buscas acaso la paz? ¿Por qué te interpones entre las fuerzas de la noche y del día? ¿Por qué permaneces inconmovible y sereno, incansable y sin temores ?

    Cualidad.........   resistencia y valentía.

 

5. ¿No ves a Dios en todo, la vida en todo y el amor en todo? ¿Por qué abandonar a aquellos a quienes amas y conoces bien?

    Cualidad.........   poder de desapegarme. [i25]

 

6. ¿Puedes detener las aguas de la sexta gran esfera? ¿Puedes detener el diluvio? ¿Puedes recuperar al cuervo y a la paloma? ¿Puedes tú, el pez, nadar libre?

    Cualidad.........   subyugar las aguas de la naturaleza emocional. (14-85/6)

 

 

 


EL SÉPTIMO PROPÓSITO DE LA DEIDAD

 

7mo. Rayo. Orden Ceremonial o Magia.

 

“Que se construya el Templo del Señor”, pregonó el séptimo gran Ángel. Entonces siete grandes hijos de Dios, en sus lugares, en el norte, sur, este y oeste, se encaminaron con paso mesurado y tomaron asiento. Así comenzó el trabajo de construcción.

 

Las puertas se cerraron. La luz brilló tenuemente. Los muros del templo no se divisaban. Los siete permanecían silenciosos y sus formas estaban veladas. El momento no había llegado para que brillara la luz. El Verbo no podía ser pronunciado. Sólo las siete Formas llevaron a cabo el trabajo. Un silencioso llamado fue emitido de una a otra. Sin embargo la puerta del templo permanecía cerrada.

 

A medida que pasaba el tiempo se escuchaban los sonidos de la vida. La puerta se abrió y luego se cerró y cada vez que se abría aumentaba el poder dentro del templo, la luz se acrecentaba con más fuerza, porque uno a uno penetraban en el templo los hijos de los hombres, pasaban de norte a sur, de oeste a este y en el centro del corazón hallaron luz, comprensión y poder para trabajar. Atravesaron la puerta; pasaron ante los Siete; levantaron el velo del templo, y entraron en la vida.

 

El templo se acrecentaba en belleza. Sus líneas, sus paredes y sus decorados, su altura, profundidad y anchura emergían lentamente y penetraban en la luz.

 

Del este surgió la Palabra: Abrid la puerta para todos los hijos de los hombres que vienen desde el oscuro valle de la tierra y buscan el templo del Señor. Dadles la luz. Descorred el velo del santuario interno y, mediante el trabajo de los artesanos del Señor, ampliad los muros del templo, y así iluminará al mundo. Emitid la Palabra creadora y resucitad a los muertos.

 

Así el templo de la luz será llevado del cielo a la tierra. Así sus muros serán erigidos en las grandes llanuras del mundo de los hombres. Así la luz revelará y nutrirá todos los sueños de los hombres.

 

Entonces el Maestro despertará en el este a todos los que están dormidos. Entonces en el oeste el guardián probará y juzgará a todos Los verdaderos buscadores de la luz. Entonces el guardián del sur instruirá y ayudará a los ciegos. Entonces el portal del norte quedará abierto de par en par, porque allí el [i26] Maestro invisible tenderá la mano para dar la bienvenida, y con el corazón comprensivo conducirá a los peregrinos hacia el este, donde brilla la verdadera luz.

 

“¿Por qué la apertura del templo?”, claman los Siete mayores. “Porque el trabajo está preparado; los artesanos también están preparados. Dios ha creado en la luz. Sus hijos pueden ahora crear. ¿Qué más puede hacerse?”.

 

“¡Nada!” fue la respuesta de los Siete mayores. “Que continúe el trabajo. Que los hijos de Dios creen”. (14-88/9)

 

Los nombres por los cuales este Señor de rayo es conocido, son muchos, y su significado es hoy de primordial significación. El trabajo futuro se desprende del estudio de los nombres siguientes:

 

El Mago Develado

El Trabajador del Arte Mágico

El Creador de la Forma

El Que Confiere la Luz proveniente del Segundo Señor

El Manipulador de la Varita

El Que Observa desde el Este

El Custodio del Séptimo Plan

El Invocador de la Ira

El Custodio de la Palabra Mágica

El Guardián del Templo

El Representante de Dios

El Que eleva hacia la Vida

El Señor de la Muerte

El Que alimenta el Fuego Sagrado

  La Esfera Giratoria

La Espada del Iniciador

El Divino Trabajador Alquimista

El Constructor del Cuadrado

La Fuerza Orientadora

El Ígneo Unificador

La Clave del Misterio

La Expresión de la Voluntad

El Revelador de la Belleza     (14-89/90)

 

 

Los aforismos que encierran Sus cualidades son los siguientes, y fueron susurrados esotéricamente en Sus oídos, cuando Él “abandonó el lugar más elevado y descendió a la séptima esfera para llevar a cabo [i27] el trabajo asignado”:

 

1. Lleva las herramientas contigo, hermano de la luz constructora. Talla hondo.  Construye y da forma a la piedra viviente.

    Cualidad.........   poder de crear.

 

2. Elige bien tus trabajadores. Ama a todos. Selecciona a seis, para que cumplan tu voluntad. Que el séptimo permanezca en el este. Llama al mundo para que penetre en aquello que construirá. Fusiona todo en la voluntad de Dios.

    Cualidad.........   poder de colaborar.

 

3. Siéntate en el centro, lo mismo que en el este. No te muevas de allí. Envía tus fuerzas para que cumplan tu voluntad y recupera luego esas fuerzas. Emplea bien el poder del pensamiento. Siéntate inmóvil.

    Cualidad.........   poder de pensar.

 

4. Observa cómo todas las partes entran en el propósito. Construye para la belleza, hermano Señor. Procura que todo los colores sean brillantes y diáfanos. Observa la gloria interna. Construye bien el santuario. Hazlo con cuidado.

    Cualidad.........   revelación de la belleza de Dios.

 

5. Cuida bien tus pensamientos. Entra a voluntad en la mente de Dios. Arrebata de allí el poder, el plan y la parte a desempeñar. Revela la mente de Dios.

    Cualidad.........   poder mental.

 

6. Permanece en el este. Los cinco te han dado la Palabra de amistad.  Yo, el sexto, te digo, que la emplees con los muertos. Revive a los muertos. Construye de nuevo las formas. Cuida bien esa Palabra. Procura que todos los hombres la busquen por sí mismos.

    Cualidad.........   poder de vivificar. (14-90/1)

 

 

 

La Individualización y los Siete Tipos de Rayo

 

Describiremos la reacción de estos siete tipos de rayo en el proceso de la Individualización (proceso de identificación con la forma) mediante siete enunciados ocultistas que, si son correctamente comprendidos, proporcionarán la clave de la nueva psicología. Ellos personifican los principales impulsos, la cualidad nativa y la técnica de desenvolvimiento.

 

Primer Rayo:

 

"El Bendito Ser se introduce como una flecha en la materia. Destruye (o rompe) el camino por el cual podría volver. Se entierra en las profundidades de la forma.

 

Afirma: 'Volveré. Mi poder es grande. Destruiré todos los obstáculos. Nada podrá impedir mi progreso hacia la meta. A mi alrededor yace [i28] lo que he destruido. ¿Qué debo hacer?'

 

La respuesta fue: ‘Pon orden en el caos, oh peregrino, en el camino de la muerte; éste es tu camino. Debes aprender a amar. Posees voluntad dinámica. La correcta destrucción para desarrollar el Plan deberá ser tu camino. Ajustándote al ritmo del planeta se liberará el oculto Bendito Ser y traerá orden’."

 

Segundo Rayo:

 

"El Bendito Ser construyó un arca. La construyó por etapas y la puso a flote en el seno de las aguas. Se ocultó profundamente y su luz ya no fue vista –únicamente se vio el arca flotando.

 

Se le oyó decir: ‘He construido, y construido sólidamente, pero estoy prisionero dentro de mi construcción. Mi luz está oculta. Sólo mi palabra surge. A mi alrededor yacen las aguas. ¿Puedo volver al lugar de donde he venido? ¿Tiene la palabra suficiente poder para abrir ampliamente la puerta? ¿Qué debo hacer?’

 

La respuesta fue: ‘Construye ahora un arca transparente que pueda revelar la luz, oh Constructor del arca. Y por medio de esa luz revelarás el camino iluminado. El poder de construir nuevamente, el empleo correcto de la Palabra, y el uso de la luz –los cuales liberarán al Bendito Ser profundamente oculto en el arca’."

 

Tercer Rayo:

 

"El Bendito Ser acumuló fuerza. Se ocultó detrás de un velo. Se envolvió dentro de ese velo, y ocultó profundamente su rostro. Nada podía ser visto excepto el movimiento y aquello que velaba. Dentro del velo estaba latente el pensamiento.

 

El pensamiento trasmitió: ‘Detrás de este velo de maya Yo permanezco, el Bendito Ser, pero no revelado. Mi energía es grande y, por medio de mi mente, puedo desplegar la gloria de la divinidad. Por lo tanto, ¿cómo puedo demostrar esta verdad? ¿Qué debo hacer? Divago en la ilusión’.

 

Se oyó la frase: ‘Todo es ilusión, oh Morador de las tinieblas. Sal a la luz del día. Despliega la gloria oculta del Bendito Ser, la gloria del Uno y  Único. La gloria y la verdad destruirán rápidamente aquello que ha ocultado la verdad. El prisionero puede liberarse. Rasgar el velo que ciega, enunciar claramente la verdad y practicar el bien, proporcionarán al Bendito Ser ese hilo dorado que lo liberará del laberinto de la existencia terrenal’."

 

Cuarto Rayo:

 

"El Bendito Ser se lanzó al combate. Vio la existencia como dos fuerzas bélicas y luchó contra ambas. Ceñido con la armadura de guerra, se detuvo en la mitad del camino y miró hacia los dos senderos. El fragor de la batalla, las diversas armas que aprendió a manejar, el deseo de no luchar, la [i29] emoción de descubrir que aquellos contra quienes luchaba eran sus hermanos, y él mismo, la angustia de la derrota y el himno de su victoria –todo esto lo abatió.

 

El Bendito Ser se detuvo e interrogó: ‘¿De dónde provienen la victoria y la derrota? ¿No soy acaso el Bendito Ser Mismo? Invocaré a los ángeles en mi ayuda’.

 

El sonido como de trompeta pregonó: ‘Levántate y lucha y reconcilia los ejércitos del Señor. No habrá batalla. Obliga a que cese el conflicto; invoca la paz para todos; haz de los dos un sólo ejército del Señor; que la victoria corone los esfuerzos del Bendito Ser armonizando todo. La paz está detrás de las energías bélicas’."

 

Quinto Rayo:

 

"El Bendito Ser ignoraba todo. Deambuló en profunda oscuridad espiritual. No halló explicación para este modo de vivir. Buscó entre los innumerables hilos que tejen la vestimenta del Señor y halló que había numerosos caminos que conducen al centro de la eterna trama. Las formas que tejen esa trama ocultan la divina realidad. Se extravió y lo embargó el temor.

 

Se preguntó: ‘Otra trama debe tejerse; otra vestimenta debe ser hecha. ¿Qué debo hacer? Enséñame otra forma de tejer’.

 

Respondió la Palabra en triple forma. Su mente respondió a la visión claramente evocada: –'La verdad está oculta en el Camino desconocido. El Ángel de la Presencia custodia ese Camino. La mente revela al Ángel y al portal. Mantente en esa Presencia. Levanta tus ojos. Entra por esa puerta dorada. Así el Ángel, que es la sombra del Bendito Ser, revelará el portal abierto. Ese ángel también debe desaparecer. El Bendito Ser permanece, pasa a través de ese portal y entra en la luz sublime'."

 

Sexto Rayo:

 

"El Bendito Ser captó la visión del Camino y lo siguió sin discriminar. La ira caracterizó sus esfuerzos. El camino conducía al mundo de la vida dual. Ocupó su lugar entre los pares de opuestos, y a medida que oscilaba como un péndulo entre ellos, obtenía fugaces destellos de la mente. Oscilaba en el medio cielo. Trató de oscilar hacia ese lugar radiante de luz donde estaba el portal en el Camino elevado. Pero siempre oscilaba entre los pares de opuestos.

 

Por último, se dijo a sí mismo: ‘Parece que no puedo encontrar el Camino. Pruebo este camino y lo recorro con energía, siempre con el más vehemente deseo. Pruebo todos los caminos. ¿Qué debo hacer para encontrar El Camino?’

 

Un grito se oyó. Parecía venir desde lo profundo de su corazón: ‘Oh Peregrino que estás en el Camino de la vida sensoria, huella tú el camino medio iluminado. Pasa directamente entre los mundos duales. Busca ese [i30] estrecho camino medio. Te conducirá a la meta. Busca la firme percepción que conduce a la perseverancia. Adhesión al Camino elegido, e ignorancia de los pares de opuestos, conducirán a este Bendito Ser que se halla en el camino iluminado, a la alegría del éxito obtenido’."

 

Séptimo Rayo:

 

"El Bendito Ser buscó la senda que conduce a la forma, pero se asió firmemente a la mano del Mago. Trató de reconciliar al Peregrino, que era él mismo, con la vida de la forma. Se encontró en el mundo caótico y trató de poner orden en él. Se introdujo en las más recónditas profundidades y se sumergió en el caos y el desorden. No comprendía, sin embargo, se mantuvo asido a la mano del Mago. Procuró establecer ese orden que su alma anhelaba. Conversó con todo aquel que encontraba, aumentando su confusión. Habló al Mago de la manera siguiente: ‘Los Caminos del Creador deben ser buenos. Detrás de todo lo que parece ser, debe haber un Plan. Enséñame el propósito de todo esto. ¿Cómo puedo trabajar sumergido en la más profunda materia? ¿Dime lo que debo hacer?’

 

El mago dijo: ‘Escucha el ritmo de los tiempos, oh Trabajador del más lejano mundo. Observa la palpitación del corazón en todo lo que es divino. Retírate en el silencio y armonízate con el todo. Entonces aventúrate más allá. Establece el ritmo correcto; lleva el orden a las formas de la vida, que deben expresar el Plan de la Deidad’.

 

Este Bendito Ser se libera a través del trabajo. Debe demostrar su conocimiento del Plan, pronunciando esas palabras que evocarán a los constructores de las formas y, de este modo, crear lo nuevo’.”

 

Podría ser de valor si se resumiera en términos más simples y menos ocultos la significación de las anteriores estanzas esotéricas, a fin de expresar su verdadero significado en sucintas y concisas frases. Las estanzas no serán de valor si no imparten a los estudiantes de este Tratado, que pertenecen a distintos tipos de rayos, algún significado útil por el cual puedan vivir en forma más veraz.

 

El Espíritu individualizado se expresa a través de los diversos tipos de rayo mediante el:

 

Primer Rayo:

 

La centralización dinámica.

La energía destructora.

El poder egoísta.

El desamor.

El aislamiento. ­[i31]

La ambición de poder y autoridad.

El deseo de dominar.

La fortaleza y la propia voluntad expresadas,

 

que conducen a:

 

El empleo dinámico de la energía para desarrollar el Plan.

El empleo de las fuerzas destructoras  a  fin  de  preparar  el  camino  para  los Constructores.    

La voluntad al poder con el fin de colaborar.

La comprensión del poder como la mejor arma del amor.

La identificación con el ritmo del Todo.

La extinción del aislamiento.

 

Segundo Rayo:

 

El poder de construir para fines egoístas.

La capacidad de sentir el Todo y permanecer apartado.

El cultivo de un espíritu separatista.

La luz oculta.

La realización del deseo egoísta.

El anhelo por el bienestar material.

El egoísmo y la subordinación de todos los poderes del alma a ese fin,

 

que conducen a:

 

La construcción inteligente de acuerdo al Plan.

La inclusividad.

El anhelo por obtener la sabiduría y la verdad.

La sensibilidad al Todo.

La renunciación a la gran herejía de la separatividad.

La revelación de la luz.

La verdadera iluminación.

El empleo correcto del lenguaje por la sabiduría adquirida.

 

Tercer Rayo:

 

La manipulación de la fuerza por medio del deseo egoísta.

El empleo inteligente de la fuerza con un móvil erróneo.

La intensa actividad material y mental.

La aplicación de la energía como un fin en sí misma. [i32]

El anhelo de obtener gloria y belleza para objetivos materiales.

El sumergimiento en el espejismo, ilusión y maya,

 

que conducen a:

 

La manipulación de la energía, a fin de revelar la belleza y la verdad.

El empleo inteligente de las fuerzas para el desarrollo del Plan.

La actividad rítmica ordenada en colaboración con el Todo.

El deseo de obtener la correcta revelación de la divinidad y de la luz.

La adhesión a la correcta acción.

La revelación de la gloria y la buena voluntad.

 

Cuarto Rayo:

 

La confusa lucha.

La comprensión de lo que es superior e inferior.

La oscuridad que precede a la expresión de la forma.

El ocultamiento de la intuición.

El sentimiento de la desarmonía y de la colaboración con la parte y no con el todo.

La identificación con la humanidad, la cuarta Jerarquía Creadora.

El indebido reconocimiento de lo que produce la palabra.

La sensibilidad anormal a lo que es el no-yo.

Los continuos puntos de crisis,

 

que conducen a:

 

La unidad y la armonía.

La evocación de la intuición.

El correcto juicio y la razón pura.

La sabiduría que se expresa por intermedio del Ángel de la Presencia.

 

Quinto Rayo:

 

La energía de la ignorancia.

La crítica. [i33]

El poder de razonar y destruir.

La separación mental.

El deseo de conocimiento, que conduce a la actividad material.

El análisis detallado.

El materialismo intenso y la momentánea negación de la Deidad.

La intensificación del poder de aislar.

La implicación que produce el énfasis erróneo.

Los distorsionados puntos de vista sobre la verdad.

La devoción mental a la forma y a su actividad.

La teología,

 

que conducen a:

 

El conocimiento de la realidad.

La comprensión del alma y sus potencialidades.

El poder de reconocer y hacer contacto con el Ángel de la Presencia.

La sensibilidad a la Deidad, la luz y la sabiduría.

La devoción espiritual y mental.

El poder de recibir la iniciación (este punto es de verdadera importancia).

 

Sexto Rayo:

 

La violencia. El fanatismo. La adhesión volitiva a un ideal.

La ceguera.

La militancia y la tendencia a producir dificultades en las personas y los grupos.

El poder de ver sólo el punto de vista propio.

La suspicacia respecto a los móviles del semejante.

La reacción rápida al espejismo y a la ilusión.

La devoción emocional y el idealismo confuso.

La actividad vibratoria entre los pares de opuestos.

La intensa capacidad de ser personal y hacer resaltar las personalidades,

 

que conducen a:

 

El idealismo incluyente y dirigido.

La constante percepción por medio de la expansión de [i34] la conciencia.

La reacción y la simpatía con el punto de vista de los demás.

La disposición a ver que el trabajo de otros progresa en la dirección elegida.

La elección del camino medio.

La paz y no la guerra. El bien del Todo y no de la parte.

 

Séptimo Rayo:

 

La magia negra, o el empleo de los poderes mágicos para fines egoístas.

El poder de "permanecer a la expectativa" hasta que emerjan los valores egoístas.

El desorden y el caos por la comprensión errónea del Plan.

El empleo erróneo del lenguaje para lograr el objetivo elegido.

La falta de veracidad.

La magia sexual. La perversión egoísta de los poderes del alma,

 

que conducen a:

 

La magia blanca: El empleo de los poderes del alma para fines espirituales.

La identificación de uno mismo con la realidad.

El correcto orden por medio de la correcta magia.

El poder de colaborar con el Todo.

La comprensión del Plan.

El trabajo mágico de la interpretación.

La manifestación de la divinidad.(15-41/6)

 

 

 

Las Cualidades de Rayo

 

El lector que se aboque al estudio de estas cualidades hallará enseñanzas de utilidad práctica. Cuando a él le parece que pertenece a algún rayo particular le indicará algunas de las características que debe buscar y también lo que debe hacer, expresar y superar. Dichas cualidades deben estudiarse desde dos ángulos: [i35] su aspecto divino y el opuesto, la forma. [El quinto] rayo, por ejemplo, demuestra ser el revelador del camino, y debemos recordar que revela el camino que desciende a la muerte o a la encarnación (la prisión del alma similar a la muerte) o el camino que asciende de la oscuridad a la luz pura del día de Dios. Menciono esto porque ansío grandemente que todos los que lean este tratado apliquen sus enseñanzas en la vida diaria. No tengo interés en tratar temas sobrenaturales y poco comunes que sirvan para el deleite de un apetito mental malsano. El hecho de atiborrar la mente con detalles sobre lo oculto no tiene propósito útil y sólo sirve para forzar las células cerebrales y nutrir el orgullo. (14-84/5)

 

Será evidente que las expresiones superiores e inferiores de un rayo están estrecha y mutuamente relacionadas, y que lo superior pierde fácilmente su aferramiento y lo inferior viene a la manifestación –algo que la misma evolución deberá eventualmente reajustar. (9-34)

 

 

El Primer Rayo de Voluntad o Poder

 

Virtudes especiales:

Fortaleza, valor, constancia y veracidad, proveniente de la absoluta falta de temor; poder de gobernar, capacidad para captar las grandes controversias con amplitud de criterio, y para manejar a los hombres y tomar decisiones.

 

Vicios del rayo:

Orgullo, ambición, versatilidad, inflexibilidad, arrogancia, deseo de dominar a los demás, obstinación, ira.

 

Virtudes a adquirirse:

Ternura, humildad, simpatía, tolerancia, paciencia.

 

A este rayo se lo denomina correctamente el del poder, pero si fuera sólo poder sin sabiduría ni amor, sería una fuerza destructiva y desintegradora. Sin embargo, cuando las tres características están unidas se convierte en un rayo creador y regidor. Quienes pertenecen a este rayo poseen mucha fuerza [i36] de voluntad, sea para el bien o para el mal, para el bien cuando la voluntad es dirigida con sabiduría y el amor la ha convertido en altruismo. El hombre que pertenece al primer rayo sIempre "estará al frente" en su campo de actividad. Puede ser el ladrón o el juez que lo condena, pero en cualquier caso se hallará a la cabeza de su profesión. Es el dirigente nato en cualquier carrera pública, alguien en quien se puede confiar y depender, defiende al débil y reprime la opresión, no teme a las consecuencias y es totalmente indiferente a los comentarios. Por otra parte un primer rayo que no ha sido modificado puede producir un hombre de naturaleza cruel, implacable e inflexible.

 

El hombre que pertenece al primer rayo es con frecuencia muy sentimental y afectuoso, pero no lo expresa fácilmente; le agradan los fuertes contrastes y las grandes masas de color, pero raras veces será un artista; le deleitan los grandes efectos orquestales y los coros estrepitosos; si contrariamente su rayo está modificado por el cuarto, sexto o séptimo, será un gran compositor. Algunos individuos que pertenecen a este rayo son sordos a las tonalidades y otros padecen de daltonismo, y no distinguen los colores diáfanos. Un hombre de este rayo distinguirá los colores rojo y amarillo, y confundirá irremediablemente el azul, el verde y el violeta.

 

El trabajo literario del hombre de primer rayo será enérgico y mordaz, no le preocupará su estilo ni la prolijidad. Ejemplos de este tipo podrían ser Lutero, Carlyle y Walt Whitman. Se dice que el mejor método que puede emplear el hombre de primer rayo para curar enfermedades, será extraer salud y fuerza de la gran fuente de vida universal por la fuerza de su voluntad, y derramarla sobre el enfermo. Por supuesto esto presupone un previo conocimiento de los métodos ocultos.

 

El método característico de este rayo para emprender la gran Búsqueda se hará mediante la fuerza de la voluntad. Un hombre de esta naturaleza podría, por así decirse, arrebatar el reino de los cielos "por la violencia". Hemos observado que el dirigente nato pertenece a este tipo de rayo, total o parcialmente. Produce el jefe supremo, como Napoleón o Kitchener. Napoleón pertenecía al primero y cuarto rayos y Kitchener al primero y séptimo rayos, otorgándole el séptimo su notable poder de organización. (14-168/9)

 

De las almas que pertenecen a este rayo se dice ocultamente "que vienen a [i37] la encarnación por la violencia". Se apropian dinámicamente de lo que necesitan. No tienen dificultades para satisfacer sus deseos. Permanecen solas en un aislamiento orgulloso, vanagloriándose de su fuerza y de su impiedad. Estas cualidades deben ser trasmutadas por el inteligente empleo del poder que los hace factores poderosos para el Plan y centros magnéticos de fuerzas,  reuniendo a su alrededor trabajadores y fuerzas. Un ejemplo de ello puede observarse en el trabajo que realiza el Maestro Morya, el cual es el centro magnético que atrae a todos los grupos esotéricos, confiriéndoles, por Su poder, la capacidad de destruir lo indeseable en la vida de los discípulos. Recuerden que el trabajo de estimular lo que es necesario, es una de las tareas más importantes de un Maestro, y el poder del discípulo para destruir aquello que lo limita es grandemente necesario. Las almas que pertenecen a este rayo, cuando vienen a la encarnación por medio del deseo, son codiciosas, demostrando la índole de la fuerza que emplean. Hay cierta medida de violencia en su técnica. Oportunamente "toman el reino de los cielos por la fuerza". (15-73)

 

...Las cualidades sobresalientes de primer rayo... son la soledad, el aislamiento y la capacidad de permanecer sólo e inconmovible. (5-300)

 

Es fácil para las personas que pertenecen al primer rayo resistir a la tendencia de identificarse con otros. Tener verdadera comprensión implica poseer una acrecentada capacidad de amar a todos los seres y no obstante, al mismo tiempo, mantener un desapego personal, que puede basarse fácilmente en la incapacidad de amar o en la preocupación egoísta por la propia comodidad –física, mental o espiritual y sobre todo emocional. Las personas que pertenecen al primer rayo temen a la emoción y la desprecian, pero a veces tienen que entrar en un estado emotivo antes de poder emplear correctamente la sensibilidad emotiva. (10-13)

 

A través de los que pertenecen al primer rayo, denominado el "Rayo destructor", fluye el poder del primer aspecto, el poder de dar fin. Tenderán a destruir a medida que construyen debido a la errónea orientación de la energía, al exceso de energía hacia una dirección determinada, [i38] o a la mala aplicación de la energía cuando trabajan en ellos mismos o con otros. Muchas personas de primer rayo se enorgullecen de esto y se escudan tras la excusa de que por pertenecer al primer rayo poseen inevitablemente la tendencia a destruir. Esto no es verdad. Los constructores –todas las personas que pertenecen al segundo rayo– deben aprender a destruir cuando son impulsados por el amor grupal y actúan bajo la influencia de la Voluntad o el aspecto de primer rayo. Los destructores deben aprender a construir, actuando siempre bajo el impulso del amor grupal y utilizando el poder afectivo en forma desapegada. Ambos grupos, constructores y destructores, deben constantemente trabajar desde el punto de vista de la realidad y del núcleo interno de la verdad y "permanecer siempre en el centro". (10-14/5)

 

La voluntad de la Deidad coloreó la corriente de unidades de energías que llamamos Rayo de Voluntad o Poder, el primer rayo, y el impacto de esa corriente sobre la materia del espacio aseguró que el oculto propósito de la Deidad sería oportuna e inevitablemente revelado. Éste es un rayo de intensidad tan dinámica que se lo denomina Rayo del Destructor. Aún no está en plena actividad, y lo estará sólo cuando pueda revelarse sin peligro el propósito. Son muy pocas las unidades de energía de este rayo que existen en el reino humano. Como dije anteriormente, todavía no ha encarnado un verdadero tipo de primer rayo. Su principal potencia se encuentra en el reino mineral y la clave del misterio del primer rayo se halla en el radio. (14-58)

 

 
El Segundo Rayo de Amor-Sabiduría

 

Virtudes especiales:

Calma, fuerza, paciencia y resistencia, amor a la verdad, lealtad, intuición, inteligencia clara y temperamento sereno.

 

Vicios del rayo:

Excesiva concentración en el estudio, frialdad, indiferencia hacia los demás, desprecio por las limitaciones mentales ajenas.

 

Virtudes a ser adquiridas:

Amor, compasión, altruismo, energía.

 

A este rayo se lo denomina el de la sabiduría, debido a su característico deseo de adquirir [i39] conocimiento puro y alcanzar la verdad absoluta –es frío y egoísta si no ama, y es inactivo si no posee poder. Si posee amor y poder, entonces tenemos el rayo de los Budas y de los grandes instructores de la humanidad –aquellos que habiendo alcanzado la sabiduría para emplearla en bien de los demás, se entregan por entero a difundirla. El estudiante que pertenece a este rayo está siempre insatisfecho de sus realizaciones más elevadas; no importa cuán amplio sea su conocimiento, su mente permanece siempre fija en lo desconocido, en el más allá y en las cumbres aún no escaladas.

 

El hombre de segundo rayo tendrá tacto y previsión; será un excelente embajador, un destacado maestro o director de escuela; como hombre mundano tendrá una inteligencia clara y sabia para tratar los asuntos que se le presentan y tendrá capacidad para inculcar a otros el verdadero punto de vista de las cosas y hacerlas ver como él las ve; será un buen hombre de negocio si su rayo está modificado por el cuarto, quinto y séptimo rayos. El militar que pertenece a este rayo proyectará campañas inteligentes y preverá las posibilidades; será intuitivo respecto al mejor camino a seguir y nunca pondrá imprudentemente en peligro la vida de sus hombres. No será rápido en la acción ni muy enérgico. El artista que pertenece a este rayo tratará siempre de enseñar por medio de su arte, y sus cuadros tendrán un significado. Su trabajo literario será siempre instructivo. El método para curar enfermedades del hombre de segundo rayo, será conocer a fondo el temperamento del paciente y también la naturaleza de la enfermedad, a fin de aplicar su fuerza de voluntad en forma eficaz.

 

El método característico para acercarse al Sendero consistirá en un concienzudo estudio de las enseñanzas, hasta que sean parte de la conciencia del hombre, y no un mero conocimiento intelectual, sino una regla espiritual de la vida, atrayendo así la intuición y la verdadera sabiduría.

 

Un tipo indeseable de segundo rayo que se aboca a adquirir únicamente conocimiento para sí mismo, es totalmente indiferente a las necesidades humanas. La previsión de un hombre así degenerará en suspicacia, su calma en frialdad e inflexibilidad. (14-170/1)

 

[i40] Las almas que pertenecen a este rayo emplean el método de "reunir" o "juntar". El alma emite una vibración (aunque poco podemos comprender el verdadero significado de esta palabra), y esa vibración afecta su medio ambiente y atrae al punto central de energía los átomos de sustancia de los tres planos. El método es relativamente moderado comparado con el del primer rayo, y el proceso es algo más prolongado, mientras que el período de ejercer su influencia (llevado a cabo antes de penetrar en los tres mundos, con el propósito de venir a la existencia) es mucho más extenso. Esto se refiere a la influencia ejercida sobre la sustancia utilizada para construir la forma y no sobre la forma terminada, por ejemplo, el niño en la matriz de la madre. En el primer caso podría decirse que las almas de primer rayo, rápida y súbitamente, desean encarnar y emplean métodos rápidos. Las almas de segundo rayo tardan más en llegar a esa actividad "impulsiva" (en el sentido de verse impulsados a actuar, o no hacerlo a tiempo) que conduce a elaborar ocultamente una apariencia para manifestarse.

 

Cuando las almas que pertenecen a este rayo vienen a la encarnación por medio del deseo, atraen. Son más magnéticas que dinámicas; son constructivas y trabajan en esa línea que, dentro de nuestro universo, constituye para todas las vidas y formas la línea de menor resistencia. (15-73/4)

 

La enseñanza es una expresión de la energía de segundo rayo. (5-208)

 

La energía de Amor-Sabiduría...tiene siempre un efecto en todo ser humano, la cual estimula la tendencia hacia la buena voluntad y produce un desarrollo mental que trasmuta en sabiduría el conocimiento adquirido a través de las edades. Actualmente, lo que se necesita es sabiduría. Quienes ahora tratan de fomentar la buena voluntad en sí mismos y en otros, serán estimulados a iniciar una acción inteligente. Por lo tanto, verán que la afluencia de esta energía es de primera y mayor necesidad. Puede llegar hasta la humanidad, porque los fundadores de todas las religiones mundiales (no me refiero a sus numerosas diversificaciones) se hallan unidos a Cristo, Su Señor y Maestro; a través de Su esfuerzo unido y [i41] dirigido afluirán estas energías. Recuerden que el Cristo representa la energía del amor y el Buda la energía de la sabiduría. (13-530/1)

 

Los que pertenecen al segundo rayo se dividen... en dos grupos, hablando en forma general; hay, lógicamente, numerosas excepciones. Las almas que pertenecen al aspecto sabiduría del segundo rayo ingresan en Shamballa, se unen al Gran Concilio desempeñando algún cargo. Buda fue una de ellas. Los que pertenecen al aspecto amor de segundo rayo huellan alguno de los distintos senderos, principalmente el de los Salvadores del Mundo, convirtiéndose en Psicólogos Divinos e Instructores del Mundo. Cristo combinó en Sí Mismo estos tres grandes rasgos.

 

Las almas de este último grupo que pertenece al segundo rayo también se dividen en dos grupos: uno recorre el camino del análisis especializado y de la inclusividad comprensiva, y son los ocultistas destacados; el otro se caracteriza por el amor puro. En el grupo que se abre camino hasta Shamballa descubriremos que todas sus relaciones están regidas por una desarrollada sencillez.

 

La sencillez y la unidad están relacionadas; la sencillez es un punto de vista directo, libre de los espejismos y las complejidades de la mente que construye formas mentales; la sencillez es claridad de propósito, firmeza de intención y esfuerzo, libre de las trabas que la duda y la tortuosa introspección imponen; la sencillez conduce a amar sencillamente, sin esperar nada; lleva al silencio –no al silencio como mecanismo de escape, sino como "oculta abstención de hablar". (6-446)  

   

 

El Tercer Rayo de Actividad y Adaptabilidad

 

Virtudes especiales:

Amplio criterio respecto a todas las cuestiones abstractas, sinceridad de propósito, intelecto claro, capacidad de concentrarse en estudios filosóficos, paciencia, cautela, no le preocupan las trivialidades ni quiere preocupar a otros.

 

Vicios del rayo:

Orgullo intelectual, frialdad, aislamiento, inexactitud en los detalles, distracción, obstinación, egoísmo, crítica excesiva respecto a los demás. [i42]

 

Virtudes a adquirirse:

Simpatía, tolerancia, devoción, exactitud, energía, sentido común.

 

Éste es el rayo del pensador abstracto, del filósofo y del metafísico, del hombre que se deleita en las matemáticas superiores pero, si no está modificado por un rayo práctico, no se preocupará por tener al día su contabilidad. Tendrá una imaginación muy desarrollada; por el poder de su imaginación captará la esencia de una verdad; su idealismo será con frecuencia muy marcado, es soñador y teórico; debido a sus amplios puntos de vista y gran cautela ve con la misma claridad todas las facetas de un asunto, lo cual a veces detiene su acción. Será un buen hombre de negocios; como militar resolverá teóricamente los problemas de táctica en su despacho, pero rara vez se destacará en el campo de batalla. Como artista, su técnica no será refinada, pero sus temas serán fecundos en ideas y despertarán interés. Amará la música, pero si no está influido por el cuarto rayo no será compositor. Poseerá ideas fecundas en todos los sectores de la vida, pero es demasiado impráctico para llevarlas a cabo.

 

El individuo que pertenece a este rayo es excesivamente despreocupado, desaseado, ocioso e impuntual; no le importan las apariencias, pero si tiene el quinto como rayo secundario, el sujeto cambiará totalmente. Los rayos tercero y quinto producen el historiador perfecto y equilibrado, que capta ampliamente su tema y verifica con paciente exactitud todos los detalles. Además los rayos tercero y quinto unidos, producen los grandes matemáticos que se remontan a los niveles del pensamiento y a los cálculos abstractos y pueden llevar los resultados obtenidos a la aplicación científica. El estilo literario del hombre de tercer rayo es con demasiada frecuencia complicado e indefinido, pero esto cambia si está influenciado por el primero, cuarto, quinto o séptimo rayos; bajo el quinto rayo será un maestro de la pluma.

 

El método para curar enfermedades del hombre de tercer rayo consiste en emplear las drogas extraídas de minerales o de yerbas que pertenecen al mismo rayo del paciente a quien desea aliviar.

 

El método de emprender la gran Búsqueda que corresponde a este tipo de rayo es reflexionando profundamente sobre líneas filosóficas o metafísicas, hasta [i43] llegar a comprender el grandioso más Allá y la gran importancia que tiene hollar el Sendero que lo conduce allí. (14-171/2)

 

Así como codicia y atracción, son los términos aplicables a los métodos empleados en los dos primeros rayos, el proceso de "manipulación selectiva" es la característica de este tercer rayo. Este método es totalmente diferente en su técnica de los dos mencionados anteriormente. Podría decirse que la tónica que genera la actividad iniciada por las almas de este rayo es de tal índole, que los átomos de los distintos planos se mueven como si respondieran conscientemente a un proceso selectivo. La actividad vibratoria del alma se hace sentir, y los átomos van llegando desde puntos ampliamente diferentes en respuesta a cierta cualidad de la vibración. Es mucho más selectiva que en el caso del segundo rayo.

 

Así como en el primer caso las almas aparentemente se posesionan indiscriminadamente de lo que necesitan, y obligan a la sustancia así apropiada a tomar la forma o apariencia requerida, revistiéndola con la cualidad necesaria, en forma dinámica y potente, análogamente a como las almas de segundo rayo inician un movimiento que reúne material del circundante ambiente inmediato y le imponen la cualidad deseada por medio de la atracción magnética, así también en las almas de tercer rayo el material requerido es seleccionado de distintos puntos, pero el elegido ya tiene las cualidades necesarias (observen esta diferencia) y nada se lo impone. (15-74/5)

 

...Si [el estudiante] utiliza la fuerza de tercer rayo en forma personal, será tortuoso en sus proposiciones, sutil y avieso en sus argumentos, manipulará las relaciones con sus semejantes, interferirá en todo, tratará de arreglar el mundo, manejará las vidas de otras personas, o tomará tan firmemente las riendas del gobierno, en beneficio personal, que sacrificará todo y a todos para sus propios fines. Sin embargo, si es un verdadero discípulo y aspirante, trabajará con el Plan y manejará la fuerza de tercer rayo para llevar a cabo los propósitos amorosos de la Realidad espiritual. Será activo y su palabra trasmitirá la verdad, la cual conducirá a ayudar a [i44] otros, porque serán sinceras y ecuánimes. (4-411/2)

 

...El tercer rayo... se expresa mediante el tercer gran centro mayor del planeta, denominado Humanidad.(9-19/2)

 

 

El Cuarto Rayo de Armonía, Belleza y Arte

 

Virtudes especiales:

Grandes afectos, simpatía, valor físico, generosidad, devoción, intelecto y percepción rápidos.

 

Vicios del rayo:

Egocentrismo, preocupación, inexactitud, falta de valor moral, fuertes pasiones, indolencia, extravagancia.

 

Virtudes a ser adquiridas:

Serenidad, confianza, autocontrol, pureza, altruismo, exactitud, equilibrio mental y moral.

 

A este rayo se lo denomina "el rayo de la lucha" porque en él las cualidades rajas (actividad) y tamas (inercia) están en forma extraña, tan equilibradas, que la lucha entre ambas quebranta la naturaleza del hombre de cuarto rayo; cuando el resultado es satisfactorio se lo denomina el "Nacimiento de Horus" o del Cristo, originado por la agonía del dolor y el constante sufrimiento.

 

Tamas o inercia, produce apego a las comodidades y a los placeres, detesta causar dolor y llega hasta la cobardía moral, la indolencia, y a dejar las cosas como están, a descansar y a no pensar en el mañana. Rajas o actividad, es fogosa, impaciente e impulsa siempre a la acción. Estas fuerzas opuestas de la naturaleza convierten la vida del hombre de cuarto rayo en una perpetua lucha y desasosiego; las fricciones y las experiencias así adquiridas traen una rápida evolución, pero el hombre puede fácilmente convertirse en un héroe o en una nulidad.

 

Es el rayo del valiente capitán de caballería, indiferente a sus propios riesgos y a los de sus seguidores. El hombre que pertenece a este rayo hará que renazca la esperanza perdida, porque en los momentos de gran excitación es dominado totalmente por rajas o actividad; es el rayo del arriesgado especulador y del tahúr, lleno de entusiasmo y proyectos, fácilmente agobiado por el fracaso o el dolor, pero recuperándose rápidamente de sus reveses e infortunios.

 

[i45] Es preeminentemente el rayo del color, del artista, cuyo colorido es siempre admirable, aunque sus dibujos muchas veces son defectuosos (Watts pertenecía al cuarto y segundo rayos). El hombre de cuarto rayo ama el color, y generalmente puede crearlo. Si no ha tenido entrenamiento como artista, con toda seguridad el sentido del color se expresará en otra forma, como selección en el vestir y en la decoración.

 

Las composiciones musicales de cuarto rayo están plenas de melodía, porque el hombre que pertenece a este rayo ama la melodía. Como escritor o poeta, su trabajo será con frecuencia brillante y abundarán las pintorescas descripciones pictóricas, pero serán inexactas, exageradas y frecuentemente pesimistas. Por lo general se expresa bien y tiene sentido del humor, pero, según su disposición de ánimo, pasará de una conversación brillante a un silencio melancólico. Es una persona deliciosa y difícil de convivir con ella.

 

El mejor método para curar, del hombre que pertenece al cuarto rayo, es el masaje y el magnetismo, utilizados con conocimiento.

 

El método de acercamiento al Sendero será por autocontrol, adquiriendo así el equilibrio entre las fuerzas antagónicas de la naturaleza. El camino inferior y extremadamente peligroso, es el del Hatha Yoga.  (14-172/3) 

 

El cuarto Rayo de Armonía a través del Conflicto es el factor controlador de los asuntos humanos de todos los tiempos y, particularmente, hoy. (18-524)

 

En último análisis, el cuarto rayo, enseña el arte de vivir para crear una síntesis de la belleza. No hay belleza sin unidad, sin un incorporado idealismo y sin el resultante desenvolvimiento simétrico. Este no es el rayo del arte, como se pretende a menudo, sino la energía que otorga belleza a esas formas vivientes que encarnan las ideas e ideales que buscan expresión inmediata. Mucha gente pretende estar en el cuarto rayo, porque sueña con la expresiva vida artística. Como anteriormente he indicado el arte creador se expresa en todos los rayos. (9-106)

[Este rayo] actuará de la manera siguiente:

 

Se desarrollará la intuición gracias al conocimiento de las vibraciones del sonido y de las matemáticas superiores. [i46] Éste ya se ha iniciado exotéricamente.

 

La música será reconocida como medio para construir y destruir, y se estudiarán las leyes de la levitación y el movimiento rítmico de todas las formas, desde un átomo hasta un sistema solar. Se practicará, en los dos planos inferiores, la manipulación de todo tipo de materia por medio del sonido, y cuando esté en proceso de realizarse la síntesis de los cuatro rayos en el tercero, se manifestará un conocimiento similar en el plano mental.

 

Se permitirá, gradualmente, la publicación exotérica de las leyes del fuego. Existen veintisiete leyes ocultas que, en el estado actual de la evolución, sólo son reveladas después de la iniciación. En ellas se resumen las leyes básicas del color, de la música y del ritmo. Cuando la música produzca color o estímulo y cuando por ejemplo, en los cuadros resplandezca o se revele lo subjetivo que se halla dentro de lo objetivo, entonces este cuarto Rayo de Armonía alcanzará su fructificación. (3-359)

 

[El] cuarto rayo de armonía da a todas las formas lo que produce belleza y actúa para lograr la armonización de todos los efectos que emanan del mundo de las causas, el mundo de los tres rayos mayores. El rayo de belleza, arte y armonía produce la cualidad de la organización mediante la forma. En último análisis, es el rayo de la exactitud matemática y no el rayo del artista, como muchos creen. El artista se encuentra en todos los rayos, al igual que el ingeniero, el médico, el hombre que forma su hogar o el músico. Quiero aclarar esto porque existen muchos falsos conceptos sobre este tema. (14-61/2)

 

 

El Quinto Rayo de Conocimiento Concreto o Ciencia

 

Virtudes especiales:

Declaraciones estrictamente exactas, justicia (sin clemencia), perseverancia, sentido común, rectitud, independencia, intelecto agudo.

 

Vicios del rayo:

Crítica mordaz, estrechez mental, arrogancia, carácter rencoroso, carente de compasión, irreverente, lleno de prejuicios. [i47]

 

Virtudes a adquirirse:

Reverencia, devoción, conmiseración, amor y amplitud mental

 

Es el rayo de la ciencia y de la investigación. El hombre que pertenece a este rayo poseerá un intelecto agudo, gran exactitud en los detalles y hará incansables esfuerzos para llegar al origen de los detalles más pequeños y comprobar todas las teorías. Por lo general será excesivamente veraz, explicará en forma lúcida los hechos, aunque a veces sea pedante y cansador debido a su obstinación en repetir menudencias triviales e innecesarias. Será ordenado, puntual y eficiente; no le agradará recibir favores ni halagos.

 

Es el rayo del químico eminente, del electricista práctico, del ingeniero sobresaliente, del gran cirujano. El estadista que pertenece al quinto rayo tendrá puntos de vista estrechos, pero será excelente director de algún departamento técnico especial, aunque persona desagradable para sus subordinados. El militar se adaptará más fácilmente a la artillería y a la ingeniería. Es raro encontrar al artista en este rayo, a no ser que lo influyan, como rayos secundarios, el cuarto y el séptimo. Aún así el colorido será apagado y las esculturas carecerán de vida; la música, si es compositor, no será atractiva, aunque técnicamente correcta en su forma. El estilo en el escritor y orador será la claridad misma, pero carecerá de vehemencia y esencia; frecuentemente se extenderá demasiado, debido al deseo de decir todo lo que puede sobre el tema que trata.

 

Como cirujano será perfecto y sus mejores curaciones serán hechas por medio de la cirugía y la electricidad.

 

El método de acercamiento al Sendero para los que pertenecen al quinto rayo es mediante la investigación científica llevada al máximo, y la aceptación de las deducciones extraídas. (14-174)

 

...Este rayo es quien construye Las formas, utiliza la materia y da cuerpo a las ideas o entidades, va sean cósmicas, del sistema, lunares o subhumanas. (3-363)

 

El quinto rayo actúa activamente en el plano de mayor importancia para la humanidad [el plano mental] siendo para el hombre el plano del alma y de la mente superior e inferior. Personifica el principio del conocimiento, y debido a su [i48] actividad y a su íntima relación con el tercer Rayo de Inteligencia Activa, podría considerárselo especialmente en estos mementos como el rayo que tiene mayor relación vital con el hombre. Es el rayo que produce la individualización –como cuando estaba activo en la época lemuriana– lo cual significa textualmente el cambio de la vida evolucionante de Dios en una nueva esfera de percepción. Al principio, esta particular trasferencia a formas más elevadas de percepción, tiende a la separatividad.

 

El quinto rayo ha producido lo que llamamos ciencia. En la ciencia encontramos una condición extremadamente rara. La ciencia es separatista en su modo de encarar los diferentes aspectos de la divina manifestación que denominamos el mundo de fenómenos naturales, pero de hecho no es separatista porque existe poco antagonismo entre las ciencias y poca competencia entre los científicos. Los trabajadores del campo científico se diferencian profundamente en esto de los del campo religioso. (14-63)

 

 

El Sexto Rayo de Idealismo Abstracto y Devoción

 

Virtudes especiales:

Devoción, concentración mental, amor, ternura, intuición, lealtad, reverencia.

 

Vicios del Rayo:

Amor egoísta y celoso, depende demasiado de los demás, parcialidad, autoengaño, sectarismo, superstición, prejuicios, conclusiones demasiado rápidas, arranques de ira.

 

Virtudes a adquirirse:

Fortaleza, autosacrificio, pureza, veracidad, tolerancia, serenidad, equilibrio, sentido común.

 

A este rayo se lo denomina el rayo de la devoción. El hombre que pertenece a este rayo tiene instintos e impulsos religiosos y un intenso sentimiento personal, y no considera nada equitativamente. Todo a sus ojos es perfecto o intolerable; sus amigos son ángeles, sus enemigos el reverso. Sus puntos de vista, en ambos casos, no se basan en los méritos intrínsecos de cada uno, sino en el modo con que la persona lo atrae, o  por la simpatía o antipatía que demuestra hacia sus ídolos favoritos, sean estos [i49] concretos o abstractos, porque es muy devoto a una persona o a una causa.

 

Siempre debe tener un "Dios personal", una encarnación de la Deidad para adorar. El mejor individuo de este tipo de rayos es el santo, el peor el intolerante y el fanático, el mártir y el inquisidor típico. Todas las guerras religiosas o cruzadas, han sido originadas debido al fanatismo de sexto rayo.

 

El hombre es frecuentemente de naturaleza benévola, pero puede enfurecerse y ser irascible. Ofrendará su vida por el objeto de su devoción o veneración, pero no levantará un dedo para ayudar a aquellos por quienes no siente simpatía. Como soldado odia la guerra, pero muchas veces en el fragor de la batalla luchará como un poseído. Nunca será un gran estadista ni hombre de negocios, pero puede ser un gran predicador u orador. Será el poeta de las emociones (tal como Tennyson) y el autor de libros religiosos, en poesía o en prosa. Siente devoción por la belleza, el color y todas las cosas agradables, pero no tendrá gran capacidad productiva, a no ser que se halle influido por uno de los rayos de las artes prácticas, el cuarto o el séptimo. Su música será melodiosa y frecuentemente compondrá oratorias o música sacra.

 

El método de curación para el hombre de este rayo será por la fe y la oración. El acercamiento al Sendero será a través de las plegarias y la meditación a fin de lograr la unión con Dios. (14-175/6)

 

El idealismo es el don principal de la fuerza de sexto rayo. (5-208)

 

El sexto rayo de devoción personifica el principio de reconocimiento. Con esto quiero significar la capacidad de ver la ideal realidad que reside detrás de la forma; implica que se debe aplicar en forma concentrada el deseo y la inteligencia, a fin de expresar la idea presentida. Es responsable de la mayor parte de las formulaciones de ideas que han hecho avanzar al hombre y de gran parte del énfasis puesto sobre la apariencia que ha velado y ocultado esos ideales. (14-63/4)

 

La religión pura, sin tacha y espiritualmente enfocada, es la más alta expresión del sexto rayo...

 

[i50] En la misma relación se encuentran entre los aspectos inferiores de sexto rayo, todos los tipos de religión dogmática y autoritaria, expresados por las iglesias organizadas y ortodoxas. Todas las teologías formuladas son expresiones inferiores de verdades espirituales elevadas, porque incluyen las reacciones mentales del hombre religioso, su confianza en sus propias deducciones mentales y la seguridad de que él está en lo cierto. No contienen los valores espirituales tal como realmente existen. En consecuencia, la temible naturaleza de las expresiones inferiores de sexto rayo y el control ejercido por las fuerzas de la separatividad (característica predominante de la actividad inferior de sexto rayo), en ninguna parte se ve en forma tan poderosa como en la historia religiosa y eclesiástica, con su odio, fanatismo y pomposa y lujosa atracción, que llenan el oído y el ojo físico, su separatividad de todos los demás credos, como también sus disensiones internas, sus grupos disidentes, sus camarillas e intrigas. La iglesia se ha alejado de la sencillez que está en Cristo. (9-32/3)

 

El devoto de sexto rayo es mucho más abstracto y místico en su trabajo y pensamiento, y pocas veces llega a comprender realmente la correcta relación que existe entre forma y energía. Piensa casi totalmente en términos de la cualidad y presta poca atención al aspecto material de la vida y a la verdadera significación de la sustancia cuando produce fenómenos. Tiende a considerar a la materia como de naturaleza maligna y a la forma una limitación, poniendo el énfasis únicamente sobre la conciencia del alma, considerándola de suma importancia. (9-94)

 

Nos inclinamos a reconocer con facilidad que el sexto rayo, que actúa a través de Marte, rige al cristianismo. Es una religión de devoción, fanatismo, máxima valentía e idealismo, que pone el énfasis espiritual sobre el individuo, su valor y sus problemas, el conflicto y la muerte. Todas estas características nos son  familiares por la presentación teológica cristiana. (16-164/5)

 

...No debe haber personas de sexto rayo en puestos influyentes, porque no saben colaborar y con frecuencia constituyen puntos de disensión y antipatía. (6-83) [i51]

 

 

El Séptimo Rayo de Ley Ceremonial o Magia

 

Virtudes especiales:

Fortaleza, perseverancia, valor, cortesía, excesivamente detallista, confianza en sí mismo.

 

Vicios del Rayo:

Formulismo, intolerancia, orgullo, estrechez mental, criterio superficial, excesivo engreimiento.

 

Virtudes a adquirirse:

Comprensión de la unidad, amplitud mental, tolerancia, humildad, benevolencia, amor.

 

Este es el rayo del ceremonial por el cual el hombre se deleita de "todas las cosas realizadas en forma decente y ordenada" y de acuerdo a reglas y precedentes. Del gran sacerdote y el chambelán de la corte, del militar que es genio nato para la organización; del administrador general, que vestirá y alimentará a sus tropas de la mejor manera posible; de la perfecta enfermera que cuida los menores detalles, aunque a veces se incline demasiado a no considerar la idiosincrasia de los pacientes, y trata de obligarlos a que se ajusten a una rutina.

 

Es el rayo de la forma, del perfecto escultor que ve y produce la belleza ideal, del diseñador de hermosas formas y de los moldes de cualquier tipo; pero un hombre así no tendría éxito como pintor, a no ser que ejerza influencia el cuarto rayo. La combinación del cuarto con el séptimo rayo podría dar el tipo más elevado de artista, la forma y el color serían sublimes. El trabajo literario del hombre que pertenece al séptimo rayo será notable por su estilo super refinado, y como escritor se preocupará más por la forma que por el tema de su trabajo, pero poseerá fluidez para escribir y hablar. El hombre de séptimo rayo será frecuentemente sectario; se deleitará con los ceremoniales y las fiestas de guardar, las grandes procesiones y espectáculos, los desfiles navales y militares, el estudio del árbol genealógico y las reglas de precedencia.

 

El individuo indeseable que pertenece al séptimo rayo es supersticioso; un hombre de esta naturaleza se preocupará por las premoniciones, los sueños, las prácticas [i52] ocultistas y los fenómenos espiritistas. El individuo deseable de este rayo tiene la absoluta intención de hacer lo correcto, pronunciar la palabra correcta en el momento oportuno, de allí su gran éxito social.

 

Los métodos de curación para el hombre de séptimo rayo serán aplicar con extrema exactitud el tratamiento ortodoxo para curar la enfermedad. La práctica de la Yoga no le ocasiona males físicos.

 

Se acercará al Sendero cumpliendo las reglas de la práctica, y el ritual, y puede fácilmente evocar y controlar las fuerzas elementales. (14-176/7)

 

La principal función... del séptimo rayo es efectuar el trabajo mágico de fusionar espíritu y materia, a fin de producir la forma manifestada a través de la cual la vida revelará la Gloria de Dios. (14-289)

 

Cabría preguntar aquí qué valor tiene esta información para el estudiante. Como ilustración es conveniente que reflexione sobre la significación de la entrada del actual Rayo de Ley Ceremonial o Magia, que se relaciona con las fuerzas constructivas de la naturaleza y se refiere a la inteligente utilización de la forma por el aspecto vida. Es mayormente el rayo del trabajo ejecutivo y tiene por objeto construir, coordinar y producir cohesión en los cuatro reinos inferiores de la naturaleza. Se caracteriza principalmente por la energía manifestada en el ritual, pero esta palabra no debe restringirse a su actual empleo en el ritual masónico o religioso. Su aplicación es mucho más amplia e incluye los métodos de organización manifestados en todas las comunidades civilizadas, como en el mundo del comercio y las finanzas y las grandes empresas comerciales, observados en todas partes. Ante todo, el interés reside en que el rayo ofrece oportunidad a las razas occidentales, y mediante esta fuerza vital de la organización ejecutiva, de gobierno por la regla y el orden, el ritmo y el ritual, llegará una época en que las razas occidentales (con su activa mente concreta y su amplia capacidad para los negocios) podrán recibir la iniciación –iniciación que, como debe recordarse, se recibirá en un rayo que temporariamente se reconoce como rayo mayor. Gran número de iniciados que obtuvieron el grado de adepto en el último ciclo, fueron orientales [i53] y los que tuvieron oportunamente cuerpos indúes. Este ciclo fue regido por el sexto rayo, que ahora va desapareciendo, y los dos precedentes. Manteniendo el equilibrio llegará el momento en que se observará un período de realizaciones de parte de los occidentales, en un rayo apropiado a su tipo mental. Es interesante observar que el tipo oriental logra su objetivo a través de la meditación con un mínimo de ritual y organización ejecutiva, y que el occidental lo logrará, en parte, mediante la organización que la mente inferior produce y por un tipo de meditación donde la intensa concentración comercial podría considerarse como ejemplo. La aplicación de la mente en forma unilateral de un hombre de negocios europeo o americano, puede ser considerada como un tipo de meditación. Cuando se purifique el móvil que subyace en esa concentración, llegará el día de la oportunidad para los occidentales. (1-148/9)

 

...La energía superior y más vital de séptimo rayo es la más activa en esta época y su idealismo resultante y los consiguientes conceptos de la nueva era actúan sobre las mentes sensibles de la raza, preparando así a la humanidad para un cambio muy necesario y grande. El trabajo del Rayo de Orden Ceremonial consiste en "introducir" en la tierra o hacer físicamente visibles, los resultados de la unión entre espíritu y materia. Su función es revestir con materia el espíritu produciendo la forma. (9-37)

 

Los poderes de la era de la magia son numerosos, y una de las razones por las cuales está apareciendo ahora el séptimo rayo, se debe a la rápida integración y perfeccionamiento de la personalidad humana; lograr la integración superior del alma con la personalidad resulta hoy más posible y fácil que nunca. Las nuevas formas, por las cuales la tan deseada consumación puede efectuarse, deben desarrollarse, en consecuencia, de manera gradual y científica. Esto, como puede fácilmente concebirse, se realizará mediante la intensificación de las fuerzas que funcionan a través del cuerpo etérico, mediante la coordinación de los siete centros mayores y el establecimiento de sus relaciones rítmicas. El séptimo rayo rige predominantemente los niveles etéricos del plano físico. No rige la forma física densa, que está controlada por el tercer rayo. [i54] El cuerpo etérico o vital, responde y se desarrolla bajo las influencias entrantes de séptimo rayo. (9-88)

 

...Se dice que el séptimo rayo rige al reino mineral, mediante el cual manifiesta esa significativa característica y cualidad del alma que llamamos radiación. El término describe exactamente el resultado del estímulo del alma sobre cada forma y dentro de ella. La vida del alma oportunamente se irradia más allá de la forma, y dicha radiación produce efectos definidos y calculados. (9-92)

 

El séptimo Rayo de Orden Ceremonial o Magia, personifica una curiosa cualidad, característica sobresaliente de la Vida especial que anima este rayo. La cualidad o principio, constituye el factor coordinador que unifica la cualidad interna con la forma, o la apariencia tangible externa. Este trabajo se desarrolla principalmente en los niveles etéricos e incluye energía física. Tal el verdadero trabajo mágico. Quisiera indicar que cuando el cuarto y el séptimo rayos vengan juntos a la encarnación, tendremos un período muy peculiar de revelación y portador de luz. Se ha dicho que en ese período "el Templo del Señor adquirirá más gloria y los Constructores se regocijarán". (14-64)

 

 

El Séptimo Rayo y el Ritual

 

Sería prudente dilucidar en parte la idea que subyace en el ceremonial y en el ritual. Actualmente hay mucha oposición al ceremonial y un sin número de personas buenas y bien intencionadas consideran que han superado y trascendido el ritual. Se jactan de haber alcanzado lo que llaman "liberación", olvidando que sólo el sentido de individualidad les hace adoptar esa actitud, y que es imposible efectuar ningún trabajo grupal sin alguna forma de ritual. Negarse a participar de la actividad uniforme no significa ser un alma liberada.

 

La gran Hermandad Blanca tiene sus rituales, cuyo objetivo es introducir y ayudar a realizar los distintos aspectos del Plan y las diversas actividades cíclicas de ese Plan. Donde se practiquen esos rituales, [i55] cuando su significado (inherentemente presente) permanece oculto e incomprendido, debe haber como consecuencia la expresión de un espíritu de inercia, inutilidad y desinterés por las fórmulas y las ceremonias. Cuando se explica que el ritual y la ceremonia organizadas sólo son custodios de fuerzas y energías, entonces la idea es verdaderamente constructiva en su efecto y es posible colaborar con el Plan, entonces comenzará a demostrar el objetivo de todo servicio divino. Todo servicio se rige por el ritual. (14-285)

 

Una de las primeras lecciones que aprenderá la humanidad bajo la potente influencia del séptimo rayo es que el alma controla su instrumento, la personalidad, mediante el ritual o por la imposición de un ritmo regular, porque el ritmo define realmente al ritual. Cuando los aspirantes al discipulado imponen un ritmo en sus vidas lo denominan disciplina y se sienten muy felices por ello. Los grupos que se reúnen para efectuar cualquier ritual o ceremonial (ritual de la iglesia, del trabajo masónico, entrenamiento en el ejército o la marina, organizaciones comerciales, la correcta dirección de un hogar, un hospital, un espectáculo, etc.) son de naturaleza análoga, porque obliga a los participantes a una actividad simultánea y a una empresa o ritual idénticos. Nadie, en esta tierra, puede evadir el ritual o ceremonial, porque también la salida y la puesta del sol, imponen su ritual, así como el trascurso cíclico de los años, los poderosos movimientos de los grandes centros poblados, la ida y venida de los trenes, los transatlánticos y el correo y las continuas trasmisiones de radio –todo esto impone un ritmo a la humanidad, lo reconozca o no. Los actuales grandes experimentos de la estandarización y la regimentación son también una expresión de esos ritmos, pues se manifiestan a través de las masas de cualquier nación.

 

Resulta imposible eludir el proceso del ceremonial en el vivir. Es reconocido inconscientemente, seguido ciegamente, constituyendo la gran disciplina de la respiración rítmica de la vida misma. La Deidad trabaja con el ritual y está sometida al ceremonial del universo. Los siete rayos entran en actividad y salen nuevamente bajo el impulso rítmico y ritualista de la Vida [i56] divina. Así también se construye el templo del Señor por el ceremonial de los constructores. Todos los reinos de la naturaleza están sujetos a la experiencia ritualista y a los ceremoniales de expresión cíclica. Eso sólo puede comprenderlo el iniciado; cada hormiguero y cada colmena están análogamente impelidos por los rituales instintivos y los impulsos rítmicos. (14-286/7)

 

Los Rayos y sus Colores

   

 

...un rayo, del cual los demás son subrayos, podría considerarse como un círculo de séptuple luz. La tendencia del estudiante es imaginar siete franjas que se proyectan hacia abajo, a los cinco planos inferiores, hasta hacer contacto con el plano de la tierra, siendo absorbidos en la materia densa. Esto no es así. Los siete colores pueden ser considerados como un conjunto de siete colores que circulan y cambian continuamente, moviéndose a través de los planos hacia su punto de origen... Las siete franjas de color emanan del rayo sintético. El subrayo índigo del rayo índigo forma el sendero de menor resistencia, desde el corazón de la materia más densa, volviendo otra vez a su fuente. Las franjas de color forman un anillo circulante, que, moviéndose a diferentes grados de vibración, atraviesa todos Los planos en círculos descendentes y ascendentes. Quiero poner de manifiesto especialmente aquí, que las siete franjas no se mueven todas al mismo ritmo; en ello reside la clave de la complejidad del tema. Algunas circulan a un ritmo de vibración más rápido que otras. Por consiguiente –como llevan en sí sus correspondientes Mónadas– tienen aquí la respuesta a la pregunta de por qué algunos egos parece que progresan más rápidamente que otros.

 

Estos círculos de color no siguen un curso recto y libre de obstáculos, sino que se entremezclan en forma muy curiosa, mezclándose entre sí y absorbiéndose uno a otro en ciclos determinados y reuniéndose en grupos  de a tres o de a cinco, pero siempre yendo hacia adelante. Esta es la verdadera base del diseño romboidal que tiene sobre la espalda la serpiente de la sabiduría. Las escamas entrelazadas de la piel de la serpiente deberían ser representadas par tres líneas principales de color, entrecruzándose con los otros cuatro colores. (2-159)

 

[i57] ...El color no es más que la forma que asume una fuerza de cualquier tipo, cuando ésta se mueve a cierto ritmo y su acción y movimiento están o no obstruidos por lo material a través de lo cual actúa. En esta frase reside la clave para solucionar el problema respecto a la diferencia de colores en los planos superior e inferior. La resistencia que ofrece la materia al descenso de la fuerza o vida, y su densidad o tenuidad relativa, explican la diferencia de color. (2-173)

 

...Los colores vistos en el aura de un salvaje y en el de un hombre común evolucionado, son extraordinariamente distintos. ¿Por qué? Porque uno se mueve o vibra a un grado lento, el otro con mayor rapidez. Uno tiene un ritmo lento, pausado y pesado, el otro un ritmo pulsante, moviéndose a enorme velocidad, permitiendo en consecuencia a la materia que compone esos cuerpos actuar con mayor rapidez

 

Por lo tanto, quisiera señalar que a medida que la raza progresa como unidad colectiva, Quienes la observan desde un plano superior, se dan cuenta del constante mejoramiento de los colores y de la mayor pureza y trasparencia de los matices en el aura de la raza, aura compuesta por las auras combinadas de los entes de la raza. (2-173/4)

 

...Estas influencias (las cuales se manifiestan como colores cuando están en contacto con la materia) se mueven en sus propios ciclos ordenados. A dichos ciclos se los describe como la entrada o salida de un rayo. En esa cuarta ronda están en actividad, comúnmente, cuatro rayos, en cualquier momento dado. Con esto trato de inculcarles que aunque todos los rayos se manifiestan en el sistema solar, en ciertas etapas de manifestación predomina simultáneamente un número mayor o menor. Estos rayos, fuerzas, influencias o coordinación de cualidades, al expresarse en términos de luz coloran la materia sobre la que hacen impacto, dándole ciertos matices conocidos, los cuales dan el tono a la vida de la Personalidad o del Ego. Ustedes los conocen como cualidades del carácter y el clarividente los ve como color.

 

En consecuencia, se verá que los grupos de unidades que convergen, debido a la similitud de vibración, poseen aproximadamente el mismo [i58] matiz básico, aunque con numerosas diferencias menores de color y tono. Como ya dije, se puede calibrar y juzgar el color de grandes mesas de personas. Así los miembros de la Jerarquía, en Cuyas manos se halla el desarrollo evolutivo en los tres mundos, pueden juzgar la etapa alcanzada y el propósito realizado.

 

Los distintos rayos entrantes traen unidades matizadas por esos rayos. Otros desaparecen llevando consigo unidades de un matiz básico diferente. Durante el período de transición, la mezcla de colores asume enorme complejidad, siendo de ayuda y beneficio mutuos. Cada rayo da algo a los otros rayos que se hallan al mismo tiempo en encarnación, afectándose ligeramente la vibración rítmica. Este efecto puede ser imperceptible, desde el punto de vista del presente y del tiempo en los tres mundos, pero en virtud de la frecuente reunión e intercambio de fuerzas y colores y de su constante acción e interacción, se producirá un constante nivelamiento general y una similitud de vibración. Por lo tanto, verán que se obtiene la síntesis al finalizar un mahamanvantara mayor. Los tres rayos absorben a los siete y oportunamente se fusionan en el rayo sintético.

 

En el microcosmos los tres rayos, de la Mónada, el Ego y la Personalidad, predominarán, absorberán a Los siete y, con el tiempo, también se alcanzará la fusión en el rayo sintético de la Mónada. La analogía será perfecta. (2-174/5)

 

Cada individuo vibra en cierta medida. Los que saben y poseen clarividencia y clariaudiencia descubren que toda materia emite sonidos y palpita y tiene su propio color. Por lo tanto cada ser humano puede emitir un sonido específico. Al emitirlo hace que resplandezca como color, y la combinación de ambos indica en cierta medida cuál es su vibración específica.

 

Cada ente de la raza humana pertenece a alguno de los siete rayos, en consecuencia predomina en él algún color y emite algún sonido; las graduaciones son infinitas y los matices del color y del sonido son innumerables. Cada rayo tiene sus rayos subsidiarios a los cuales domina y actúa como rayo sintético. Estos siete rayos están vinculados con los colores del espectro. Tenemos los [i59] rayos rojo, azul, amarillo, anaranjado, verde y violeta. Existe el rayo que los sintetiza a todos, el índigo. Tenemos los tres rayos principales, rojo, azul y amarillo y los cuatro colores secundarios que, en la Mónada en evolución, tiene su correspondencia en la Tríada espiritual y en el cuaternario inferior. El Logos de nuestro sistema se concentra en el amor o aspecto azul que, en síntesis, se manifiesta como índigo. Este tema sobre los rayos y sus colores, confunde al neófito. Sólo puedo indicar algunas ideas y, en el cúmulo de sugerencias, podrá llegar oportunamente la luz. La clave reside en la similitud del color, lo cual significa una semejanza de nota y ritmo. Por lo tanto, cuando un hombre pertenece a los rayos rojo y amarillo, con el rojo como rayo primario, y encuentra otro ser humano que pertenece a los rayos azul y amarillo con una secundaria similitud al amarillo, puede producirse un reconocimiento. Pero si un hombre que pertenece a los rayos amarillo y azul, tiene como color primario al amarillo, encuentra a un hermano que pertenece a los rayos amarillo y rojo, el reconocimiento es mutuo e inmediato porque el color primario es el mismo. Cuando esta causa fundamental de asociación o disociación, sea mejor comprendida, los colores secundarios actuarán como lugar de encuentro que redundará en beneficio mutuo de las partes involucradas.

 

Los colores rojo, azul y amarillo son primarios e irreductibles y constituyen los colores de los rayos principales.

   

    a. Voluntad o poder ......................     Rojo

 

    b. Amor-Sabiduría ........................     Azul

 

    c. Inteligencia active .. .................     Amarillo

   

Tenemos además los rayos secundarios:

 

    d. Anaranjado

 

e. Verde

   

    f. Violeta

   

 y el rayo sintetizador, índigo. (14-120/1)

 

 

 

Combinaciones o Relaciones de Rayo

   

[i60] El primero y segundo rayos actúan estrechamente unidos, el amor y la voluntad se identifican íntimamente en los niveles superiores de la conciencia y del servicio, las dos energías básicas que constituyen en realidad una gran expresión de los planes y del propósito divinos. (6-445)

 

Muy fácilmente se pasa por alto un aspecto en la relación entre los rayos primero y segundo. El segundo rayo se exterioriza, es incluyente, amistoso y se inclina al apego; el primer rayo se aísla, es excluyente, antagónico y tiende al desapego. El conflicto entre ambas energías –unidas en una encarnación– ha producido las distorsionadas y lamentables condiciones de la vida, que lo han caracterizado y que usted reconoce, y le causan mucha y verdadera angustia. Es tiempo que termine el choque de estas dos fuerzas; el conflicto sólo se definirá cuando su alma de segundo rayo subyugue a su personalidad de primer rayo. (6-596)

 

En conexión con los cinco rayos que según hemos observado están actualmente influyendo o comenzando a influir sobre la humanidad (los rayos primero, segundo, tercero, sexto y séptimo), deberían recordar que su efecto varía de acuerdo al tipo de rayo o cualidad de rayo del individuo implicado y según su etapa en la escala de la evolución. Estos puntos a menudo se olvidan. Por ejemplo, si un hombre pertenece al segundo Rayo de Amor-Sabiduría, puede esperarse que la influencia de este rayo y la del sexto (que está en la línea de poder de segundo rayo) sea fácilmente eficaz, constituyendo necesariamente la línea de menor resistencia. Esta situación puede por lo tanto producir una indebida sensibilidad y desenvolvimiento desequilibrado de las características. Nuestras características ejercen influencias sobre la conducta, y nuestras reacciones sobre las circunstancias. Esto significará también que la influencia de los rayos primero, tercero y séptimo, será fundamentalmente perturbadora y provocará resistencia o, por lo menos, una actitud no receptiva. En el mundo, los rayos que están hoy en la línea de la energía del primer Rayo de Voluntad o Poder (en el que se incluyen el tercero y el séptimo) [i61] se hallan en la proporción de tres a dos (en lo que concierne a la actual manifestación), en consecuencia podemos esperar una expresión más plena de los atributos y acontecimientos de primer rayo, que de otra manera no sería posible. Esto será especialmente así porque el sexto rayo está saliendo  rápidamente de la manifestación. (9-100/1)

 

...Las características de cualquier rayo tienen una analogía más estrecha con uno de los rayos que con los demás. Esto es verídico. El único que se encuentra solo y no tiene relación con los demás es el cuarto rayo...

 

Existe una estrecha relación entre el tercero y el quinto rayos. Al buscar el conocimiento, el sendero a seguir es, por ejemplo, el estudio laborioso y minucioso de los detalles, tanto en filosofía, matemáticas superiores, como en las ciencias prácticas.

 

La analogía entre el segundo y el sexto rayos se demuestra en la captación intuitiva del conocimiento sintetizado y en el vínculo común de lealtad y fidelidad.

 

Destreza, inmutabilidad y perseverancia, son las características que corresponden al primero y al séptimo rayos. (14-177)

 

...Existe una estrecha relación entre el tercero y el sexto rayos, así como entre el primero y el segundo y el segundo y el cuarto. El cuarto, el quinto, el sexto y el séptimo, no tienen tal relación paralela, uno más uno es igual a dos, dos más dos es igual a cuatro, tres más tres es igual a seis. Entre estos pares de rayos afluye una línea especial de energía que merece la atención de los discípulos que están llegando a ser conscientes de su relación, relación e interacción que sólo entra en actividad en una etapa relativamente elevada de la evolución. (15-288/9)

 

 

 

 

Manifestación Cíclica de los Rayos

   

...Sólo será posible aferrarnos al concepto mental de que los rayos, esquemas, planetas, cadenas, rondas, razas y leyes forman una unidad; desde el punto de vista humano es increíblemente confuso, y la clave para su solución parece tan oculta como inútil; sin embargo, desde el punto de vista [i62] logoico, el todo se mueve al unísono y es geométricamente exacto. A fin de dar una idea de la complejidad del ordenamiento, quisiera señalar aquí que los mismos Rayos circulan y la Ley del Karma controla el entrelazamiento. Por ejemplo, el primer Rayo puede circular alrededor de un esquema (si es el Rayo principal del esquema) con su primer subrayo manifestándose en una cadena, el segundo en una ronda, el tercero en un período mundial, el cuarto en una raza raíz, el quinto en una subraza y el sexto en una rama de la raza. Expongo esto como ilustración y no como la afirmación de algo que está en manifestación actualmente. Esto nos da una idea de la vastedad del proceso y de su maravillosa belleza. Resulta imposible pasar a través de algún Rayo y visualizar o concebir de alguna manera su belleza; sin embargo, para quienes están en niveles más elevados y poseen una visión más amplia, el esplendor del diseño es evidente.

 

Su complejidad aumenta para nosotros porque aún no comprendemos el principio que rige esta mutación. Ni siquiera es posible, aún para la mente humana más elevada en los tres mundos, presentir y aproximarse a ese principio. Por mutación quiero significar el hecho de que se hacen constantes cambios y traslados e interminables entrelazamientos e intervinculaciones y también un incesante flujo y reflujo en la dramática interacción de las fuerzas que representan la síntesis dual del Espíritu y de la materia. Hay una constante rotación en los Rayos y planos, de acuerdo a su relativa importancia desde el punto de vista del tiempo, el cual está más íntimamente asociado a nosotros. Pero podemos estar seguros que hay algún principio fundamental que dirige todas las actividades del Logos en Su sistema y, por medio de la lucha para descubrir el principio fundamental sobre el cual descansan nuestras vidas microcósmicas, podemos descubrir aspectos de este principio logoico inherente. Para nuestra consideración esto nos abre una amplia perspectiva y aunque pone de relieve la complejidad del tema, demuestra también la divina magnitud del esquema con su complicada magnificencia. (3-487/8)

 

Los estudiantes deben tener presente cuando estudian los planos –la sustancia y energía de los planos–, que éstos cambian continuamente pues se hallan condicionados por el flujo y el reflujo. La materia de todos [i63] los planos circula y, cíclicamente, ciertas partes están más energetizadas que otras; de este modo se halla sometida a una triple influencia o –empleando otras palabras– la sustancia dévica está sujeta a un estímulo cíclico triple:

   

1.   El estímulo de rayo, depende del rayo que se halle en el poder. Es intersistemático y planetario.

 

2.   El estímulo zodiacal, proveniente de fuera del sistema, siendo también cósmico y cíclico.

 

3.   El estímulo solar, impacto de la fuerza o energía que proviene directamente del sol sobre la sustancia de un plano; emana del “corazón del Sol” y es particularmente potente. (3-548)

 

Además de considerar los rayos como canales á través de los cuales fluye todo lo que existe, debemos reconocerlos como influencias que actúan a su vez en el mundo. Cada rayo posee un período de máxima influencia a la cual todo está sujeto en gran medida, no sólo los que pertenezcan por naturaleza a ese rayo particular, sino los que pertenecen a otros rayos. El extenso período de influencia de cada rayo se divide en siete etapas, cada una de las cuales está cualificada por la influencia del período más extenso de rayo, el cual se intensifica cuando alcanza el máximo período de su propio subrayo (por ejemplo, la influencia del sexto rayo es mayor durante el período del sexto subrayo). Debemos observar que el término “sub-rayo”, se emplea simplemente por conveniencia, a fin de designar un período más breve de influencia y no para señalar cualquier diferencia en la naturaleza del rayo. (14-142)

 

...Quizás podamos llegar a la conclusión de que la época en que cada subrayo ejerce su influencia modificadora tiene una duración de ciento cincuenta a doscientos años.

 

No sabemos cuántas veces (tal vez siete) se repiten sucesivamente los subrayos en el ciclo del rayo mayor. Lógicamente debe ser más de una vez. (14-143)

 

Los rayos afluyen durante:

 

1.   Un ciclo solar, como el actual, donde el segundo rayo de Amor-Sabiduría es el rayo principal y los demás son sólo subsidiarios.

 

2.   Un ciclo planetario... en conexión con las razas...

 

3.   Los ciclos relacionados con los doce signos del zodíaco. [i64] Son principalmente dos:

 

a.Los conectados con una ronda zodiacal completa, de más o menos 25.000 años.

b.     Los conectados con cada uno de los doce signos, que entran y salen de la manifestación más o menos cada 2.100 años.

   

4.   Los ciclos en que ciertos rayos preponderan durante un período de evolución racial, como los cinco períodos mayores raciales a los cuales nos hemos referido.

 

5.   Los ciclos menores que se hallan dentro y fuera de manifestación...

 

6.   Los ciclos de actividad de los rayos, determinados por orden numérico.

   

    El primer rayo, por ejemplo, rige todos los ciclos que comprenden un millón de años, cien mil años, mil años, cien años y un año. El séptimo rayo controla similarmente ciclos de siete mil años, y siete millones de años, etc. El intercambio y la interacción de estos ciclos de rayos es tan intrincado y grande, que si me explayara más sólo serviría para confundirlos. Sin embargo, recuerden que los siete rayos están siempre activos y actúan en forma simultánea, pero cíclicamente, y bajo el plan dirigido por las mentes personificadas por los rayos, algunas de estas influencias y fuerzas predominan más en un determinado momento que en otro, y ciertas actividades y sus resultados se expresan más por la influencia de un rayo que de otro. Dichas influencias afluyen a través de todas las formas en todos los reinos, produciendo efectos específicos, definidos y diferentes formas de vida, determinado tipo de comprensión y expresiones de conciencia de las correspondientes formas que, para ese período, son el producto del plan acordado y ejecutado por las fuerzas constructoras que trabajan en completa armonía, aunque momentáneamente están bajo el predominio de una de ellas. Entran en actividad constructiva; pasan por ese determinado ciclo especial; luego salen o mueren para esa actividad, y son “elevadas al cielo”, hasta que retorne nuevamente su ciclo. Este proceso se efectúa y vuelve a efectuarse constantemente, repitiendo el drama del nacimiento, de la muerte y de la resurrección.

 

[i65] En esta actividad de rayo se hallará el verdadero significado de la Ley de Renacimiento, la cual está detrás del proceso de la encarnación y reencarnación. No puedo extenderme más sobre esto, excepto indicar que las ideas de los hombres y las enseñanzas sobre la reencarnación son aún infantiles e inexactas. Son necesarios muchos reajustes y reordenamientos de las ideas antes de poder obtener la verdadera comprensión de esta ley cíclica fundamental.

 

Por consiguiente, la aparición cíclica, rige tanto a los rayos como a los reinos de la naturaleza y a las formas de dichos reinos. Determina la actividad de Dios Mismo. Las razas encarnan, desaparecen y reencarnan, y lo mismo hacen las vidas en las formas. La reencarnación o actividad cíclica, reside detrás de todas las actividades y apariencias fenoménicas. Es un aspecto de la vida palpitante de la Deidad, la exhalación y la inhalación del proceso de la existencia y de la manifestación divina. (14-215/6)

 

Los ciclos de los rayos de aspecto son más prolongados que los de los rayos de atributos, y su curso es ocultamente lento y de efecto acumulativo y –a medida que trascurren las épocas– aumenta constantemente su impulso. Los ciclos de los rayos de atributo son breves y producen un constante latido cardíaco y un ritmo regular en el sistema solar. (14-276)

 

Sólo un rayo se halla hoy realmente fuera de manifestación y actúa totalmente detrás de la escena, el primer rayo. En lo que a la humanidad concierne hace sentir su presencia y su potencia predomina cuando se ha alcanzado la etapa del discipulado aceptado . Acrecienta su poder a medida que se progresa en el Sendero. De este modo comienza a reunirse en el aspecto subjetivo de la vida un creciente grupo de quienes pueden actuar bajo la influencia de este primer rayo. Cuando suficientes hijos de los hombres puedan actuar de este modo, su respuesta conjunta constituirá un canal a través del cual el primer rayo podrá venir a la manifestación. Esta es una de las principales actividades y objetivos de la Jerarquía. (14-275/6)

 

[El primer] rayo está todavía fuera de la manifestación física, pero comienza a afectar definidamente al plano mental; allí influye la mente de los discípulos de todas partes del mundo y prepara [i66] el terreno para la aparición de cierto grupo de discípulos provenientes de Shamballa. Dentro de dos mil años, a partir de hoy, la influencia de este rayo se hará sentir poderosamente en el plano físico. Dentro de cien años se notará su potencia en el plano astral. (9-105)

 

Los ciclos del segundo rayo se repiten rápidamente, debido a su excesiva potencia. Por ser uno de los rayos mayores de nuestro sistema solar (los demás rayos sólo son aspectos) podría decirse que nunca está fuera de manifestación. Sin embargo tiene constantemente ciclos de potencia creciente y menguante... Los ciclos del segundo rayo son dinámicos y se suceden en forma rítmica y regular en esta época y durante los veinticinco mil años que dura un ciclo zodiacal, en secuencias de quinientos años. ...En 1825 la potencia de este rayo empezó a declinar cuando alcanzó la cumbre de sus doscientos cincuenta años de existencia. (14-274/5)

 

[El segundo] rayo está siempre en manifestación subjetiva y es muy poderoso, porque es el rayo de nuestro sistema solar, y muy particularmente ahora que la Jerarquía se acerca coda vez más a la humanidad en preparación para la “crisis de amor” y para una inminente iniciación planetaria mayor. Sin embargo, en esta época, la influencia de segundo rayo se está hacienda objetiva en el plano físico. Se acrecentará más durante los próximos dos mil doscientos años; luego irá retirándose paulatinamente a un segundo plano. (9-105)

 

[El tercer] rayo permanecerá en encarnación objetiva, desde el punto de vista de la humanidad, durante un extenso período, tan extenso que es inútil predecir cuándo se desvanecerá su influencia. Ese centro planetario, la Humanidad misma, necesita aún la aplicación intensa de dichas fuerzas para estimular hasta el “más inferior de los hijos de los hombres”. (9-105)

 

...El tercer Rayo de Inteligencia Activa... ha estado en manifestación objetiva desde el año 1425 de nuestra era y permanecerá en encarnación durante toda la era acuariana. Los ciclos de este rayo son más extensos que los de otros rayos. Sin embargo, dentro de estos ciclos mayores, hay períodos de actividad más intensa, que son como los latidos o pulsaciones del corazón, y duran aproximadamente tres [i67] mil años. Cuando están fuera de manifestación se llaman “ciclos de retiro, pero no de abstracción”, y también están en encarnación tres mil años. Uno de esos períodos de tres mil años de expresión está con nosotros ahora, por lo que podemos esperar un gran desarrollo de la facultad intelectual y un marcado acrecentamiento del trabajo creador en esta época. Este ciclo particular de expresión marca un punto culminante en el ciclo mayor. Durante la era futura, la inteligencia de la raza y su desarrollo activo, asumirá grandes proporciones con suma rapidez. (9-101)

 

El tercer rayo ha estado más tiempo en encarnación, pero en 1875 ocultamente “terminó de salir y empezó a dar vuelta sobre sí mismo para retornar”. Por eso ya comienza a menguar. Cuando esto ocurre con cualquier tipo de energía, el efecto producido es siempre de naturaleza cristalizadora y propende a producir “formas fijas que exigen su rápida destrucción”, lo cual causa condiciones mentales de naturaleza estática y fija. De ello se infiere con claridad que en etapas posteriores de la actividad de este rayo tendremos la demostración de las actitudes dogmáticas, sectarias y teológicas que marcan, por ejemplo, la decadencia y la consiguiente inutilidad de las diversas escuelas de pensamiento que en su tiempo han personificado las ideas de los hombres y bastaron para ayudarlo durante el período de crecimiento. (14-274)

 

[El cuarto] rayo... entrará en encarnación a principios del siglo venidero, y –en colaboración con la influencia saturnina en desarrollo– conducirá a muchos al sendero del discipulado. Cuando la energía peculiar a la que damos el nombre poco satisfactorio de “armonía a través del conflicto” y las fuerzas del planeta que ofrecen oportunidad al aspirante, trabajen en combinación y en ordenada síntesis, podremos esperar un rápido reajuste en los asuntos humanos, particularmente en conexión con el sendero. (9-105/6)

 

[i68] El quinto rayo, el último de los rayos que entra en actividad, solamente está en proceso de entrar en el poder. Aumenta constantemente su potencia, y el resultado de su influencia llevará a la humanidad a un acrecentado conocimiento. Su energía golpea la mente de los hombres y causa ese estímulo que reside detrás de todo acercamiento científico a la verdad, en todos los sectores del pensamiento humano. Por ser el rayo que rige el aspecto de la personalidad del cuarto reino de la naturaleza y uno de los rayos que determina o condiciona nuestra raza Aria, su actual potencia es excesiva. Este punto debe ser bien recordado porque explica gran parte de lo que ocurre en el mundo del pensamiento.  (14-275)

 

[El quinto] rayo ha estado en manifestación desde hace setenta años. Se retirará (por un acuerdo especial y excepcional), dentro de otros cincuenta años, irrumpiendo así en su ciclo normal, porque se juzga que el impulso especial necesario ha sido adecuado y el ímpetu dado al  “espíritu humano de descubrimiento”, ha servido su propósito. Cualquier otra intensificación de los procesos mentales (excepto por medio del efecto penetrante de tercer rayo) resultaría ahora desastroso. Los ciclos de rayo generalmente están establecidos y determinados, pero en colaboración recíproca y, debido a la inminente y espiritual Crisis de Acercamiento, el Señor del Quinto Rayo y el Señor del Mundo, han decidido retirar temporariamente este tipo de fuerza. Esto tardará alrededor de cincuenta años. (9-106)

 

El sexto rayo comenzó a salir de la manifestación en el año 1625... (9-25)

 

... El séptimo Rayo de Orden Ceremonial, comenzó a manifestarse en 1675. (9-25)

 

...El principal problema actual se debe a que actúan simultáneamente dos rayos de gran poder. Sus efectos se hallan hasta ahora tan bien equilibrados que se ha producido una situación que está descripta en los antiguos archivos como: “La época en que las cimas de las montañas protectoras se despeñan de su lugar elevado, y las voces de los hombres se pierden en el estrépito y estruendo de la caída”. [i69] Dichos períodos sólo ocurren en raros y largos intervalos, y cada vez que tiene lugar se inicia un período peculiarmente significativo de divina actividad. Las antiguas cosas desaparecen, pero sin embargo, se restauran los viejos jalones. El séptimo rayo de Orden Ceremonial o Ritual, está entrando en manifestación. El sexto rayo de Idealismo o Visión Abstracta, está saliendo lentamente. El séptimo rayo traerá a la manifestación lo que fue visualizado y también lo que constituyó los ideales del precedente ciclo de actividad del sexto rayo. Un rayo prepara el camino para otro, y la razón de que se manifieste uno u otro depende del Plan y del Propósito divinos. No es frecuente que dos rayos sigan uno al otro en regular secuencia numérica, como acontece ahora. Cuando esto suceda, los efectos siguen a la causa rápidamente y esto podría ser la base de una segura esperanza. (14-281)




7

El Grupo de Discípulos del Tibetano

 

[i234] Los dos tomos de “El Discipulado en la Nueva Era”, incluyen secuencias de cartas enviadas por El Tibetano a discípulos individuales, en las que frecuentemente comenta sobre sus rayos y sobre los problemas específicos y las oportunidades que les fueron presentados a sus discípulos. La siguiente sección contiene extractos, principalmente, de esas cartas.

 



 

Los Cinco Rayos que Determinan al Discípulo

 

Considero útil dar a mi grupo e discípulos consagrados, los cinco rayos que les determinan o condicionan, a fin de que pue­dan trabajar inteligentemente para la fusión de:

 

a.  Los diversos rayos de la personalidad.

b.  El rayo de la personalidad con el del alma. (5-211)

 

A medida que estudia sus rayos aparecerá, con más claridad en su conciencia, la razón de la estrecha relación entre usted y algunos de sus condiscípulos. No sólo es la relación de un legen­dario servicio y comprensión mutuos, sino también de energías y fuerzas análogas, de similar aplicación. (5-260)

 

Debe tener siempre presente que al referirme a los rayos de los distintos cuerpos, me refiero a la fuerza dominante que los condiciona en una vida particular, al efecto que el impacto de esa fuerza -regulada o no- pueda tener sobre las personas que están alrededor, a la sustancia sensible o impresionable que responde, con la cual el alma debe [i235] forzosamente trabajar y también a aquello que constituye la expresión material. (5-414)

 

Hasta que no haya un suficiente y notable desarrollo que permita hacer una verdadera diagnosis, no es posible decir definidamente a qué rayo pertenece la personalidad. Más adelante se definirá el rayo del ego, el cual al principio sólo se puede deducir por la natu­raleza del conflicto del cual la personalidad es consciente, basado en un acrecentado sentido de la dualidad. Además se podrá hacer un diagnóstico que se basará en ciertas características físicas y psíquicas que indicarán la cualidad de la naturaleza superior del individuo, así como también un estudio de los distintos grupos con los cuales se va afiliando el hombre a medida que aparecen en el plano físico. Cuando un hombre –si por predilección perso­nal es un artista creador– se interesa repentinamente por las matemáticas, podría deducirse que comienza a estar bajo la in­fluencia de un alma de segundo rayo; o si el hombre cuya per­sonalidad pertenecía definidamente al sexto rayo de idealismo fanático, o de devoción por el objeto de su idealismo, y durante la vida fue un devoto religioso, y luego cambió el interés de su vida por la investigación científica, podría quizás responder a la impresión de un alma de quinto rayo. (15-260/1)



 

Comprendiendo los Tipos de Rayo

 

...El mayor problema de su vida [es]: Permanecer libre aunque limitado; trabajar en el mundo subjetivo, mientras está activo en el [i236] mundo de los asuntos externos; lograr el verdadero desapego, aunque da a cada uno lo que le corresponde. El conocimiento de los rayos a que pertenece puede serle de gran ayuda en este proceso de liberación, desprendimiento y renunciamiento final. (5-295)

 

Resultaría benéfico si los estudiantes reunieran toda la información posible sobre sus dos rayos principales, teniendo en cuenta el trabajo práctico que deben realizar sobre sí mismos... Puede [así] ayudar al grupo a obtener el equilibrio necesario para el trabajo que debe realizar. (5-297)

 

No es tarea fácil la que usted y todos los discípulos se han fijado y ello significa que deberán enfrentar las circunstancias que cada uno ha creado, lo cual implica que la propia vida, el propio medio ambiente, las características y las responsabilidades, deben ser encarados con la verdad. Es una ardua empresa ocuparse del yo inferior con clara visión, ver realmente la vida y el yo y cuidar que no sea mancillada la preciosa joya de la visión. (5-308)

 

A quien no haya alcanzado el grado de discípulo aceptado le será imposible descubrir muchas cosas. El tipo de su rayo ha de ser bien pronunciado, pues quien investiga debe estar suficiente­mente evolucionado como para haber logrado la etapa del obser­vador desapegado... El discípulo de segundo rayo debe aprender a desapegarse y al mismo tiempo a mantenerse esotéricamente “apegado e incluyente”, y a lograrlo conscientemente, manteniendo dicha actitud. El discípulo de primer rayo ha de permanecer sin apegos, aunque debe aprender el apego y dejar que en su aura entre el entero mundo en una serie progresiva de apegos, lo cual acarrea dificul­tad, porque implica aprender, por medio de paradojas, el secreto del ocultismo. (6-493)

 

 

Diagramas de Rayo

 

Se podrían trazar y estudiar muchos esquemas [de rayos] parecidos e innumerables casos hipotéticos que servirían de base a la investi­gación [i237] ocultista para diagramar y estudiar la Ley de Analogía. Sería de valor que los estudiantes se analizaran de esta manera y, con la información dada en [el Tratado sobre los Siete Rayos] podrían trazar sus propios diagramas y estudiar los rayos que creen les correspon­den y el efecto que producen en sus vidas, y de acuerdo a ello tra­zar un gráfico muy interesante de su propia naturaleza, cualida­des y características.

 

Será interesante mencionar el hecho de que cuando el indi­viduo se convierte en discípulo aceptado se prepara un gráfico de está naturaleza y se lo da a su Maestro. En realidad, se dis­pone de cuatro gráficos, porque los rayos de la personalidad va­rían de un ciclo de expresión a otro y es necesario mantener al día el gráfico de la personalidad. Los cuatro gráficos fundamen­tales son:

 

1.   El de la expresión del hombre en el momento de su indivi­dualización. Lógicamente es un gráfico muy antiguo, donde los rayos de los cuerpos mental y emocional son muy difíciles de determinar porque hay muy poca expresión mental y experiencia emocional. Sólo se definen claramente el rayo del alma y el del cuerpo físico, los demás rayos se insinúan solamente.

Este gráfico corresponde al hombre que aún no ha despertado.

 

 

2.   El de la expresión del hombre cuando la personalidad ha logrado el punto más elevado de independencia, es decir, antes que el alma controle conscientemente y actúe en forma predominante.


Este gráfico corresponde al hombre soñador.

 

 

3.   El de la expresión del hombre en ese peculiar momento de crisis determinante en que luchan el alma y la personalidad, donde la batalla por la reorientación ha alcanzado su punto culminante y el aspirante lo sabe; sabe que mucho depende del resultado de esa batalla. Él es Arjuna que se encuentra en el campo de Kurukshetra.

Este gráfico corresponde al hombre que está desper­tando.

 

 

4.   El de la expresión del hombre durante la vida, cuya [i238] orienta­ción ha sido alterada y el énfasis puesto en las fuerzas de la vida ha cambiado y el hombre se convierte en un discípulo aceptado.

 

Estos cuatro gráficos descriptos o trazados en colores, de acuerdo a los rayos, conforman el legajo del discípulo, pues el Maestro sólo se ocupa de las tendencias generales y nunca de los detalles. Se interesa por las tendencias y predisposiciones de orden general, las características sobresalientes y los evidentes cánones de la vida. (15-234/5)


 

 

Los Rayos del Alma

 

El Primer Rayo como Rayo del Alma

 

Al tratar con egos de primer rayo... o con esas almas que actúan por medio de personalidades de primer rayo, enfrento siempre la dificultad inicial de su "independencia ais­lada". No les es fácil a las personas de primer rayo colaborar y es­tar de acuerdo con las sugerencias grupales, con el ritmo del grupo o con la disciplina y tampoco con una actividad sincronizada y unida, anunciada como meta para todos los grupos de discípulos. La actitud interna está con frecuencia unificada con el propósito y los ideales principales, pero en la expresión externa, el hombre físico, se mantiene inadaptado y está poco dispuesto a adaptarse. Si no fuera por su personalidad de segundo rayo, le sería muy difícil trabajar en mi ashrama, pero esta cualidad de segundo rayo –fuertemente marcada y producto de una larga serie de encarnaciones en un vehículo de ese rayo— puede convertirlo si lo desea, en uno de los puntos focales para el trabajo progra­mado que debe llevar a cabo este grupo de discípulos. (5-138)

 

Está aprendiendo que la camaradería no es una lección fácil de aprender y expresar, para las almas de primer rayo. La pequeñez de las personalidades y la mezquin­dad de los puntos de vista individuales, resultan fastidiosos para el servidor del Plan, que permanece sereno y desapegado en el pináculo de la visión con la resultante comprensión de primer rayo. (5-167)

 

Maneje con cuidado la fuerza que fluye a través suyo, a medida que se traslada cada vez más a la conciencia de su alma de primer rayo... Procure que su personalidad de segundo rayo maneje correctamente esa fuerza, mezclándola con el amor y atemperando su [i239] poder con la comprensión. La fuerza de primer rayo debe ocuparse de las circunstancias, y no debe hacer impacto sobre las personalidades. Se la necesita para forzar las circunstancias y determinar resultados (observe esta frase) y no para destruir ni herir. Debe tenerse en cuenta la verdadera impersonalidad, y su personalidad debe ob­servar el efecto que produce sobre otros personalidades y contrarrestar su innato y a menudo muy útil trabajo des­tructivo. (5-167/8)

 

No luche contra el espejismo que trata de engañarlo, empleando su indiferencia de primer rayo, poderosa actitud que usted y todos los que pertenecen al primer rayo asu­men con facilidad. Combátalo ignorándolo y ensimismándose ple­namente en la tarea inmediata; me refiero a ese sensato ensimis­mamiento que no descuida las necesidades físicas ni las horas necesarias de descanso. (5-168)

 

El rayo de su alma es el primero de Voluntad o poder, que es también el de su cuerpo físico. De allí que si lo decide le resultará fácil y simple que su alma impresione a su cerebro. Esto tiende también a hacerlo muy intuitivo, pero no psíquico en manera algu­na. Le da también, si quiere, poder organizador y el empleo de una voluntad espiritual dinámica que le permitirá vencer y sobre­ponerse a todos los obstáculos. (5-198/9)

 

En una instrucción anterior, traté de hacerle ver el peligro que implica asumir constantemente la posición de ‘‘quien ocupa el centro”. Tal actitud... es también caracte­rística del alma de primer rayo, y la presencia de estas dos actitudes (la del que ocupa el centro y la del que se mantiene aislado), son indicios de que su alma de primer rayo empieza a controlar su personalidad... Es lógico que pregunte, cómo y de qué manera puede contrarrestar tales tendencias. Sólo puedo responderle con verdades sencillas y comunes –tan sen­cillas y comunes que su valor científico pasa fácilmente desaper­cibido. Le diré: no se interese por la vida de su personalidad, sus contactos y asuntos, y reemplácelos por un interés dinámico en el trabajo mundial. Tal desapego no deberá obtenerlo por la intensificación de las actitudes de su personalidad de sexto rayo, pues no queremos que los fanáticos estén asociados a nosotros. Debe lo­grarlo profundizando la naturaleza de amor, porque incluye a los demás y excluye a su propia naturaleza [i240] inferior. También le diré: trabaje con desapego y debido a que usted no exige nada para el ya separado, todas las cosas le llegarán. De esta manera no per­manecerá aislado, sino que actuará como atrayente unidad magnética en servicio grupal. Aquí reside por lo tanto su problema inmediato. Debe aprender a descentralizarse y abandonar el cen­tro del escenario. Debe ser magnético y constructor, no destruc­tor. Reflexione sobre estas sugerencias y trabaje sencilla, tran­quila y alegremente, en la solución de su problema. (5-233/4)

 

Deje en libertad a los demás y no trate de influirlos ni de imponerles sus ideas. Sus interpretaciones acerca de ellos y de sus necesidades (no importa cuán íntimas sean) no son estrictamen­te correctas. Deje en todo sentido, en libertad a los demás, la misma libertad que exige y espera para usted. (5-234)

 

Me siento impulsado a darle como nota clave algunas palabras de importancia práctica, y son: virtuosa bondad amorosa. Las cualidades de virtuosidad y bondad amorosa marcan la expresión externa superficial (esotéricamente entendida) del alma, y a una persona de primer rayo le resulta siempre difícil expresarlas y por lo general cree que no las necesita y que son innecesarias. La persona de primer rayo ignora con frecuencia que carece de ellas. La bondad interna, dinámica y definida, de un discípulo de primer rayo, puede verse perjudicada por su tendencia a hablar apresurada y rápidamente. La persona de primer rayo está tan segura de su bondad y amor esenciales (y con razón lo está), que juzga a los demás como él es. La recta actitud interna y el amor interno, significan para él más que la expresión externa. Pero las personas menos evolucionadas y las que pertenecen a otros rayos, pueden interpretarlo mal. La potencia de su trabajo es tan real y las oportunidades que se abren ante usted son tan grandes, que si a esa potencia agrega una virtuosa actitud externa de bondad amorosa, puede ser de mucha utilidad. Reflexione sobre esto... (5-304/5)

 

El poder de su alma de primer rayo puede energetizar su personalidad para una continua acción, aspiración y constante control mental; por lo tanto, no debe cesar su actividad ni deslizarse en la inercia, hasta que la última actividad, la transición, absorba la atención del alma y de la [i241] personalidad y tenga lugar el desapego final. (5-360)

 

Su meta debe ser evitar toda condición estática. Muchas personas de primer rayo se hacen estáticas o se cristalizan pues este método lo utilizan los destructores de primer rayo... (5-568)

 

La persona de primer rayo es consciente de la vida ordenada y de la majestuosidad de las fuerzas ordenadas; el glorioso ordenamiento" inteligente de los poderes que subyacen en el mundo manifestado, constituye por derecho propio su campo de servicio. Pero a esto debe agregar el poder de intuir el Plan tal como existe en un corazón amoroso, porque sólo el amor revela el Plan y la parte que las almas deben desempeñar en él, en cualquier momento y lugar dados. (5-572)

 

El discípulo de primer rayo ama el aislamiento. Constituye para él la línea de menor resistencia y, como bien sabe, es el que comúnmente permanece solo. Ésa es su fortaleza y también su debilidad. Se vanagloria del desapego... Al discípulo de primer rayo le resulta difícil aprender el apego (de tipo correcto y espiritual)... El problema del apego y del desapego es uno, el de los correctos valores. Quien pertenece al primer rayo se ama excesivamente a sí mismo, a su poder y a su aislamiento... El tipo de primer rayo comete errores porque no piensa en las reacciones de los demás por lo que él dice y hace; se enorgullece de su actitud desapegada y de su inmunidad al apego, y quiere que se aprecien su fortaleza y aislamiento. Sufre... por orgullo...

 

Este "aislamiento" interno que ama tan profundamente, fomentado por el entrenamiento anterior y las actuales circunstancias, impide que sea telepáticamente sensible a otras personas. En vez de poner tanta "voluntad de amar", ¿por qué no se limita sencillamente a amar?... En usted predomina la cabeza y se ubica en la cima de su torre, mientras que en todo momento el llamado del corazón resuena por todo su ser y en sus oídos. Sin embargo, teme descender y caminar entre sus semejantes, identificándose amorosamente con ellos. Sólo atravesamos eventualmente el portal de la iniciación, cuando caminamos con nuestros hermanos por la polvorienta calle de la vida. (5-572/3)

 

Posee gran sabiduría y también la capacidad que otorga el primer rayo, de sustentar un principio... Antes de que pronuncie las palabras de poder [i242] y sabiduría (que pronuncia con tanta facilidad y veracidad, extraídas de una larga experiencia), debe verter el amor de su corazón sobre aquellos que se dirigen a usted para obtener luz y fortaleza. Hoy los hombres necesitan amor. 85-576/7)

 

Sus respuestas a mis preguntas... Son como usted, ansiosas, sinceras, mentales, lógicas y tienen la impersonalidad del tipo de primer rayo. (5-577/8)

 

Siempre puedo hablar con claridad y franqueza a los discípulos de primer rayo, sabiendo que aceptarán mis palabras con correcto espíritu. (5-581)

 

La soledad, el aislamiento, el sentimiento de estar abandonado, la separatividad (basada en la sensibilidad en la mayoría de los casos) caracteriza al discípulo de primer rayo, hasta que aprende a conservar su sentido divino de “identificación unificada”, mientras se fusiona al mismo tiempo con otros...

 

...El trabajo que realiza es planeado por nosotros y su tarea consiste en ser sensible a nuestra “im­presión”. Desarrollar la sensibilidad es una tarea difícil para la persona de primer rayo. Prefieren permanecer solas y forjar dentro de sí mismas los planes que consideran adecuados al tipo de servicio que tratan de prestar. Pero, actualmente, los discí­pulos están aprendiendo que es necesario un plan o esquema fusio­nado, organizado y mezclado, de servicio mundial, y que debe ser llevado a cabo un Plan maestro de la Jerarquía, y a este Plan deben tratar de adecuarse todos los discípulos... (6-429)

 

[Necesita aprender] cómo reunir a la gente y trabajar por su intermedio... Esto es muy difícil para un discípulo de primer rayo, particularmente cuando el rayo del alma y el rayo de la naturaleza astral o emocional, es el primero. Al discípulo de primer rayo le es mucho más fácil retirarse dentro de la conciencia de su alma, que a los que perte­necen a otro tipo de rayo, y su problema... es darle más acción a la personalidad de segundo rayo, a fin de equilibrar la capacidad que tiene el primer rayo para manifestar el desapego por la actuación de la cualidad opuesta, el apego -tan característico de la naturaleza de segundo rayo. Reflexione sobre esto.

 

...El “apego desape­gado” (por paradójico que parezca) es la [i243] meta del discípulo activo de primer rayo. (6-435)

 

...Es y puede seguir siendo un canal, porque la sencillez de la persona de primer rayo posee un tremendo poder. Empléelo, her­mano mío, pero sin aislarse. Al trabajador de primer rayo le re­sulta fácil recorrer solo el camino que quiso seguir, pero le sugie­ro que trabaje colaborando más estrechamente con sus condis­cípulos. (6-508)

 

Tiene que vencer ciertas dificultades en el empleo de la energía de primer rayo, y cualquier error que pueda haber cometido, debido a juicios demasiado severos, al expresarse físicamente, son simplemente incidentales al aprendizaje del co­rrecto empleo de la energía del alma....

 

Cada vez que la energía de primer rayo afluye a través suyo, conduce a una insignificante o a una verdadera crisis en sus re­laciones con los demás. Debe adquirir una genuina y más general simpatía (como medio de comprensión) hacia sus semejantes, particularmente con quienes colaboran con usted en mi trabajo... Pero no sea insensible ni esté insatisfecho con los esfuerzos que ellos realizan para pro­gresar...

 

Hermano mío, necesita apreciar más el esfuerzo y criticar menos lo que se hace. Siempre es amable y comprensivo con aque­llos que constituyen verdaderos fracasos, demostrándolo muy a menudo, pero tiende a despreciar (detrás de una simulada moda­lidad bondadosa) a quienes se sienten satisfechos de lo que han realizado. Debe aprender también a elegir con sabiduría a sus trabajadores, cuando le corresponde hacerlo. No es fácil para us­ted ni para todo discípulo de primer rayo, querer acercarse sufi­cientemente a una persona para en realidad conocerla... Esto se debe al aislamiento natural del tipo de primer rayo. Téngalo presente.

 

...Los trabajadores de pri­mer rayo proporcionan la sustancia con la cual construyen los trabajadores de segundo rayo y la califican y modifican los tra­bajadores de otros rayos. Usted inspira a la sustancia con la ener­gía y el propósito y con la vida necesaria para que responda al plan -el Plan de buena voluntad que los Maestros actualmente complementan y para el cual buscan trabajadores. (6-509/10)

 

Respecto a egos de primer rayo, no existen tipos puros en el planeta. A quienes se los denomina de primer rayo pertenecen al primer subrayo del segundo rayo que se halla en encarnación. Un ego puro de primer rayo en encarnación [i244] actualmente sería un desastre. No hay suficiente inteligencia ni amor en el mundo como para equilibrar la voluntad dinámica de un ego que pertenezca al rayo del destructor. (14-45)

 

 

El Segundo Rayo como el Rayo del Alma

 

Su problema es que... su co­razón se ha entregado a muchas personas, por eso lo apremian y obligan, se aprovechan demasiado de su amabilidad. (5-140)

 

Usted adolece... de los vicios y las virtudes de segundo rayo. Sufre porque se apega a las cosas y se identifica con demasiada rapidez con otras personas. Esto puede ser corregido si se mantiene firme como alma y no se cen­tra como personalidad al tratar a otras personas –sea en el circulo hogareño o cuando presta servicio mundial. Debe tener en cuenta que la relación se establece con las almas y no con las formas transitorias, por eso debe vivir sin apegarse a las personalidades, sirviéndolas, pero viviendo siempre en la conciencia del alma –el verdadero "sannyasin”. (5-140/1)

 

Absténgase de prestar tanta atención a las vidas de quienes lo rodean, porque esta forma de trabajar les resulta fácil a los discípulos de segundo rayo. Poseen un sentido de responsabilidad muy grande y es tan fuerte su deseo de cobijar y proteger, que estiman excesivamente a aquellos con cuyas vidas están en contacto cotidianamente y se hallan tam­bién vinculados por obligaciones kármicas. Siga su propio camino con fortaleza y en silencio, y haga lo que su alma le dicte. No deje que las voces menores de los seres queridos y cercanos, des­víen su progreso en la senda de servicio. Pertenece ahora al mun­do y no a un puñado de sus semejantes. (5-142)

 

El discípulo de segundo rayo debe apren­der a utilizar el aspecto voluntad... (5-143)

 

Cuando el corazón está rebosante de amor y la cabeza plena de sabiduría, nada se hace que a la larga produzca angustia a los demás. No me refiero aquí a la acción, sino a los frutos de la acción. Se puede tomar una decisión y seguir una línea de con­ducta (y la decisión puede ser acertada), pero las condiciones resultantes pueden no ajustarse armónicamente, si subjetivamente no se está libre del temor, si no existe un corazón rebosante de amor y una comprensión amorosa, [i245] que es la sabiduría más real. El hombre libre de temores, inteligente y amoroso, puede hacer cualquier cosa y los efectos serán inofensivos y buenos. (5-145)

 

Rara vez un discípulo de segundo rayo es un buen ejecutivo, a no ser que lo ayude el rayo secun­dario. (5-145)

 

...El sendero de los Salvadores del Mundo es arduo, debido principalmente al poder de sufrir que posee el tipo de segundo rayo. (5-149)

 

Su problema fue siempre el de un verdadero discípulo de segundo rayo. Esto implica la capacidad de identificarse con los demás, con sus ideas y reacciones, con lo cual limita y entorpece su propia actividad, debido a la indecisión que surge de la demasiada comprensión y la excesiva simpatía para los problemas de la personalidad y la expresión de la forma. Cuando pueda mantenerse con más firmeza en el ser espiritual y trabaje más definida y conscientemente con el aspecto alma, y menos absorbentemente con la personalidad, su vida se simpli­ficará y algunos de sus excepcionales problemas de la personalidad desaparecerán. Sólo entonces su alma atraerá a quienes puedan ser sus verdaderos colaboradores. (5-153/4)

 

...Este [segundo] rayo es preeminentemente el rayo de la enseñanza, denominado a veces el de la "influencia dadora de luz", o "el rayo del iluminador". (5-174)

 

Cinco de los seis miembros que en la actualidad trabajan en [este grupo] son egos de segundo rayo. Esto es interesante, porque indica la predominante facultad del grupo para curar y enseñar, que, en último análisis, son los dos objetivos principales. (5-322)

 

...Al discípulo de segundo rayo no le es fácil aprender el desapego... El problema del apego y del desapego es uno, el de los correctos valores... El de segundo rayo comete errores por su gran apego a los demás y su inclusividad demasiado flexible, expresada antes de comprender la verdadera naturaleza de la inclusividad. El individuo de segundo rayo comete errores por temor a ser incomprendido, a no ser adecuadamente amado [i246] y se preocupa demasiado de lo que puedan pensar o decir de él... [Él] sufre por temor. (5-573)

 

...El rayo de la curación, por sobre todos los demás, es el segundo rayo. En los siete rayos dos son rayos mayores de curación, el segundo y el séptimo. (5-587)

 

...Le fue difícil recorrer el Camino del Gozo. Sin embargo, es una de las características necesarias del discipulado, que conduce –como lo hace– a la fortaleza del alma; es una cualidad esencial para todas esas personas de segundo rayo que están particularmente orientadas a hollar, en fecha futura y después de la iniciación, el difícil camino que deben recorrer todos los salvadores del mundo. (5-610)

 

...El segundo rayo acen­túa en usted la sabiduría y no el amor. Por lo tanto, la cualidad del amor no es muy fuerte, y esto le acarrea dificultades, de las cuales curiosamente no es consciente. Su tarea consiste en des­arrollar, a cualquier precio, la cualidad del amor. La actitud eru­dita que adopta lo endurece y no ha logrado equilibrarlo -en inten­sidad- mediante la cualidad del amor. Debe trasmutar esa dureza en forma amplia y general. Puede trasmutarla en bien de los que ama o de aquellos de quienes se siente responsable. Tiene que des­arrollar esta cualidad del amor antes de que pueda ver al Cristo, no simplemente como iniciado que recibe la iniciación, sino como discípulo que merece Su atención... Actualmente, pocos discípu­los se dan cuenta de que el Cristo tiene dos relaciones con ellos, una la de la iniciación y la otra -mucho más rara-, la de Aquel a Quien ellos pueden consultar respecto a su trabajo. Este permiso para llegar a Él sólo se concede cuando el amor y la sabiduría están equilibrados y son iguales. (6-575)

 

...El rayo de su alma es el de Amor-Sabiduría... por lo tanto, mediante el correcto alineamiento y la disciplina de la personalidad, el amor que usted posee (en toda su plenitud y riqueza) afluirá a través suyo hacia los demás. (5-490)

 

 

El Tercer rayo como el Rayo del Alma

 

Su [tercer] rayo egoico o del alma, se enfoca en y por medio de su cuerpo mental de quinto rayo. Esto... relativamente hablando, le otorgó un enfoque mental definido, su actitud censuradora [i247] y su aislamiento...

 

... Lo que necesita es enfocar la energía del alma en el cuerpo astral de sexto rayo, en vez de hacerlo en su mente, para que el amor inteligente llegue a ser la característica predominante. (5-129/30)


 

El Sexto rayo como el Rayo del Alma

 

Le dije que está pasando egoicamente del sexto Rayo de Devoción al segundo Rayo de Amor-Sabiduría, al cual yo pertenezco... Su polarización egoica de sexto rayo, le ha servido para aumentar la fuerza dinámica y centra­lizada de su fuerza de primer rayo. Esta condición comienza a cambiar y este período de transición le trae grandes sufrimien­tos. (5-208)

 

 

El Séptimo rayo como el Rayo del Alma

 

El rayo de su alma es el séptimo, lo cual le permitirá trabajar con facilidad en el nuevo mundo que viene a la manifestación con tanta rapidez. Le ayudará también a producir orden y ritmo en su ambiente; en estos días de desorden y dificultad, todo centro rítmico es de valor para nosotros. (5-591)

 

Quiero recordarle, mientras piensa en su decisión, que su alma perte­nece al séptimo rayo y que trabaja por medio de una persona­lidad de primer rayo. De allí, hermano mío, su problema. Es un místico de conciencia muy amplia; posee un poderoso rayo de la personalidad y una vibración egoica que, de acuerdo a la nueva era, trata de imponer a la personalidad un ritmo de "orden cere­monial y de organización". (5-274)

 

Los Rayos de la Personalidad

 

La personalidad está siempre predominantemente aliada con uno de sus tres aspectos, o centrada en ellos. (5-244)

 

Es de valor que los discípulos estudien qué rayos no están representados en el equipo de su personalidad. (5-328)

 

Les será útil si indico... los rayos que ri­gen su triple personalidad. Entonces [i248] podrán manejarse con mayor sabiduría, hallar más fácilmente la causa de la dificultad y estu­diar más inteligentemente el efecto que pueden producir mutua­mente y con quienes entran en contacto en la vida diaria.

 

...Los rayos rigen los tres cuerpos en el siguiente orden:

 

1.   Rayos que rigen el cuerpo mental..................... 1. 4. 5.

2.   Rayos que rigen el cuerpo astral........................    2. 6.

3.   Rayos que rigen el cuerpo físico........................    3. 7.

 

De esta manera verán que todos los rayos desempeñan su parte en el mecanismo del hombre, y hacen que todas las circunstancias proporcionen la oportunidad, las condiciones y el medio para el desarrollo. Esta afirmación, respecto a los rayos regentes, es una regla infalible,  excepto en el caso de los discípulos aceptados. (10-7475)

 

...Otra influencia... es el rayo planetario al que pertenece cada ser humano al nacer. Deberá tenerse en cuenta que la denominada influencia de un planeta en realidad es la influencia que ejerce la Jerarquía que rige ese planeta. Este rayo personal es el factor importante que influye en el carácter de un hombre durante el curso de una vida. Digo el curso de una vida, pero lógicamente pueden ser una o más vidas si las condiciones kármicas lo exigen, porque el momento del nacimiento de cada individuo se fija de acuerdo a las necesidades kármicas y, probablemente todos nosotros –sea cual fuere nuestro rayo primario o individual-, hemos pasado una y otra vez, vidas enteras bajo la influencia personal de los siete rayos. (14-145/6)

 

 

El Primer Rayo como el Rayo de la Personalidad

 

En lo que se refiere a su personalidad, pertenece al primer rayo, y le es fácil comprender esquemas generales y planes amplios. (5-207)

 

Su personalidad de primer rayo le otorga poder sobre los hombres; sabe que posee este poder y ha tratado de utilizarlo con sabiduría. ((5-208)

 

Ha des­arrollado grandemente la capacidad de ser impersonal, porque su naturaleza inferior de primer rayo le hace fácilmente imper­sonal, si así lo quiere. Pero debe aprender como todos [i249] los discí­pulos, la lección de ser impersonalmente personal. Esto no es fácil de obtener. Para usted la meta es un apegado desapego. (5-209)

 

Está aprendiendo a dejar que los demás actúen con libertad, lección difícil para una per­sonalidad de primer rayo... (5-212)

 

Su personalidad, su mente y su cuerpo físico, están regidos por la energía de primer rayo, lo cual presenta un problema muy real, porque lo predispone a las si­guientes condiciones:

 

1.    A la soledad basada en un sentido de aislamiento. Esto se debe también a la sensación de estar aislado, que da siempre el primar rayo, que es esencialmente el rayo del desapego...

2.    Debido a que la energía de primer rayo se enfoca en su personalidad y en dos de sus medios de expresión, usted maneja -debido al desequilibrio- un indebido poder, o ejerce un efecto sobre aquellos con quienes se pone en contacto y trata de ayudar. Afortunadamente para usted y también debido a la calidad del rayo de su alma y a que ha alcanzado cierta medida de control, la influencia sobre quie­nes trata de servir es buena. Se da cuenta clara (¿no es así?) de la poderosa influencia que puede poner en juego y, de esta manera, afectar la vida de otras personas. Sabe también que puede despertar en ellos una poderosa reac­ción. Éste es el efecto de la fuerza de primer rayo, cuando se enfoca en el plano físico.

... su personalidad de primer rayo le permite dominar fácilmente a aquellos con quienes entra en contacto. (5-213/4)

Una personalidad de primer rayo puede también ocasionar mu­cha dificultad al alma, cuando no está subordinada, con toda humildad, al servicio grupal. Una vez que la personalidad es guiada por la intuición y por el claro pensar, y la vida en el plano físico está dedicada a un ritmo de servicio organizado y libremente impuesto, entonces se le puede conferir poder, dando por resultado una utilidad definida. (5-265)

En una vida anterior el rayo de su personalidad fue el primer Rayo de Poder, de allí la sensación de poder que siente a veces. (5-276)

[i250] Gran parte de su dificultad actual reside en que el rayo de su personalidad es, como sabe, el primero de Voluntad o Poder, el cual le imparte el sentimiento de centralización, singularidad y soledad, "aislando" al hombre que está condicionado por él. Hace que la actitud hacia el trabajo sea de separatividad inconsciente. Separarse de sus colaboradores es para usted la línea demenor resistencia o –cuando es instado a identificarse con su Alma de segundo rayo– la respuesta es ir hacia ellos, manteniendo claramente la diferencia interna. No me refiero aquí al orgullo, hermano mío, sino a las características absorbentes, asimiladoras y aisladoras de la naturaleza de primer rayo. Es el gran Señor del primer rayo (para emplear un símil iluminador) que, al final de la era, absorbe todas las cosas en Sí Mismo y por este medio produce la destrucción final y necesaria de la naturaleza de la forma. Éste es un derecho y un correcto empleo de Sus cualidades de primer rayo. Las personalidades de primer rayo pueden hacer también este tipo de trabajo, el de absorción, pero con resultados destructivos; en tales casos la tarea es innecesaria y errónea. (5-351/2)

...Usted teme a sus iguales. Usted quisiera ser solo y único, inclinación normal de su poderosa personalidad de primer rayo (enfocada lógicamente en su cuerpo astral de primer rayo). No le resulta fácil ser uno entre tantos –todos iguales, todos trabajando como uno solo, todos absorbidos en el trabajo uno. Debe aprender a hacerlo, de lo contrario obstaculizará al grupo. (5-353)

Otra razón de su fracaso para conseguir todo el beneficio posible de la actual experiencia, es el desmedido orgullo del individuo de Tauro que pertenece al primer rayo en lo que a su personalidad concierne.

... Avanza atropelladamente a través de la vida, derribando e hiriendo a medida que avanza... No se detiene a corregir o enmendar la acción errónea, aunque la reconozca. (5-436)

El discípulo que tiene una personalidad de primer rayo tiende a centralizarse indebidamente en el servicio que presta, o en su línea particular de pensamiento y actividad, o si no, absorberse totalmente en un individuo o grupo. Esta preocupación dinámica e intensa, puede a menudo obstaculizar la expansión de la conciencia [i251] y el desarrollo de esa inclusividad esencial, antes de recibir las iniciaciones mayores... La vida dual del discípulo nunca le resulta fácil a aquel cuya personalidad está básicamente en la línea del poder dirigido y de la voluntad enfocada. ...A menudo este poder dirigido no se diluye adecuadamente, y los objetivos menores o inmediatos se ven muy cercanos, lo cual puede destruir lo que construye, busca o ama, por la misma intensidad de la energía enfocada. (5-452/3)

La personalidad de primer rayo siempre puede ser impelida a una utilidad dinámica y a la consiguiente buena salud, por un acto de la voluntad, la voluntad espiritual. Su sensación física de estar enfermo se debe puramente a la pereza espiritual -algo que puede neutralizar inmediatamente, si quiere. (5-458)

Debe regular la personalidad de primer rayo, que reacciona rápidamente a la crítica y le desagrada todo control o interferencia externos... Debe abrirse camino por sí solo y aprender a cultivar el olvido de sí mismo. El hombre que permanece solo y ha determinado aislarse, tiene un problema muy difícil y en cierta manera distinto de cuando se ve obligado a disciplinarse por el constante e incesante impacto que los demás hacen sobre su conciencia. Está muy solo, pero por propio deseo y por ser su camino correcto. Debe contrarrestar las inevitables dificultades por medio de la disciplina autoimpuesta. (5-459)

...El orgullo predomina en su actividad y reacciones en el plano físico y, también, que su personalidad y vehículo astral, ambos de primer rayo, tienden a aumentar tal tendencia en usted. Allí reside su principal tarea en la vida, siendo el punto crucial en la batalla de su vida. Su camino de liberación reside en la dulzura, la humildad y la disposición de reconocer los valores, lo cual actualmente demora en hacer... Su fuerte y positivo temperamento atrae a personas negativas, sintiéndose más feliz con ellas que con las personas positivas. Cuando pueda atraer a las personas positivas y sienta un gran placer al estar en contacto con los discípulos del mundo, positivamente polarizados, [i252] tendrá el primer indicio de que el espejismo del orgullo va desapareciendo. (5-464/5)

Su personalidad de primer rayo produce dos cosas; su propia mente lo aísla de sus asociados y debe aprender que es necesario identificarse con sus colaboradores...

Su personalidad y mente de primer rayo despiertan el amor al poder y el deseo de sentir esa placentera sensación provocada por las palabras que evocan sumisión. Esto sirve pata ubicarlo "en el sitial de la persona superior", como dicen los chinos. Descubrirá, hermano mío, que por lo general es fácil reunir a su alrededor a muchas personas insignificantes, cuya realización es relativamente nula (desde el ángulo del servicio mundial), pero quienes poseen mentes sutiles no disponen de tiempo para tal sumisión, siguen su camino y usted, oportunamente, deberá seguirlos y ponerse a la par de ellos. (5-538)

Debido a que el primer rayo predomina en su equipo se apartó exitosamente de sus hermanos de grupo, considerando que nada tenían que darle, comprendiendo, a su vez, que -al sentirse así- nada tenía para darles. El despego es el sendero de menor resistencia para una naturaleza de primer rayo... Su alma de segundo rayo no aprueba el desapego, de allí el conflicto que se libra en su conciencia. (6-450)

...No cesa de luchar y bregar, a veces impe­lido por su alma [de segundo rayo] y a menudo bajo la influencia del inquietante y penoso énfasis de la personalidad [de primer rayo]. ¿No puede acaso dejar de lu­char y forcejear y darle oportunidad para que evolucione ese espíritu amoroso que su personalidad aislada de primer rayo tra­ta de ocultar...? (6-596)

 

El Segundo Rayo como el Rayo de la Personalidad

El rayo de su personalidad es el segundo de Amor‑Sabiduría, y esto le permite evocar y emplear sin peligro su voluntad de pri­mer rayo, pues será inevitablemente modificada por el enfoque de su personalidad. [i253] Observará, por lo tanto, que esto tiende a equili­brarlo cuando actúa como personalidad o alma. (5-199)

Sólo su per­sonalidad de segundo rayo tiene la paciencia de ocuparse del con­junto, de los necesarios detalles y persistir ante el aparente fra­caso. (6-436)

 


El Tercer Rayo como el Rayo de la Personalidad

...El tercer Rayo de Inteligencia... trae con­sigo el orgullo del intelecto. (5-223)

...Las facultades y capacidades de tercer rayo de [la] personalidad -crítica analítica, separatista, orgullosa e interesada en sí misma... (5-223)

 

El Cuarto Rayo como el Rayo de la Personalidad

 

Su personalidad pertenece al cuarto rayo, considerando que constituye para usted el rayo del artista, el trabajador creador. Pero necesariamente debe recordar que es también el Rayo de Armonía a través del Conflicto y sobre este aspecto de rayo, en relación con su personalidad, le llamo la atención. Este conflicto interno, otorgado por Dios, que tiene también una profunda importancia espiritual, es un servicio. (5-496)

 

El Quinto Rayo como el Rayo de la Personalidad

La razón principal [de su lento progreso] reside en su personalidad de quinto rayo, porque acentúa la mente censuradora y analítica, lo cual conduce a observarse y a criticarse, a argumentar consigo mismo y contra las circunstancias. (5-192)

...Sus rayos son de tal naturaleza que constituyen un profundo depósito o manantial de comprensión amorosa;únicamente su personalidad de quinto rayo impide la plena expresión del amor, que en realidad, es su cualidad principal y sobresaliente... Es tarea del quinto rayo (cuando predomina la personalidad) ser vivisector, analizar y llegar a conclusiones, y este espejismo hay que manejarlo con cuidado, si no establecerá una barrera... (5-416/7)

[i254] Los que están en situación de ayudar a las mentes incipientes, como lo está usted ahora, y poseen personalidades de quinto rayo como la suya, pueden afectar a muchas mentes y sentar las bases para la vida y las actividades basadas en el correcto pensar. El mundo deberá encontrar eventualmente, en el  campo donde se desarrolla su actividad, la instrucción que conducirá a la recta acción, basada en la recta comprensión del Plan y en el correcto manejo de la joven generación -algo hasta ahora totalmente desconocido. De esta manera el mundo puede ser remodelado por un inteligente planeamiento y una voluntad bien dirigida -si esta frase le significa algo. Involucra un enfoque consciente y una creciente actividad e impulso. Pero esa correcta actividad será posible y se apresurarán los fines deseados, sólo cuando las personas de su generación y oportunidad puedan, en este intervalo entre el antiguo orden y el nuevo, pensar con claridad, ver nítidamente las cuestiones de su verdadera relatividad e inspirar a los jóvenes a que también vean. (5-419)

Su personalidad de quinto rayo facilita la recepción de la iluminación, porque su intelecto e intuición armonizarán fácilmente. (5-511)

 

El Sexto Rayo como el Rayo de la Personalidad

...El [sexto] rayo de su personalidad está enfocado en su cuerpo astral [también de sexto]. Los rayos tercero [cuerpo físico], quinto [cuerpo mental] y sexto [cuerpo astral], son sus factores controladores. Esto le otorga devoción y control mental y debería proporcionarle también verdadero equilibrio, pero lamentablemente no lo logra, porque el aspecto mental se destaca indebidamente y teme ser devocional. No obstante hermano mío, la devoción lo trajo a nosotros y no su capacidad mental; lo guió constantemente todos estos años y lo llevó a prestar servicio en el mundo. (5-129)

Su per­sonalidad de sexto rayo produce intensa adherencia a sus ideales y a la verdad tal como la percibe, pero produce también una centralización que le condujo a enfocar la energía en la cabeza. Esto se ha intensificado además, debido a que nuestra civilización occidental está sumergida en formas mentales de la era pisceana, la era del sexto rayo, que aún está con nosotros. (5-226)

[i255] ...Las vibraciones de [su sexto] rayo, por las cuales penetrará fácilmente el espejismo, le acarrearán las mayores dificultades. Por ejemplo, si quiere manifestar el poder de primer rayo debe atemperar el fanatismo y devoción de la personalidad hacia personas e ideas. Su voluntad de devoto fa­nático debe ser reemplazada por el propósito, ordenado y persistente, de su alma de primer rayo... La voluntad acerada, que­bradiza, decidida y dinámica de todo aspirante devoto, debe tras­formarse en propósito persistente, poderoso y sereno del alma, a través del discípulo. El alma es flexible en la adaptación, pero indesviable en su objetivo. La espléndida y fanática devoción ha­cia una persona o ideal, debe ceder análogamente su lugar al suave e inmutable amor del alma —el amor de su alma hacia las almas de los demás. (5-232)

Es particularmente prudente, para las personas de sexto rayo [en la personalidad], comprender bien la Ley de los Ciclos y del crecimiento rítmico, porque su predisposición hacia la actividad fanática y violenta puede contrarrestarse mediante el inteligente manejo del ritmo en la vida. (5-244)

 

...La cualidad de sexto rayo de su personalidad... es, como bien sabe, el rayo de la devoción, del idealismo fanático, del indebido énfasis que, cuando condiciona a la personalidad, tiende a causar muchas dificultades. La luz menor de ese rayo menor (es en sí divina) puede evitar que llegue a la plena radiación de su alma. (5-302)

 

El rayo de su personalidad es el sexto, que le da poder sobre el plano astral y, por lo tanto, un cuerpo astral poderoso y sensitivo, con todo lo que esa situación implica de éxito y fracaso. (5-591)

 

La personalidad de sexto rayo está siempre convencida de que reconoce la verdad y, en consecuencia tiende fácilmente al espejismo, y cuando va a la par... de un cuerpo astral de primer rayo, la dificultad que lo enfrenta como discípulo es muy grande. (6-576)

 

 

El Séptimo Rayo como el Rayo de la Personalidad

 

El [séptimo rayo] le otorga, si puede comprenderlo y decide utilizarlo correctamente, el poder de apropiarse de la luz que reside en usted y en el alumno, e iluminar [i256] la vida en el plano físico, porque el séptimo rayo rige las relaciones espíritu-materia. (5-176)

 

El séptimo rayo, al cual pertenecen su personalidad y su cuerpo físico, le imparte el deseo de emplear las manos y determina el trabajo que debe hacer en su vida, pues las manos son los agentes del mago... (5-329)

 


 

Los Rayos del Cuerpo Mental

 

...El cuerpo mental de todo ser humano está compuesto de sustancia regida por los rayos primero, cuarto y quinto. A veces hay excepciones a esta regla en el Sendero del Discipulado, resultado de la acción directa e inteligente del Alma antes de encarnar... Las energías de estos tres rayos, cuando está enfocada en la personalidad, pro­porciona el impulso correcto y exacto para regir la vida inferior, tanto en el caso del ser humano no evolucionado como en el del que está en las primeras etapas del discipulado y del aspirante...

 

Primer Rayo:

 

  EN EL HOMBRE NO EVOLUCIONADO

 

1.   La voluntad de vivir o de manifestarse en el plano físico.

2.   El impulso que se expresa como instinto de autoconservación.

3.   La capacidad de resistir, no importa cuáles sean las dificultades.

4.   El aislamiento individual. El hombre es siempre “Aquél que está sólo”.

 

EN EL HOMBRE EVOLUCIONADO

 

1.   La voluntad de liberarse y manifestarse conscientemente en el plano del alma.

2.   La capacidad de reaccionar al plan y responder a la reconocida Voluntad de Dios.

3.   El principio de la inmortalidad.

4.   La perseverancia o la persistencia en el Camino. (15-228/9)

 

 

Cuarto Rayo:

 

      EN EL HOMBRE NO EVOLUCIONADO

 

1.   La agresividad y el impulso necesario para alcanzar la meta pre­sentida que caracteriza al ser humano en evolución. Esta meta será, en las primeras etapas, de naturaleza material.

2.   El espíritu luchador o antagónico, que finalmente otorga fortaleza y equilibrio, y con el tiempo trae la integración con [i257] el aspecto de primer rayo de la deidad.

3.   La fuerza coherente que hace del hombre un centro magnético, ya como la fuerza principal de cualquier unidad grupal, tal como un progenitor o un gobernante, o un Maestro en relación con su grupo.

4.   El poder de crear. En las clases inferiores este poder se vincula con el impulso o instinto de reproducirse, que conduce, en conse­cuencia, a la relación sexual, a la construcción de formas mentales o formas creadoras de determinado tipo, aunque sólo sea la choza de un salvaje.

 

      EN EL HOMBRE EVOLUCIONADO

 

1.   El espíritu de Arjuna. El impulso hacia la victoria, manteniendo una posición entre los pares de opuestos, y la eventual percepción del camino medio.

2.   El impulso a sintetizar (también de primer rayo) mezclado con la tendencia del segundo rayo a amar y a incluir.

3.   La cualidad atrayente del alma que se expresa a sí misma en la relación entre los yoes superior e inferior. Esto culmina en el “matrimonio en los cielos”.

4.   El poder de crear formas, o el impulso artístico.

 

En conexión con esto se observará cuán exacto fue el enun­ciado anterior de que el artista pertenece a todos los rayos y que no sólo en el denominado Rayo de Armonía o Belleza, se halla el ente creador. El cuerpo mental de cada ser humano pertenece en determinado momento al cuarto rayo y generalmente cuando el hombre se acerca al sendero de probación. Esto significa que el vehículo mental está regido por un elemental de naturaleza o cualidad de cuarto rayo y que, por lo tanto la actividad creadora artística es la línea de menor resistencia. Tenemos entonces un hombre de tendencia artística o un genio en alguna línea de tra­bajo creador. Cuando el alma y la personalidad al mismo tiempo se hallan en el cuarto rayo, tenemos a un Leonardo da Vinci o un Shakespeare. (15-229/30)

 

Quinto Rayo

 

 

EN EL HOMBRE NO EVOLUCIONADO

 

1.   El poder para desarrollar ideas.

2.   El espíritu para iniciar empresas materialistas, el impulso divino tal como se evidencia en las primeras etapas.

3.   La tendencia a investigar, a interrogar y a indagar. Este instinto de investigación del progreso es, en último análisis, [i258] el ansia de evolucionar.

4.   La tendencia a cristalizarse, a endurecerse, a adoptar una “idea fija”. En lo que a esto concierne se descubrirá que el hombre que sucumbe a una “idea fija” tiene no sólo un cuerpo mental de quinto rayo, sino también una personalidad o cuerpo emocional de sexto rayo.

 

     EN EL HOMBRE EVOLUCIONADO

 

1.   El verdadero pensador o tipo mental despierto y alerta.

2.   Aquel que conoce el Plan, el propósito y la voluntad de Dios.

3.   Aquel cuya inteligencia se está trasmutando en sabiduría.

4.   El científico, el educador, el escritor. (15-230)

 

 

El Primer Rayo como el Rayo del Cuerpo Mental

 

...Su mente de primer rayo le proporciona indiscu­tible influencia mental. Esto lo sienten muy fuertemente los que establecen contacto con usted. Estando definidamente en con­tacto con su alma (que, a su vez, está influida por el segundo rayo), posee una combinación de fuerzas decididamente útil, tanto para usted como para los demás. (5-152)

 

Su cuerpo mental es de primer rayo y esto le permite ser un verdadero estudiante de ocultismo. Su contacto con el alma es tan definido y real que su cuerpo mental no erige barrera alguna entre el alma y su personalidad o entre usted y sus condiscípulos. Siempre comprende mentalmente y es incluyente. No digo en teoría, sino de hecho. (5-344)

 

...La fuerza de la personalidad integrada afluye a través de un cuerpo mental de primer rayo, lo cual inevitablemente produce características paralelas de una intensa centralización (no digo egoísta, hermano mío) y una seguridad efectiva, una madura ambición (a menudo correcta, a veces algo incorrecta) y una facultad de analizar y, con frecuencia, de criticar a los demás, a sus personalidades y a sus tareas. (5-533)

 

La tendencia de su mente de primer rayo ha sido establecer las condiciones siguientes:

 1.   El sentimiento (a veces incomprendido) de separatividad...

2.   La tendencia a criticar...

 3.   Una gran facilidad para la excesiva actividad. Posee un cuerpo mental [i259] que está constantemente en un estado febril, con períodos de violenta actividad (lógicamente, hablo en símbolos) llegando casi al delirio. Como señalé antes, su actividad es excesiva y su mente va aquí, allá y a todas partes, y no llega a comprender ni a percibir realmente. Apenas tiene tiempo de captar algo cuando inmediatamente emprende otra cosa totalmente distinta... (5-537/8)

 

 

El Segundo Rayo como el Rayo del Cuerpo Mental

 

Su cuerpo mental pertenece al segundo rayo. Como observará, no es común, y hace que la iluminación sea la línea de menor resistencia. Facilita el contacto con el alma, pues para usted la demanda de amor y el aprecio por parte de la personalidad, constituye el problema dominante. Reflexione sobre esto. Significa que se puede confiar que sacrificará todo a fin de que los deseos, la voluntad y el propósito del alma -una vez aclarados- puedan ser realmente cumplidos. Usted no permite que nada detenga su realización espiritual cuando se abre ante sí el camino. Señala además, desde el ángulo inferior, que sacrificará muchas cosas para que las personas lo amen. Esto no tiene importancia en lo que a la persona común se refiere, porque a su debido tiempo e inevitablemente, emergerá el adecuado sentido de proporción. Pero tiene importancia en el caso de quienes están en el sendero del discipulado y enfrentan, en un futuro no muy distante, la preparación para la iniciación. Esté alerta y descubra por sí mismo la situación. La clave para la comprensión consistiría en estudiar si en los momentos de emergencia personal usted sacrifica su sentido de la verdad o sus amigos. (5-314/5)

 

Su cuerpo mental es de segundo rayo y, por lo tanto, no se ajusta a la regla que generalmente rige la elección de las fuerzas aisladas en determinado cuerpo mental. Quienes están en el sendero, no siempre se ajustan a las reglas. Este tipo de energía mental directriz le permitirá hacer tres cosas:

 

1.   Responder con facilidad, si lo desea, a los impulsos de su alma de segundo rayo. [i260]

2.   Mantener la mente firme en la luz y así discernir los principios básicos que su personalidad de primer rayo puede fácilmente reconocer.

3.   Trabajar con orden, habilidad y precisión, en el campo de servicio elegido.

 

También debe abstenerse de prestar excesiva atención al detalle, lo que constituye siempre la línea de menor resistencia y de experiencia satisfactoria, para quienes poseen una combinación de fuerzas de rayo similar a la suya. (5-461/2)

 

 

El Tercer Rayo como el Rayo del Cuerpo Mental

 

...Su cuerpo mental perte­nece al tercer Rayo de Inteligencia Activa, que es también el rayo de su personalidad. Esto produce dos cosas: facilita definidamente la integración de su personalidad, a la vez que le permite, si así lo decide, establecer contacto con su alma con cierta facili­dad. No obstante, hace también resaltar todas las facultades y capacidades de tercer rayo de su personalidad -crítica analítica, separatista, orgullosa e interesada en sí misma, y como está pa­sando definidamente por un proceso de rápida integración, todo produce situaciones que requieren un manejo y cuidado correctos. (5-223)

 

 

El Cuarto Rayo como el Rayo del Cuerpo Mental

 

Su cuerpo mental pertenece al cuarto Rayo de Armonía a través del Conflicto, de allí la adaptabilidad, su sentido de rela­ción y su rápida captación de la verdad mental. La ilusión, más que el espejismo, será para usted una celada. (5-135)

 

Su cuerpo mental... pertenece al cuarto Rayo de Armonía a través del Conflicto. De ahí su poder para armonizar, unificar y comprender. (5-166)

 

Su rayo mental es el cuarto, el de Armonía a través del Conflicto, la belleza mediante el orden y la unidad mediante la comprensión. Correspondiendo éste a la línea del [segundo] rayo de su alma, tenderá a establecer rápidamente contacto con ella, por conducto de la mente, si se dedica diligentemente al trabajo [i261] implicado. El problema de su vida reside, por lo tanto, en las relaciones internas y en el campo de servicio elegido. Lógicamente esto atañe a todos, pero su principal campo de batalla en conexión con esto, reside en la reconciliación de las fuerzas que luchan dentro de su propia naturaleza y en su medio ambiente... Es el campo de batalla donde luchan las relaciones más elevadas -entre el alma y la personalidad y entre lo que usted es en esta vida y el medio ambiente, donde se halla el campo de servicio elegido. Logrará su liberación personal cuando haya obtenido la armonía a través del conflicto, y la mejor técnica es adquirir esta influencia armonizadora en su propio medio ambiente, como resultado del conflicto interno que se libra silenciosamente en el santuario de la mente. (5-176)

 

El rayo de su mente, el cuarto, controla su personalidad, lo cual significa que posee el poder de reaccionar a la iluminación del alma. El objetivo de su meditación debiera ser luz. (5-191)

 

...El rayo del cuerpo mental es el cuarto, lo cual le facilita la tarea de responder a la luz del alma, porque proporciona una naturaleza mental que reacciona fácilmente al segundo rayo de su alma, por pertenecer a la misma línea de fuerza. (5-192)

 

Su cuerpo mental pertenece al cuarto Rayo de Armonía a tra­vés del Conflicto, que a veces rompe su aplomo y equilibrio. Su deseo por lograr la armonía le proporciona una visión miope, y usted tiende a actuar precipitadamente. Cuando esto ocurre, des­cubre luego que ha iniciado un conflicto, en vez de establecer la armonía, que fue su intención original. Pero puede aprender mu­cho con ello porque, en último análisis, el cuarto rayo rige a la humanidad, como también al planeta Tierra; por consiguiente, su mente de cuarto rayo puede siempre ponerlo en contacto con el mundo de los hombres, con menos peligro que su naturaleza emo­cional. Este hecho, unido a la sabiduría y amor de su personali­dad, debería ayudarlo grandemente para trabajar con las perso­nas, campo que ha elegido para, su esfuerzo y expresión. (5-199)

 

¿Cuáles son, hermano mío, las características de un cuerpo mental [i262] de cuarto rayo? Permítame enumerar algunas, esperando que las aplique honesta y comprensivamente.

 

   Destructivas   Constructivas

 

 

Una batalla mental interna................... La disolución de los pares de opuestos.

Muchos antagonismos......................... No tener partidismo. El Camino Medio.

Prejuicio................................................ Comprensión tolerante.

Unidad y síntesis de la personalidad   Unidad y síntesis grupal.

Discordia interna y externa................. Armonía externa e interna.

Problemas del medio ambiente     Paz en el medio ambiente.

Imposición de la voluntad  .................. Expresión de la voluntad de amar.

 

Existen, lógicamente, muchas otras cualidades y tendencias, pero enumeré las de mayor utilidad para usted. Quiero recordarle que el cuarto rayo, cuando forma parte del equipo de fuerzas de la per­sonalidad, es la expresión de la voluntad de amar, en sentido ma­terial o espiritual. Por lo tanto, está aliado con el primer rayo, porque hace resaltar la voluntad. (5-245)

 

Su cuerpo mental pertenece al cuarto rayo; de allí su poder para armonizar y evitar conflictos, actuando así como centro pa­cífico en el torbellino de actividad que lo circunda. (5-260)

 

Su cuerpo mental, fue ostensiblemente de cuarto rayo; le otorgó ese amor a la armonía que lo ayudó a establecer las reglas de organización y ese amor a la belleza que le permitió ver lo real; logró ese discernimiento que hizo posible reunir a su alrededor aquello que le proporcionaba belleza -libros y cosas bellas-, pero también, como siempre sucede, le despertó un espíritu antagónico que lo impulsó adelante hacia nuevas conquistas, en bien de la armonía. (5-373)

 

Su cuerpo mental pertenece al cuarto rayo. De allí el conflicto y, al mismo tiempo, el profundamente arraigado amor a la armonía, que fueron antagónicos en su vida... Es posible amar mucho la armonía y luchar por obtenerla y combatir para alcanzarla; de este modo entra en un mundo de espejismo del cual le resulta a menudo difícil salir. ((5-448)

 

[i263] Su cuerpo mental... pertenece al cuarto Rayo de Armonía a través del Conflicto, de allí la intensidad de su vida mística interna... Este factor en su vida hace que sea magnético y que lo amen. (5-579)

 

Su cuerpo mental es de cuarto rayo, lo cual le otorga su amor por las artes y las ciencias; sin embargo, ese rayo básicamente le trae, y deberá traerle, conflictos en su vida y en sus relaciones. Esta idea tiene mucho valor y le será de gran utilidad, porque el conflicto en su vida... podrá convertirlo en una mano fuerte, tendida a otros en la oscuridad. No olvide esto, siga luchando y recuerde que no está solo. (5-585)

 

Su cuerpo mental pertenece definidamente al cuarto Rayo de Armonía a través del Conflicto, por medio del cual puede establecer una rápida armonía con sus hermanos. Contribuye a aplicar inteligentemente la comprensión y también a que surja la belleza mediante la armonía establecida. Esa cualidad que usted posee le otorga un ordenado sentido del color, la proporción y la armonía en el medio ambiente que usted ha planificado, haciéndolo a veces reaccionar violentamente ante lo que le parece incorrecto, desarmónico y fuera de tono o línea. (5-591)

 

Su cuerpo mental pertenece al cuarto rayo de Armonía a través del Conflicto... lo cual significa que lo atrae la armonía y le agrada unir los opuestos en una unidad inteligente. Pero es una armonía interpretada en términos de emoción... Debe reflexionar sobre la armonía tal como la entiende la mente, y recuerde que sólo logran trasformar la discordia en armonía quienes trabajan desde un centro estable de adaptación. (5-602)

 

Su cuerpo mental pertenece al cuarto rayo, produciendo ese amor al arte y a la literatura que lo caracteriza y le proporciona, además, ese campo de conflicto que también caracteriza toda su vida. (5-608)

 

El cuarto rayo de Armonía a través del Conflicto controla el cuerpo mental [de un número] de los miembros de mi grupo, de allí el consiguiente conflicto y la opor­tunidad ofrecida, además [i264] de la manifiesta ambición de lograr la armonía psíquica entre el alma de la forma y el alma misma. La armonía se obtiene a través del conflicto entre ambas. Este rayo o energía produce la prueba. La gente forcejea con las ideas, se esfuerza por lograr la meta de su actual idealismo y la impele el anhelo de hallar paz, gozo y divina seguridad. Después de un ciclo de vidas en que varía el rayo mental una vida tras otra, llega una encarnación en que predomina el rayo de armonía a través del conflicto; entonces el discípulo debe probar, experimentar y com­probar específicamente, a fin de demostrar lo realizado o no, en un anterior ciclo de experiencia viviente... Enfrentan hoy esta situación, y la humanidad también la enfrenta, uno de cuyos rayos controladores es el cuarto. (6-626)

 

 

El Quinto Rayo como el Rayo del Cuerpo Mental

 

Su cuerpo mental está regido por la energía de quinto rayo. Esta condición bien marcada constituye gran parte de las dificultades de su vida. En el caso de los aspirantes condicionados mentalmente, es la causa primordial de su comportamiento no magnético, utilizando esa palabra en sus implicancias psicológicas. Le recordaré que el no ser magnético, en su actual etapa de desenvolvimiento, indica que (a pesar de haber establecido cierta medida de contacto con el alma) no puede irradiar esa vida egoica a los demás como quisiera, porque su cuerpo mental predominantemente de quinto rayo (el Rayo de la Ciencia Concreta...) se halla impermeabilizado, aislado y tiene una tendencia natural a esa discriminación que conduce a la separatividad. También es verdad que puede haber un efecto contrario, cortar la radiación de otros, de allí su incapacidad de registrar impresiones telepáticas. No obstante, el valor de una mente de quinto rayo es muy grande, porque significa una mente aguda y útil (reflexione sobre esto) y una puerta abierta a la inspiración. (5-124)

 

El rayo de su cuerpo mental es el quinto, y debido a que es mismo de su personalidad, debe cuidarse mucho de la cristalización mental y de la indebida influencia de una mente analítica. Este rayo le proporciona habilidad en el campo del conocimiento, pero debe estar equilibrado por el desarrollo de la intuición; le otorga [i265] poder para dominar el campo de conocimiento que ha elegido, pero ese poder debe estar equilibrado por un dominio simultáneo del mundo, en el que predomine el amor y la sabiduría. (5-295)

 

...La cualidad de quinto rayo de su mente puede servir a un propósito grupal útil. Usted está en situación de poder erigir un muro protector (no una barrera separadora) alrededor de todo el grupo; lo exhorto a que inicie ahora esta actividad. (5-297)

 

...Su cualidad de quinto rayo, la del conocimiento, y cuando la posea le traerá iluminación. Es esa cualidad que permite a quien la posee, permanecer firme en la luz y en el ser puro, y llegar a ser el verdadero Observador. Las facultades de mantenerse firme, con la intención de reflejar luz, de centralizar al yo y de observar correctamente, son esenciales para este grupo. (5-297)

 

Esta mente de quinto rayo le otorga su naturaleza inquisidora e investigadora, una de sus características sobresalientes -un gran haber cuando es correctamente empleada, y principal problema y verdadero impedimento para la afluencia de la luz del alma, cuando se destaca demasiado. (5-327)

 

...La centralización de su mente de quinto rayo ha determinado la forma de encarar mentalmente los problemas y las personas. (5-329)

 

Su cuerpo mental pertenece al quinto rayo de Conocimiento Concreto o Ciencia. De allí su interés y utilidad en la ciencia de la astrología que es, de muchas maneras, la ciencia de las ciencias. De allí también su mente aguda y su incansable búsqueda de la verdad y su poder para alcanzar la luz sobre muchas cuestiones. Lo único que debe recordar es que el quinto rayo es un factor cristalizador y  (en conjunción con la voluntad y el poder desarrollados por usted en su última vida podría llevarlo al dogmatismo y en consecuencia a la separatividad. Esto debe ser neutralizado por su alma de segundo rayo. (5-406)

 

Su cuerpo mental es de quinto rayo, por lo tanto, posee una mente intensamente analítica. Le recuerdo que usted es analítico, no discernidor. Reflexione sobre esta diferencia. (5-479)

 

[i266] Su cuerpo mental pertenece al quinto rayo, que le permite comprender los hechos y captar los contornos de las ciencias ocultas. Pero el cuerpo mental debe ser guiado para que se convierta en instrumento de iluminación y no simplemente en registrador de hechos, lo cual sólo es posible cuando la cabeza y el corazón vibran al unísono. (5-496)

 

...Su mentalidad de quinto rayo... no le permite ser magnético y le hace adoptar una actitud vertical y no horizontal hacia la vida. (5-498)

 

El quinto Rayo de Conocimiento Concreto es, en realidad, aquel en que el hombre aprende a aplicar todo el conocimiento adquirido acerca de la "forma divina", de manera que sirve a la vida interna, y la forma externa se convierte en expresión magnética de la vida divina. Por sobre todas las cosas es el rayo del amor inteligente, así como el segundo rayo es el del amor intuitivo -algo que raras veces se recuerda o se conoce. (5-498)

 

 

Los Rayos del Cuerpo Astral

El Primer Rayo como el Rayo del Cuerpo Astral

 

...Su cuerpo astral [así como su cuerpo mental] pertenece... al primer rayo, acontecimiento excepcional que raras veces se produce. Aquí es donde se introduce el sentido de separatividad, porque esa tendencia de primer rayo le produce dos cosas:

 

a.  Nutre su sentido de separatividad y tiende a aislarlo.

b.  Fomenta su temor al apego.

 

De este modo está a menudo emocional y astralmente desapegado y aislado de quienes lo aman y también de sus semejantes. De allí que haya un continuo conflicto entre su alma amorosa y su vehículo astral aislado y solitario. (5-344/5)

 

Su cuerpo astral está también regido por el primer rayo. Esto es una excepción a la regla general, pues el segundo y el sexto rayo rigen los cuerpos astrales de toda la humanidad. Esta regla varía ocasionalmente en el caso de los discípulos. (5-396)

 

[i267] ...Posee un cuerpo astral de primer rayo, lo cual es también una excepción a la regla. Cuando el discípulo está dedicado a desarrollar y redondear un determinado proceso, cabe esta excepción, y usted heredó, de la personalidad de primer rayo que poseyó en su última encarnación, un cuerpo astral de primer rayo. (5-431)

 

Su cuerpo astral es de primer rayo, de Voluntad o Poder, y a ello se debe gran parte de su dificultad en el pasado. Un cuerpo astral de primer rayo es un valioso haber, pero exige una cuidadosa vigilancia y un hábil control. Cuando no se lo maneja correctamente desarrolla con facilidad tormentas temperamentales y lleva a una condición donde el dramático "yo" se centraliza en la vida. (5-462)

 

 

El Segundo Rayo como el Rayo del Cuerpo Astral

 

Su cuerpo astral pertenece al segundo Rayo... pues le trae esas dificultades y oportuni­dades que llevan, eventualmente, a expansiones de conciencia y lo hacen sensible a la psiquis de otros, siendo en gran parte la base del buen trabajo que ha realizado. (5-135)

 

Su cuerpo astral es... un conglomerado de ener­gía de segundo rayo, de allí la influencia del amor que ejerce en todas partes. No obstante, le recordaré que cuando el alma y el cuerpo astral pertenecen al mismo rayo, se presenta un absor­bente problema de equilibrio. (5-152)

 

Su cuerpo astral de segundo rayo facilita grandemente su tra­bajo, pues le da comprensión e inofensividad, de manera que sus emociones no entorpecen sus juicios ni sus decisiones. (5-166)

 

Su cuerpo astral está regido por el segundo rayo y, desde cierto punto de vista, fue la influencia más poderosa en su equipo de la personalidad y el factor equilibrador de la energía de primer rayo, expresado por los rayos de su alma y de su personalidad. (5-373)

 

 

Su cuerpo astral es de segundo rayo, y este hecho facilita grandemente la tarea de su alma y explica la habilidad con que descubrirá que usted mismo es un transmisor de luz [i268] y amor para los demás. Este alineamiento entre su alma y su cuerpo astral, le proporciona la percepción intuitiva que puede emplear si es humilde y sigue amando. (5-585/6)

 

 

El Sexto Rayo como el Rayo del Cuerpo Astral

 

El cuerpo astral o emocional está condicionado por el sexto Rayo de Devoción o Idealismo, el cual puede muy fácilmente ser trasferido y trasformado por influencia del segundo Rayo de Amor-Sabiduría. Su tarea, en la actual vida, consiste en hacer esto posible, de modo de adquirir en su próxima vida un cuerpo astral condicionado por el segundo rayo. Su capacidad de progresar para lograr su ideal, a pesar de los obstáculos, es su principal haber, y lo llevará eventualmente a su meta. (5-124/5)

 

...Orientó el cuerpo astral hacia valores e impresiones más elevados; lo hizo con tanto éxito que su sensibilidad emocional para con los demás, constituye ahora un definido haber activo. (5-126)

 

Su cuerpo astral o emocional pertenece al sexto rayo... En su caso, dicha energía se manifiesta predominantemente como dedicación al deber, según usted lo entiende, y como responsabilidad, según usted la reconoce, y no tanto como dedicación a las personas o a los ideales. Esto ha constituido el factor equilibrador más importante en su vida. (5-176)

 

Su cuerpo astral es de sexto rayo, lo cual le proporciona una actitud unilateral hacia la vida y, principalmente en su caso, hacia las cosas del mundo espiritual... Este rayo le permite, si lo desea, hacer un contacto relativamente  fácil con el alma. (5-199)

 

Debe recordar que los rayos tienen sus atributos secun­darios, y de la misma manera que el sexto –expresado en su personalidad– puede llevarlo a seguir fanáticamente el ideal (lo que éste puede significar para usted), también el mismo rayo en el [i269] cuerpo astral produce la expresión de la devoción... En lo que a usted concierne no es devoción a sus propios intereses egoístas, sino un gran factor de extroversión. Lo conduce por el camino del servicio. (5-242/3)

 

El rayo de su cuerpo astral es el sexto y... su cualidad principal es la devoción y la persistente consagración, pero no el fanatismo. Esta energía tiene un enorme valor para usted porque, en forma curiosa, es el único vínculo que posee con el gran segundo rayo de amor, en esta encarnación particular, pero es un vínculo fuerte y poderoso. (5-295)

 

Otra fuente de dificultad reside en su cuerpo astral de sexto rayo (el rayo de la devoción idealista fanática), porque produce un real desequilibrio, indebida atención a los detalles del proceso y gran devoción a las cosas que provienen de la satisfacción emocional, debido a esa misma atención, lo cual impide comprender las cuestiones principales y produce la incapacidad de avanzar gentilmente por el Camino. (5-385/6)

 

Esta fuerza de [sexto] rayo le proporciona devoción, idealismo y voluntad dinámica, para horadar los espejismos y los conceptos erróneos y así llegar a la verdad y obtener la liberación, para usted, su grupo y aquellos a quieres sirve. (5-406)

 

Su cuerpo astral es de sexto rayo... Esto intensifica la aspiración y la voluntad dinámica de forjar adelante, algo que hasta ahora fue suficiente para superar todos los obstáculos. Ya logró evitar las dificultades comunes de... las adhesiones fanáticas a las personas o escuelas de pensamiento. (5-415)

 

Su cuerpo astral es de sexto rayo e intensifica sus tendencias taurinas, porque así como el toro arremete adelante viendo sólo lo que está directamente frente a él, también lo hace el fanático de sexto rayo. Sin embargo, cuando se aplica esta aptitud para servir, puede obtenerse progreso. (5-449)

 

Su cuerpo astral es de sexto rayo, otorgándole ese centrado enfoque que constituye el mayor bien para todo discípulo, pero también cierta medida de estrechez que a veces lo obstaculiza. (5-496)

 

[i270] ...Su cuerpo astral de sexto rayo implica (en lo que a un discípulo se refiere) intensa adhesión a una línea de pensamiento, idea, grupo, persona, actitud o noción preconcebida. Podrán ser correctos o no, pero la tendencia a la adhesión está poderosamente presente y puede ser un gran bien o un gran obstáculo. En cualquier caso -en lo que concierne al discípulo- toda idea fija (excepto la de la correcta orientación espiritual) puede constituir un impedimento para el progreso, si está fanáticamente motivada. (5-534)

 

...Su cuerpo astral de sexto rayo intensifica el problema, porque lo impele a dedicarse a los fenómenos superficiales que considera reales. (5-583)

 

Su cuerpo astral es definidamente de sexto rayo, por eso lo predispone a adoptar actitudes pisceanas, ideas fijas emocionales, violentas tormentas astrales, gran devoción que despierta reacciones emocionales sobre cuestiones y temas que, en este día de sufrimiento y crisis mundiales, no merecen atención y constituyen una forma fácil de sintonizarse con el espejismo y la ilusión. (5-602)

 

A causa de esa devoción fija, pueden recorrer indesviablemente el Camino. Pero tien­den a olvidar que -debido a esa devoción- irradian tam­bién una cualidad que estimula una análoga cualidad en los demás. Por esta razón las personas de sexto rayo pue­den fácilmente formar un grupo a su alrededor. Debido a que no comprenden por qué les es fácil reunir grupos, y lo atribuyen siempre a causas erróneas... En su caso [su cuerpo astral de sexto rayo], lo induce a ese sentimiento de inferioridad... Le pediría que adopte otro punto de vista y considere a su cuerpo astral de sexto rayo como una pieza poderosa del equipo que debe emplear para prestar servicio. (6-411)

 

 

Los Rayos del Cuerpo Físico

 

...El cerebro está com­puesto de átomos y de unidades celulares que vibran de acuerdo a la energía del rayo que controla el cuerpo físico. Ésta es una realidad básica esotérica, expuesta por primera vez en una defini­da declaración, pero siempre puede deducirse o sobreentenderse cuando el estudiante analiza inteligentemente y capta [i271] en realidad las implicancias esotéricas básicas. (6-426)

 

 

El Primer Rayo como el Rayo del Cuerpo Físico

 

Su cuerpo físico pertenece al dominante tipo de primer rayo. Esto no es comúnmente así, excepto en el caso de los discípulos que pueden construir vehículos de cualquier tipo de fuerza, para enfrentar los casos de emergencia, la necesidad o el servicio en determinada vida. Este cuerpo de primer rayo le permite manejar energía espiritual en el plano físico y también actuar como trasmisor y distribuidor de fuerza. (5-315)

 

 

El Tercer Rayo como el Rayo del Cuerpo Físico

 

Posee un cuerpo físico de tercer rayo, el Rayo de Actividad Inteligente. En gran parte está controlado internamente por su mente de quinto rayo. (5-125)

 

[Su dificultad] también reside en su cuerpo físico de tercer rayo, que pertenece a la línea mental, acrecentando la actividad de su personalidad censuradora. Sin embargo se critica a sí mis­mo y ello puede ser tan erróneo e innecesario como criticar a otros. (5-192/3)

 

Posee un cuerpo físico de tercer rayo. Esto lo pone en con­tacto con la tierra y lo hace descender a ella, cosa que una per­sona de sexto rayo necesita predominantemente, en particular si está muy evolucionada. Este tercer rayo lo ayuda a expresarse en el plano físico; constituye un punto focal para la manifestación del alma; pero, en forma peculiar, es el rayo por el cual se ex­presa el tercer aspecto de la divinidad, y tanto puede producir una fuerte expresión de la personalidad como también resultar un entorpecimiento definido. (5-243)

 

Su cuerpo físico es de tercer Rayo de Inteligencia Activa, factor que lo llevó originalmente al campo de los negocios y, por lo tanto, lo inclinó al trabajo de empresa y de organización. ((5-353)

 

Su cuerpo físico pertenece al tercer Rayo de Inteligencia Activa. Esto le otorgó la capacidad de trabajar en el plano físico, manejar dinero (aunque no para su propio beneficio) y [i272] lo ligó estrechamente a la vida material de su medio ambiente, en forma curiosamente simbólica. (5-373)

 

Su cuerpo físico de tercer rayo lo inclina a una gran actividad física (como el movimiento y la palabra rápidos), lo mantiene siempre ocupado, por lo común en cosas improductivas y fuera de proporción al esfuerzo realizado. (5-386)

 

Su cuerpo físico corresponde al tercer rayo, proporcionándole ese activo e inteligente aferramiento a la vida y un vehículo físico coordinado. (5-496)

 

...Su cuerpo físico de tercer rayo... demanda cambios y requiere variación; le desagrada la quietud y la estabilidad. (5-487/8)

 

 

El Sexto Rayo como el Rayo del Cuerpo Físico

 

...Su cuerpo físico es también de sexto rayo, en consecuencia, su cerebro responde mucho a sus impulsos astrales. (5-224)

 

Su cuerpo físico pertenece también al sexto rayo, que predominantemente lo convierte a usted y a su cerebro, en el servidor de su cuerpo astral, pero lo hace también intuitivo o astral búdico. Por consiguiente observe que, en su caso, hay una excepción a la regla que controla al cuerpo físico, porque hay muy pocos cuerpos físicos de sexto rayo como el suyo. (5-479)

 

 

El Séptimo Rayo como el Rayo del Cuerpo Físico

 

Su cuerpo físico es de séptimo rayo, le da ese sentido de rela­ción entre espíritu y materia, entre alma y cuerpo, y le permite, si así lo desea, ser agente constructor en el trabajo mágico. (5-136)

 

...Su cuerpo físico es de séptimo rayo. De ahí su oportunidad y capacidad como masón, de organizar y dirigir. Recordaré a todos que cuando digo que el cuerpo físico es de séptimo rayo, significa que los átomos del cerebro, en par­ticular, están matizados y motivados por la [i273] energía de séptimo rayo. Lo mismo sucede aunque el vehículo físico pertenezca a cua­lesquiera de los rayos. Esto proporciona actualmente una oportu­nidad definida a quienes están así constituidos respecto al séptimo rayo, cuya influencia se acerca rápidamente. Al mismo tiempo presenta un problema –el interminable problema de equilibrar las fuerzas, tarea principal del iniciado, o de quienes se preparan para la iniciación. (5-166)

 

Su cuerpo físico es de séptimo Rayo de Orden Ceremonial o Magia. Aquí reside el origen de la mayor parte de su mala salud. El séptimo plano es el receptáculo de la energía espiritual y donde debe expresarse el espíritu. Su vehículo físico y medio de expresión es de naturaleza tan sensible y refinada y un receptáculo tan frágil, que el problema de su vida es manejar inteligentemente la energía espiritual que trata de afluir por él. (5-406)

 

Su cuerpo físico corresponde al séptimo Rayo de Orden Ceremonial o Magia, y a ello se debe su interés en el espiritismo... (5-505)

 

Su cuerpo físico es de séptimo rayo, y esto conduce a la integración y a la eficiencia. (5-534)

 

Su cuerpo físico pertenece al séptimo rayo, y esto le será fácilmente evidente, porque explica su interés por la música el ritual y el psicoanálisis. La meta de estos tres métodos de expresión es unir y relacionar armónicamente el alma y la forma, tarea principal del séptimo rayo en el séptimo plano físico. (5-586)

 

 





La Astrología y los Rayos

 

[i70] Llamaré la atención sobre el hecho de que la astrología, en la que estoy insistiendo, concierne a las energías efectivas –con lo que ellas son y de donde provienen. Vuelvo a repetir, como lo he hecho frecuentemente, que no me ocupo de la astrología profética. En el futuro, el énfasis de la astrología será puesto sobre las energías disponibles, el uso que el sujeto hace de ellas y la oportunidad que ofrecen en un momento dado. (9-58)

 

...Qui­siera recalcar... que estamos considerando las influencias esotéricas y no la astrología en sí. Nuestro tema versa sobre los siete rayos y sus relaciones con las constelaciones zodiacales, o en otras pala­bras, sobre la interacción de las siete grandes Vidas que animan a nuestro sistema solar, con las doce constelaciones que componen nuestro zodíaco. (16-31)

 

Cabría aquí preguntarse, ¿cuál es la diferencia que existe entre las influencias de rayo y las astrológicas, tales como las del signo ascendente y de los planetas regentes?

 

Las energías que afectan astrológicamente a un ser humano son las que actúan sobre él como resultado del desplazamiento aparente del sol a través del firmamento, una vez cada veinticinco mil años, o cada doce meses. Las energías que constituyen las fuerzas de rayo no provienen de las doce constelaciones del zodiaco, sino que emanan principalmente del mundo del ser y de la conciencia que reside detrás de nuestro sistema solar, que a su vez provienen de las siete constelaciones que forman el cuerpo de manifestación de "Aquel sobre el Cual [i71] nada puede decirse". Nuestro sistema solar es una de las siete constelaciones y éste es el mundo de la Deidad Misma, de la cual el hombre nada puede saber hasta que haya pasado a través de las principales iniciaciones. Cuando estudiemos el zodíaco y su relación con los rayos tendremos que dilucidarlo más cuidadosamente a fin de aclarar el concepto. (14-262)

 

La astrología se ocupa hoy en especial de la personalidad de aquel a quien se confecciona el horóscopo, y de los acontecimientos de la vida de la personalidad. Cuando, a través de la meditación y el servicio, más la disciplina de los cuerpos lunares, el hombre pasa consciente y definitivamente a ser controlado por el rayo de su alma, queda entonces en forma definida bajo la influencia de uno de los siete sistemas solares, a medida que enfoca sus energías a través de una de las constelaciones. Por consiguiente, es influido por uno de los siete planetas sagrados. Eventualmente habrá doce planetas sagrados que corresponden a las doce constelaciones, pero aún no ha llegado el momento. Nuestro sistema solar, como bien saben, es uno de los siete sistemas. Cuando el hombre haya arribado a este grado de evolución, los meses de nacimiento, la astrología mundana y las influencias que actúan sobre el aspecto forma, tendrán cada vez menos importancia. Este círculo de sistemas solares afecta en sumo grado al alma, y ella se convierte en un punto focal de energías espirituales. Éste es el problema del alma en su propio plano –la personalidad es totalmente inconsciente de estos tipos de energía, y de la respuesta a ellos.

 

Los signos correspondientes a las cuatro categorías, de tierra, agua, fuego y aire, conciernen principalmente al hombre que vive debajo del diafragma y utiliza los cuatro centros inferiores: el centro en la base de la columna vertebral, el centro sacro, el centro plexo solar y el bazo. El grupo interno de siete energías mayores produce su efecto en el hombre que vive arriba del diafragma y actúa mediante los siete centros representativos de la cabeza. Cuatro energías se enfocan por medio de los centros laríngeo, cardíaco, ajna y coronario. Tres se mantienen latentes en la región de los centros de la cabeza (el loto de mil pétalos) y sólo entran en actividad funcional después de la tercera iniciación. Por lo tanto, es evidente que resulta complicada, desde el punto de vista del horóscopo (como asimismo del problema [i72] individual), esta reunión de energías de dos tipos de constelaciones en el caso del hombre que no es ni puramente humano ni esencialmente espiritual. El horóscopo comúnmente conocido es inexacto. Aún no es posible delinear un horóscopo. El único horóscopo básicamente infalible es el del ser humano de grado totalmente inferior, que vive por completo debajo del diafragma y se rige únicamente por su naturaleza animal. (4-319/20)

 

Siete estrellas de la Osa Mayor constituyen las Fuentes originantes de los siete rayos de nuestro sistema solar. Los siete Rishis de la Osa Mayor (según se los denomina) se expresan por medio de los siete Logos planetarios, los cuales son Sus representantes y a los Cuales representan en lo que a la relación prototípica concierne. Los siete Espíritus planetarios se manifiestan por medio de los siete planetas sagrados.

 

Cada uno de los siete rayos, provenientes de la Osa Mayor, son transmitidos a nuestro sistema solar por medio de tres constelaciones y sus planetas regentes. (16-74, 16-317, 16-436)

 

...Las energías unidas de las tres constelaciones que controlan y energetizan a nuestro sistema solar: La Osa Mayor, las Pléyades y Sirio, actúan por intermedio de los siete rayos y éstos a su vez se expresan por intermedio de las doce constelaciones que forman la gran rueda zodiacal. Los Señores o Poderes Regentes de estas doce fuentes de luz y vida aminoran la potencia de estas tres energías mayores para que nuestro Logos solar pueda absorberlas; ellas se sintonizan los aspectos de las tres Potencias que no son ade­cuadas a nuestra vida del sistema, en este punto del proceso evolutivo, así como la Jerarquía desintoniza o aminora, sobre nuestro pequeño planeta, las energías provenientes de Shamballa. Estas tres energías mayores, se expresan en forma misteriosa por intermedio de los siete rayos, así como todas las triplicidades se subdividen en septenarios, conservando sin embargo su iden­tidad. Estas siete energías que emanan de las tres mayores y son trasmitidas por conducto de las doce constelaciones, están cor­porificadas en los siete planetas sagrados y representadas en nuestra Tierra por los siete Espíritus ante el trono de Dios (el [i73] símbolo de la síntesis). Esta grandiosa interrelación está perso­nificada en el gran proceso de: Transmisión, Recepción, Absorción, Relación y Actividad Viviente. El método es de Invocación y Evocación. Ambas frases contienen uno de los indicios más importantes de todo el proceso evolutivo, la clave para el enigma del tiempo y del espacio y la solución de todos los problemas. Pero el factor más importante consiste en que toda la cuestión cons­tituye la expresión de la Voluntad enfocada. (16-441)

 

Los Señores de los rayos crean todos un cuerpo de expresión, y de este modo han venido a la existencia los siete planetas... Las energías de estas siete Vidas, sin embargo, no están confinadas a su expresión planetaria, sino que se extienden alrededor de los confines del sistema solar, así como los impulsos de la vida de un ser humano –sus fuerzas vitales, el impulso de sus deseos y sus energías mentales– recorren su cuerpo activando los diversos órganos, permitiéndole llevar a cabo su intención, vivir su vida y cumplir el objetivo para el cual creó su cuerpo de manifestación.

 

Cada uno de los siete reinos de la naturaleza reacciona a la energía de alguna Vida particular de rayo. Cada uno de los siete planos reacciona en forma similar. Cada septenario de la naturaleza vibra con uno de los septenarios iniciales, porque los siete rayos establecen ese proceso que asigna los límites de influencia para todas las formas. Son aquello que determina todas las cosas, y al emplear estas palabras quiero indicar la necesidad de que prevalezca la Ley. La Ley es la voluntad de las siete Deidades, que se plasman en la sustancia a fin de producir una intención específica, mediante el método del proceso evolutivo. (14-71/2)

 

 

El Rayo del Sistema Solar

 

Se afirma que existen siete grandes rayos en el cosmos. En nuestro sistema solar sólo uno de estos grandes rayos está en actividad. Las siete subdivisiones constituyen los "siete rayos" que manejados por nuestro Logos solar, forman la base de infinitas variaciones en su sistema de mundos. Estos siete rayos pueden describirse como los siete canales a través de los cuales fluye todo lo que existe en Su sistema solar, las siete características predominantes, o [i74] modificaciones de la vida, que no sólo se aplican a la humanidad sino también a los siete reinos. En realidad no existe nada en el sistema solar, cualquiera sea su grado de evolución, que no pertenezca ni haya pertenecido a uno de los siete rayos. (14-141)

 

Debe recordarse que el rayo predominante o influencia sobresaliente de nuestro sistema solar, es el segundo gran Rayo cósmico de Amor-Sabiduría, rayo dual, el cual combina dos grandes principios y energías cósmicas. Rige a la personalidad de nuestro Logos solar, si puedo emplear tal expresión, y (debido a su dualidad) indica que sus rayos de la personalidad y del alma, están tan equilibrados y fusionados que, desde el ángulo de la humanidad, constituye el rayo mayor, el rayo uno, el cual determina la cualidad y el propósito del Logos.

 

Cada unidad de vida y cada forma en manifestación están regidas por el segundo rayo. Fundamentalmente hablando, la energía de amor expresada con sabiduría es la línea de menor resistencia para las vidas manifestadas en nuestro sistema solar. Este rayo cualifica la vida de todos las planetas y el atractivo amor magnético de Dios que afluye a través del universo que Él ha creado; emerge en la conciencia y determina el objetivo de todas las formas en evolución. Cada ser humano vive, por lo tanto, en un universo y en un planeta, y es constantemente el objetivo del amor y del deseo de Dios, y (como resultado de ese amor) es continuamente atraído y a su vez es atrayente, algo que nunca lo tenemos en cuenta. Instructores, padres y educadores harían bien en reconocer el poder de esta fuerza de rayo y confiar en que la Ley hará bien todas las cosas. (14-263/4)

 

 

Los Rayos y los Planetas

 

Todas las partes del sistema solar son interdependientes; todas las fuerzas y energías se hallan en constante flujo y mutación; todas fluyen por medio de cierta respiración rítmica, en grandes pulsaciones, alrededor del átomo solar, de modo que las cualidades de cada vida solar, fluyendo a través de las siete formas de los rayos, compenetran todas las formas dentro del círculo infranqueable solar, vinculando así una [i75] forma con otra. Observen, por lo tanto, que cada uno de los siete Rayos o Constructores creadores, personifican la energía, la voluntad, el amor y el propósito del Señor del sistema solar, así como ese Señor a su vez personifica un aspecto de la energía, la voluntad, el amor y el propósito de "Aquél del Cual nada puede decirse". Por eso, la primera proposición que deben captar quienes estudian el tema de los rayos, es:

 

I.  Cada Vida de rayo es la expresión de una Vida solar, y cada planeta está en consecuencia...

 

 

1.    Vinculado con cada vida planetaria del sistema solar.

 

2.    Animado por la energía que emana de uno de los siete sistemas solares.

 

3.    Activado por una triple corriente de fuerzas vitales que proviene de:

 

a.    Otros sistemas solares fuera del nuestro.

b.    Nuestro sistema solar.

c.     Su propio Ser planetario.

 

Resulta imposible para el pensador común captar el significado de esta afirmación, pero puede comprender parcialmente el enunciado de que todo planeta es un punto focal a través del cual circulan y fluyen incesantemente fuerzas y energías, y que las energías emanan desde el cosmos externo o del universo mismo, desde el sistema solar del cual su propio planeta es una parte y nuestro sol es el centro, y de Aquel Ser que constituye nuestro particular Señor, o Vida planetaria...

 

La complejidad del tema es muy grande, y sólo un amplio delineamiento general del sistema y los principios básicos que rigen la ley de la evolución pueden ser tenuemente percibidos y captados. Lo que abarca el tema es de tanta amplitud que la mente concreta y el razonamiento se pierden al entender los problemas y su complejidad. Pero la intuición iluminada con su poder sintetizador (característica que surge en los discípulos e iniciados en entrenamiento), puede conducir y los conduce a una serie gradual de expansiones de conciencia que al final los llevará a la cumbre del Monte de la Transfiguración. Desde esa cúspide el discípulo puede adquirir la visión que le permitirá ver todo el esquema [i76] mundial en un instante... Luego podrá descender de la montaña con su personalidad transfigurada y radiante. ¿Por qué? Porque ahora sabe que el espíritu es una realidad y la base de la inmortalidad; sabe más allá de toda controversia que existe un Plan, y que el amor de Dios es la ley básica de toda manifestación y el origen de todo impulso evolutivo; entonces podrá estar seguro, por el conocimiento adquirido, que la realidad del espíritu, la proximidad del amor y el alcance sintético del Plan, proporcionarán los cimientos sobre los cuales podrá poner sus pies, mantenerse firme y confiar en que el logro de la meta también es seguro.

 

Nuestra segunda proposición es la siguiente:

 

II. Cada uno de los rayos es receptor y custodio de las energías provenientes de:

 

1.    Los siete sistemas solares.

 

2.    Las doce constelaciones.

 

Cada rayo hace pasar estas energías a través de su cuerpo de manifestación (un planeta), y las imparte a la forma planetaria y a todas las formas que están sobre y dentro de ella. Estas formas diferenciadas están animadas por la energía que proviene de la Vida cósmica, de la Deidad solar y de la Vida planetaria y, en consecuencia, están coloreadas por las cualidades de los siete sistemas solares y las doce constelaciones. Esta fusión de energías que actúa sobre la sustancia produce las formas, y cada forma subjetiva a su vez produce la apariencia externa. (14-133/5)

 

Las energías de los distintos signos son atraídas por los diferentes planetas, de acuerdo con su etapa de desenvolvimiento y por lo que esotéricamente se denomina “antigua relación” entre las entidades que animan a los planetas y a las constelaciones. Esta relación existe entre los seres y está fundada en la Ley de Afinidad, la cual produce la atracción magnética y la respuesta dinámica entre las constelaciones y los planetas en el sistema solar. (16-204)

 

Los rayos emplean a los planetas como agentes transmisores y sabemos qué rayos –en este ciclo mundial– están relaciona­dos con los diferentes planetas... y son: [i77]

 

Planetas Sagrados     Planetas no Sagrados

1. Vulcano   1er. rayo 1.    Marte 6to. Rayo

2. Mercurio 4to. rayo  2.    La Tierra  3er. rayo

3. Venus 5to. rayo  3.    Plutón  1er. rayo

4. Júpiter     2do. rayo 4.    La Luna    4to. rayo

5. Saturno   3er. rayo (que oculta un planeta)

6. Neptuno  6to. rayo  5.    El Sol  2do. rayo

7. Urano 7mo. rayo

 (16-382)

 

 

El Zodíaco

 

...Cada uno de los siete rayos se expresa por intermedio de tres constelaciones, o por un triángulo de energía. Esta relación es la base de toda la Ciencia de los Triángulos y por consiguiente de la astrología misma y está además relacionada con los rayos, las constelaciones, sus planetas regentes y nuestra Tierra, en una gran síntesis de energías; relaciona a nuestro sistema solar con el todo mayor y a nuestro pequeño planeta no sagrado con el sistema solar. Permítanme repetir este enunciado y de este modo indicarles algunos hechos vitales, respecto a este mundo de energías entretejidas. Los rayos afluyen a través de las siguientes constelaciones. y son expresados y trasmitidos por su intermedio:

 

  1er. Rayo Aries     Sagitario  Capricornio.

  2do. Rayo     Géminis Leo  Piscis.

  3er. Rayo Cáncer Virgo  Capricornio.

  4to. Rayo Tauro   Libra  Sagitario.

  5to. Rayo Leo  Escorpio  Acuario.

  6to. Rayo Virgo    Sagitario  Piscis.

  7mo. Rayo    Aries     Cáncer  Capricornio.    (16-365/6)

 

Los puntos de los triángulos de energía o las constelaciones en los triángulos, dadas a continuación, constituyen hoy los factores controladores:

 

1er.    Rayo. – Aries: Esta constelación, como podría esperarse es la fuente de la energía inicial, que introduce la Nueva Era. [i78]

 

2do. Rayo. – Virgo: Esta constelación produce la acrecentada actividad del principio crístico en el corazón de la humanidad.

 

3er.  Rayo. - Cáncer: El movimiento masivo hacia la libertad, la liberación y la luz, que predomina hoy, es causado por la energía de este signo.

 

4to.  Rayo. - Escorpio: Por intermedio de esta constelación es probada la humanidad, el discípulo mundial.

 

5to.  Rayo. - Leo: Produce el desarrollo del individualismo y de la autoconciencia, tan prevaleciente hoy en escala mundial.

 

6to. Rayo. - Sagitario: Produce el esfuerzo enfocado y centralizado del aspirante mundial.

 

7mo. Rayo. - Capricornio: La energía capricorniana produce la iniciación y el vencimiento del materialismo.

    (16-366)

 

 

Regentes Planetarios

 

Las constelaciones y los planetas que rigen a las personas pueden tener y tienen, un efecto sobre la masa y otro sobre el hombre común, y un tercer efecto sobre el discípulo o el iniciado. Como las diversas energías y fuerzas circulan por todo el cuerpo etérico de nuestro sistema solar, su recepción y efecto dependerá del estado de los centros planetarios y del punto de desarrollo de los centros del individuo. Por eso difieren ampliamente los horóscopos y las tablas, y aparecen diferentes planetas rigiendo las constelaciones. Parece que no hay una regla fija, lo cual confunde al estudiante. La astrología ortodoxa impone una serie de reglas planetarias, siendo correctas en lo que concierne a la masa humana. Pero el discípulo, que vive centrado arriba del diafragma, responde a otras combinaciones... De allí que los tres diagramas no coin­cidan. Fueron transcritos a fin de explicar la situación en lo que respecta a los tres grupos:

 

1.    La mayoría de la gente comprendida en las conclusiones astrológicas ortodoxas reconocidas. [i79]

 

2.    Los discípulos e individuos evolucionados, comprendidos en las conclusiones de la astrología esotérica.

 

3.    Las Jerarquías Creadoras que proporcionan la posición in­termedia en este ciclo mundial.

 

 

 

TABULACIÓN. LA RELACIÓN EN LA ASTROLOGÍA ORTODOXA

 

CONSTELACIONES Y REGENTES PLANETARIOS EN CONEXIÓN CON EL HOMBRE COMUN


Constelación  Regente  RayoRelacionado con:

 

 1. Aries   Marte 6to. Rayo     Escorpio  El Mismo regente

 

2. Tauro  Venus     5to. Rayo    Libra  El Mismo regente

3. Géminis  Mercurio     4to. Rayo    Virgo  El Mismo regente

4. Cáncer    La Luna  4to. Rayo    Ninguno

5. LeoEl Sol  2do. Rayo   Ninguno

6. Virgo   Mercurio    4to. Rayo    Géminis El Mismo regente

7. Libra  Venus      5to. Rayo    Tauro        El Mismo regente

8. Escorpio     Marte 6to. Rayo    Aries  El Mismo regente

9. Sagitario     Júpiter 2do.Rayo    Piscis  El mismo regente

10. Capricornio    Saturno   3er. Rayo    Ninguno

11. Acuario Urano         7mo. Rayo  Ninguno

12. Piscis     Júpiter        2do. Rayo   Sagitario El mismo regente

 

a.    Los planetas no sagrados van en bastardilla.

b.    Todos los rayos están representados excepto el primero. Esto es interesante porque las masas se mueven dentro de su horóscopo y el aspecto voluntad está latente, pero inexpresado.

 

 

 

TABULACIÓN. LA RELACIÓN EN LA ASTROLOGÍA NO ORTODOXA

 

CONSTELACIONES Y REGENTES PLANETARIOS EN CONEXIÓN CON DISCÍPULOS E INICIADOS

 

 

Constelación     Regente   Rayo    Relacionado con:

 

1. Aries        Mercurio   4to. Rayo    Virgo    El mismo regente

2. Tauro  Vulcano 1er. Rayo    Piscis    El mismo regente

3. Géminis     Venus      3er. Rayo    Ninguno

4. Cáncer  Neptuno 6to. Rayo    Escorpio     El mismo regente

5. Leo  El Sol        2do. Rayo   Acuario   El mismo regente

6. VirgoLa Luna  4to. Rayo    Aries    El mismo regente [i80]

7. Libra   Urano      7mo. Rayo   Ninguno

8. Escorpio    Marte      6to. Rayo    Cáncer El mismo regente

9. Sagitario    La Tierra 3er. Rayo    Capricornio   El mismo regente

10. Capricornio      Saturno   3er. Rayo      Sagitario     El mismo regente

11. Acuario    Júpiter        2do. Rayo Leo El mismo regente

12. Piscis Plutón        1er. Rayo    Tauro El mismo regente

 

Nota: En conexión con los discípulos y los signos zodiacales, Gé­minis y Libra son dos constelaciones que –por medio de sus regentes– expresan la energía de 5to. y 7mo. rayos. Por alguna razón oculta no están relacionados con los otros signos.

 

La relación que existe entre las otras constelaciones, por medio de los planetas que expresan los rayos es:

 

1.    Tauro y Piscis, por medio de Vulcano y Plutón, se relacio­nan con el 1er. Rayo. Transmutación del deseo en sacrificio y de la voluntad individual en voluntad divina.

El Salvador Mundial

 

2.    Leo y Acuario, por medio del Sol y Júpiter, se relacionan con el 2do. Rayo. El desarrollo de la conciencia individual en conciencia mundial. Así el hombre llega a ser un servidor mundial.

El Servidor Mundial

 

3.    Sagitario y Capricornio, por medio de la Tierra y Saturno, se relacionan con el 3er. Rayo. El discípulo centralizado se convierte en iniciado.

El Iniciado

 

4.    Aries y Virgo, por medio de Mercurio y la Luna, se rela­cionan con el 4to. Rayo. Armonización del Cosmos y del individuo a través del conflicto, produciendo unidad y belle­za. Los dolores del parto del segundo nacimiento.

El Cristo Cósmico e Individual

 

5.    Cáncer y Escorpio, por medio de Neptuno y Marte, se rela­cionan con el 6to. Rayo. Transformación de la conciencia de la masa en la conciencia incluyente del discípulo.

El Discípulo Triunfante [i81]

 

 

 

TABULACIÓN. REGENTES PLANETARIOS EN TRES CLASIFICACIONES

 

ConstelaciónOrtodoxa   Discípulo    Jerarquía

 

1. Aries    Marte      Mercurio  Urano

2. Tauro    Venus     Vulcano Vulcano

3. Géminis     Mercurio  Venus        La Tierra

 

4. Cáncer  La Luna  Neptuno    Neptuno

5. LeoEl Sol El Sol El Sol

6. Virgo   Mercurio  La Luna     Júpiter

7. Libra Venus      Urano        Saturno

8. Escorpio   MarteMarte       Mercurio

9. Sagitario    Júpiter    La Tierra Marte

 

10. Capricornio    Saturno     Saturno   Venus

11. Acuario    Urano        Júpiter     La Luna

 

12. Piscis Júpiter Plutón Plutón

 

 

 

TABULACIÓN. NO ORTODOXA CONSTELACIONES, REGENTES y RAYOS

 

Constelación     Regente   Rayo    Relacionado con:

 

1. Aries  Urano  7mo. Rayo   Ninguno

2. Tauro  Vulcano  1er. Rayo    Piscis    El mismo regente

3. Géminis     la Tierra  3er. Rayo    Libra   El mismo regente

4. Cáncer  Neptuno  6to. Rayo    Sagitario     El mismo regente

5. Leo  El Sol  2do. Rayo   Virgo    El mismo regente

6. Virgo Júpiter  2do. Rayo   Leo  El mismo regente

7. Libra Saturno 3er. Rayo   Géminis El mismo regente

8. Escorpio    Mercurio  4to. Rayo    Acuario  El mismo regente

9. Sagitario    Marte   6to. Rayo    Cáncer El mismo regente

10. Capricornio  Venus  5to. Rayo   Ninguno

11. Acuario    La Luna  4to. Rayo    Escorpio     El mismo regente

12. Piscis Plutón  1er. Rayo    Tauro El mismo regente

 

Nota: Aries y Capricornio, en conjunción con la energía de 5to. y 7mo. rayos, están solos. Las otras constelaciones y rayos están relacionados entre sí, en todos los casos:

  

a. 1er. Rayo:  Tauro y Piscis, por medio de Vulcano y Plutón

b. 2do. Rayo: Leo y Virgo, por medio del Sol y Júpiter

c. 3er. Rayo:  Géminis y Libra, por medio de la Tierra y Saturno

d. 4to. Rayo:  Escorpio y Acuario, por medio de Mercurio y la Luna

e. 6to. Rayo:  Cáncer y Sagitario, por medio de Neptuno y Marte   (16-60/4)

 

 

 

Las Doce Constelaciones

 

Aries

 

Respecto a Aries, que es el agente principal, o expresa el primer Rayo de Voluntad o Poder, el rayo destructor, podría decirse que la energía de primer rayo proviene del Prototipo de la Gran Osa Mayor, que se transmuta en la fuerza y la actividad del Logos planetario de primer rayo y se desarrolla como Su triple actividad, guiado por tres planetas regentes –Marte, Mercurio y Urano.

 

Marte personifica la fuerza de sexto rayo y conduce al idealismo y, frecuentemente, al fanatismo destructor, la lucha, la contienda, la guerra, el esfuerzo y [i82] la evolución... Mercurio personifica la energía de cuarto rayo y eventualmente lleva al hombre alrededor de la rueda de la vida y, por medio del conflicto, puede llegar a obtener la armonía... Urano personifica la energía del séptimo rayo y su trabajo es análogo al de Mercurio, porque dicho rayo relaciona espíritu y materia y une el fuego eléctrico y el fuego por fricción, trayendo la manifestación. (16-85/6)

 

La experiencia conduce a la regencia y el hombre que en este signo es fuerza personificada de primer rayo, desarrolla el poder de organizar, controlar las fuerzas, particularmente la energía de la muerte, y el poder de destruir aplicado con amor, de dominar las multitudes, de colaborar con el plan y de aplicar la Voluntad, guiando y dirigiendo en forma debida y correcta los asuntos planetarios. (16-91/2)

 

 

Tauro

 

Los dos rayos que afectan directamente a [este] signo son... el quinto (por intermedio de Venus) y el primero (por intermedio de Vulcano). Ambos, cuando son considerados en combinación con la Tierra (expresión del tercer rayo), demuestran una combinación de rayos muy difícil, pues todos pertenecen a la línea de primer rayo de energía...  Esta combinación aumenta grandemente la ya difícil tarea del taurino. El segundo Rayo de Amor-Sabiduría y su línea subsidiaria de energía aparece sólo en forma indirecta y, por lo tanto la persona nacida en este signo carece frecuente y notablemente de amor y sabiduría. (16-297)

 

[Tauro] está regido sólo por dos planetas. Venus es su regente exotérico y Vulcano su regente esotérico y jerárquico. Tocamos aquí uno de los misterios de la Sabiduría Eterna. Venus mantiene una relación excepcional con la Tierra, distinta de la de cualquier otro planeta, dando lugar por lo tanto a una relación mucho más estrecha entre Tauro y la Tierra, como ninguna otra relación zodiacal en lo que a nuestro planeta se refiere.  (16-289)

 

El regente esotérico de Tauro es Vulcano, el forjador de metales, que trabaja en la expresión más densa y concreta del mundo natural... Desciende a las [i83] profundidades para hallar el material sobre el cual ejercer su arte innato y modelar lo que es bello y útil. Por lo tanto Vulcano es aquello que representa al alma, el hombre individual, interno y espiritual; en su actividad tenemos la clave de la tarea que realiza el alma en la eterna ronda de la rueda de la vida. (16-291)

 

Vulcano es jerárquicamente el regente que condiciona al planeta y determina el hecho de que el hombre es el macrocosmos del microcosmos y que el cuarto reino modela o condiciona a todos los reinos subhumanos. (16-292)

 

 

Géminis

 

Mercurio es el regente exotérico y Venus el regente esotérico, pues ambos personifican las energías del cuarto Rayo de Armonía a través del Conflicto y del quinto Rayo del Conocimiento Concreto o Ciencia, que es comprensión embrionaria de las causas y condiciones resultantes de aquéllas y también del Plan. (16-268)

 

...El regente jerárquico de Géminis es la Tierra, planeta no sagrado... Un breve estudio demostrará que en estos tres regentes tenemos la más interesante secuencia de fuerzas, porque los rayos 3, 4 y 5 producen una síntesis de actividad y de ávidas potencias, esenciales para el desenvolvimiento de la humanidad. (16-269)

 

 

Cáncer

 

...Resultará claro por qué la Luna y Neptuno, transmitiendo las energías de la naturaleza psíquica inferior y de la forma, más la tendencia a realizar por medio del conflicto, rigen a Cáncer directa o indirectamente en forma muy potente. Controlan la forma y la naturaleza síquica inferior y producen el campo de batalla (que más adelante se trasforma en la tierra ardiente) donde ambos “enfrentan el conflicto final”, su analogía superior, el alma y el espíritu, porque la materia es espíritu en su grado inferior y el espíritu es materia en su grado superior. (16-257)

 

Debido a que la luz de Cáncer –alegóricamente hablando–, es difusa, vaga e incipiente, están ausentes influencias de primer [i84] rayo de intención enfocada y voluntad plena de propósito, y de segundo rayo de amor-sabiduría (dualidad reconocida y experiencia adquirida). Sus influencias no están presentes, excepto en la medida en que el amor y el propósito subyacen en toda la manifestación, pero no están enfocados en este signo. (16-250)

 

 

Leo

 

Como ya se ha dicho, el Sol vela ciertos planetas ocultos y, en el caso de Leo, los dos planetas por medio de los cuales el Sol enfoca sus energías o influencias (como un lente) son Neptuno y Urano... Sin embargo, la actividad de Urano sólo se registra en una etapa muy avanzada de desarrollo en el Sendero... (16-225)

 

Por ser Neptuno el signo de la Deidad de las Aguas, está relacionado al sexto Rayo que rige el plano del deseo, emocional o astral. Cuando Neptuno está así activo en el hombre avanzado de Leo, la emoción-deseo ha sido trasmutada en amor-aspiración, dedicados al alma y orientados hacia ella... (16-226)

 

...El Sol, cuando vela a Neptuno, produce un efecto potente sobre la personalidad, simbolizada para nosotros por el cuerpo astral, mientras que Urano (que está también oculto por el Sol) simboliza el efecto del alma sobre la personalidad. De aquí la actividad del séptimo rayo, que es, desde cierto ángulo, el aspecto inferior del primer rayo. (16-228)

 

 

Virgo

 

Por medio de estos tres regentes planetarios [Mercurio, la Luna y Júpiter] afluyen las energías de cuarto rayo, gobernando la mente por medio de Mercurio y la forma física por medio de la Luna; las energías de primer rayo expresan la voluntad de Dios, comenzando a ejercer control en el hombre autoconciente (desarrollado en Leo) y las energías de segundo rayo, que personifican el amor de Dios, afluyen a la manifestación. Voluntad, amor y armonía a través del conflicto, son las fuerzas controladoras que hacen al hombre lo que es, siendo las energías gobernantes que dirigen y utilizan a la mente (Mercurio), a la naturaleza emocional, el amor (en Júpiter) y al cuerpo físico (la Luna o la Voluntad [i85] esotérica) para los propósitos de la expresión y manifestación divinas. (16-201/2)

 

 

Libra

 

Desde el ángulo de la astrología ortodoxa Venus rige a Libra, mientras que, hablando esotéricamente, rige Urano. Saturno es el regente en este signo de esa estupenda Jerarquía Creadora –uno de los tres grupos principales de Constructores– que forman parte del tercer aspecto de la divinidad... (16-187)

 

Estos tres planetas se hallan (a través de los rayos, de los cuales son los medios) en la primera línea principal de fuerza, la de voluntad o poder y de propósito y meta visualizada:

 

1.  Urano. - 7mo. Rayo de Magia Ceremonial. Dios, el Padre. El que relaciona. El origen de la dualidad. El que percibe el fin desde el principio. La conciencia espiritual.

De la Intuición a la Inspiración

 

2. Venus. - 5to. Rayo de la Mente. Dios, el Hijo. El Hijo de la Mente. El que incluye. La conciencia egoica.

Del Intelecto a la Intuición

 

3.  Saturno. - 3er. Rayo de Inteligencia. Dios, el Espíritu Santo. El que conoce. La mente. La conciencia humana.

Del Instinto al Intelecto

 

Por esta razón básica -fundada en la triple relación anterior- Libra es el “punto de equilibrio” en el zodíaco. (16-190)

 

 

Escorpio

 

Ahora consideraremos los Regentes que rigen el signo de Escorpio [Marte y Mercurio]... Por medio de estos Regentes, dos Rayos son puestos en una poderosa posición controlante en Escorpio, el sexto Rayo de Devoción y el cuarto Rayo de Armonía a través del Conflicto, estando este último peculiarmente relacionado con la modalidad del desarrollo humano, y el primero con los métodos de la época pisciana, que está justamente pasando. Marte y Mercurio controlan, y el primero está particularmente activo, porque es el planeta ortodoxo que controla a la [i86] personalidad en Escorpio y también el planeta esotérico que condiciona el desenvolvimiento del discípulo. (16-162/3)

 

 

Sagitario

 

El regente de Sagitario, desde el punto de vista ortodoxo, es Júpiter, y desde el punto de vista del Sendero del Discipulado, la Tierra. Marte rige este signo desde el punto de vista de las Jerarquías implicadas. (16-145)

 

Un análisis de esto demostrará que las “fuerzas del conflicto” son poderosas en este signo, principalmente en la vida del discípulo. La Armonía a través del Conflicto está incesantemente activa, y aparece en las asignaciones ortodoxas y esotéricas. El poder destructivo de primer Rayo enfocado en Plutón, trae cambio, oscuridad y muerte. A esta intensidad y potencia de Plutón debe ser agregada la fuerte y dinámica energía del planeta Marte. Este signo pone a la familia humana y al individuo bajo la ley de la lucha por un ideal superior o inferior, basada aquí en el sexto Rayo de Devoción. (16-147)

 

 

Capricornio

 

Los regentes planetarios exotéricos y esotéricos de Capricornio son los mismos, y Saturno que rige el curso del hombre en este signo, no importa si se halla en la rueda común o revertida, o si está en la Cruz Mutable o en la Cruz Fija. Cuando ha recibido la tercera iniciación y puede ascender conscientemente a la Cruz Cardinal, se libera, del dominio de Saturno y queda bajo la influencia de Venus... En la Cruz Mutable y en la Cruz Fija tenemos el llamado rayo verde, controlando no sólo las obligaciones kármicas en la vida cotidiana en el sendero de evolución, sino también las experiencias y los procesos evolutivos. La razón reside en que Capricornio es un signo terrestre y los rayos tercero y quinto actúan preeminentemente por medio de este signo, personificando al tercer aspecto mayor de la divinidad, la inteligencia activa, además de su poder subsidiario, el quinto rayo de la mente, los cuales a través de Capricornio, afluyen a Saturno y a Venus, llegando así a nuestro planeta, la Tierra. (16-130/1) [i87]

 

 

Acuario

 

Los regentes de Acuario [Urano, Júpiter y la Luna] son de peculiar interés. Forman un grupo eficaz de planetas y traen las influencias del séptimo, segundo y cuarto rayos. Éstos son los rayos que determinan, preeminentemente, tanto las etapas finales del progreso del hombre como las iniciales, y son más poderosas al comienzo del sendero involutivo y al final del sendero evolutivo, que en el período intermedio. Determinan las etapas finales y los acontecimientos en el Sendero de Iniciación. El séptimo rayo trae a la manifestación, en el plano físico, el principal par de opuestos –espíritu y materia– relacionándolos entre sí, produciendo oportunamente un todo funcionante. El segundo rayo produce la expresión del alma y de la conciencia espiritual y también el poder de irradiar amor y sabiduría en la tierra, mientras que el cuarto rayo indica el campo de servicio y el modo de alcanzar la meta. El conflicto y la lucha son los modos o métodos, para lograr la armonía y expresar así las características verdaderamente humanas, porque el cuarto rayo y la cuarta Jerarquía Creadora constituyen esencialmente una expresión de la verdad. (16-112)

 

...El tercer rayo se expresa poderosamente a través de este signo, llegando a nuestro planeta a través de Urano y la Luna, que en este caso oculta o vela simbólicamente a Urano. Por lo tanto, tenemos la doble influencia que ejerce Urano, expresando la cualidad y trayendo las energías del séptimo rayo en un caso, y las del tercer rayo en otro. En último análisis, el séptimo rayo es la energía diferenciada y enfocada del primer rayo, cuando expresa la voluntad del primer aspecto de la divinidad en la Tierra, por medio del poder de relacionar y traer a la manifestación objetiva –por un acto de la voluntad– el espíritu y la materia. Esto lo efectúa mediante la actividad del tercer rayo, expresándose a través de la humanidad y sus unidades individuales, aunque se combina con la energía de los tres rayos liberados por medio de los planetas regentes:

 

1.    Urano –Séptimo Rayo – La voluntad de ser y de conocer simultáneamente en todos los planos de manifestación. [i88]

 

2.    Júpiter – Segundo Rayo – La fusión del corazón y la mente, propósito subjetivo de la manifestación. Esto se lleva a cabo en la rueda exotérica, mediante la actividad del tercero y séptimo rayos.

 

3.    La Luna – Cuarto Rayo – La voluntad de ser y conocer, más la fusión del corazón y la mente, resultado del trabajo realizado en la cuarta Jerarquía Creadora bajo la influencia de la energía que produce armonía por medio del conflicto. (16-113)

 

 

Piscis

 

Respecto a los rayos que se expresan a través de los regentes planetarios y que absorben las influencias del signo Piscis o colaboran con ellas, influyendo de este modo a nuestro planeta y a la humanidad, tenemos una situación muy interesante. Dos rayos mayores se expresan a través de los regentes de Piscis, exotérico y esotérico: el primer Rayo de Voluntad o Poder, enfocado por intermedio de Plutón, y el segundo Rayo de Amor-Sabiduría. La interacción de estas dos potencias:

 

1.    Produce la dualidad de este signo.

 

2.    Constituye el mayor problema de Piscis –sensibilidad psíquica.

 

3.    Origina la atracción del Sendero, primeramente el sendero de evolución y después la atracción del sendero de probación, cuya consiguiente transferencia a la Cruz Fija (es todo lo que podemos comprender inteligentemente) comienza realmente en Piscis; aunque impulsado (si puedo utilizar esta palabra) en Aries, comienza y termina en Piscis.

 

4.    Precipita el proceso de transmutación y la eventual evasión por medio de la muerte.

 

5.    Revela el significado, la actividad y la belleza de la muerte y del trabajo del destructor.

 

Por lo dicho anteriormente se evidenciará cuán importante y poderoso es este signo. A través de Júpiter, su regente ortodoxo, esa fuerza ejerce presión y “une todo” y, en este caso, vincula a los dos peces y los ata en relación activa. En consecuencia, es la actividad de la fuerza de segundo rayo que relaciona alma y forma, uniendo a ambas; esta potencia magnética describe peculiarmente la actividad de Piscis. (16-103/4)

 

 




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